Uruguay se despidió del Mundial en octavos de final y se abre la interrogante de cara al futuro de la selección y su director técnico
Contacto con Ricardo Piñeyrúa del equipo de 13 a 0.
(emitido a las 7.50 hs.)
EMILIANO COTELO:
Se terminó el Mundial para nosotros, estamos volviendo a la realidad, veremos cuál es la realidad, si es necesariamente ya la campaña para las elecciones nacionales o si hay otros temas en la agenda, los discutiremos luego. De todos modos, si bien estamos afuera de la Copa del Mundo de Brasil, todavía hay algunas consideraciones para hacer.
(Audio relato Álvaro González Márquez.)
Corre con la pelota Teo Gutiérrez, la tiró contra el área, va para Jackson Martínez. Cambió muy bien para [Pablo] Armero, Armero pisa el área, va, tira el centro al segundo palo, pelota por el medio. Gol. Otra vez James Rodríguez, sólo apareció adentro del área chica después de una muy buena jugada colectiva de Colombia. El centro pasado, cuando todos esperaban el cabezazo al arco cabeceó al medio y quedó sin marca James Rodríguez para tocar con pierna derecha y en el comienzo del segundo tiempo marcar el segundo tanto para Colombia. Colombia 2, Uruguay 0"
(Fin.)
EC – "Profe" Ricardo Piñeyrúa, buenos días.
RICARDO PIÑEYRÚA:
Buenos días, Emiliano.
EC – Ese fue el momento crítico, ¿no?, allí se derrumbó la esperanza. Ya venía difícil la cosa y con el segundo gol al comienzo del segundo tiempo se hizo muy cuesta arriba.
RP – Sí, en ese momento se complicó.
Uno tiene una primera reflexión sobre el partido y sobre cómo fueron las cosas, después vas madurando algunas cosas que sucedieron. Es un partido que Colombia ganó bien, pero también es cierto que es un partido en el que Uruguay tuvo en el segundo tiempo no menos de cuatro claras situaciones de gol y Colombia ninguna en todo el partido, salvo los dos goles. La eficacia que tuvo Colombia en el partido del otro día fue extraordinaria.
Manejó el partido, sobre todo en el primer tiempo, con una soltura y una tranquilidad enorme, hubo momentos en que pareció que nos iban a aplastar, que iba a ser una paliza, porque Uruguay corría atrás de la pelota y no la podía agarrar. Después Uruguay como que reaccionó, pudo tener la pelota en el segundo tiempo, todos recordamos el remate del "Cebolla" Cristian Rodríguez, uno de Edinson Cavani, el del "Mono" Maximiliano Pereira, hay alguno más, que fueron jugadas que terminaron transformando a David Ospina, el arquero colombiano, en una de las figuras del partido. Pero no se pudo hacer ese gol que pusiera a Uruguay más cerca para ver si eso cambiaba el partido y finalmente se perdió.
Creo que fue una derrota justa pero que en definitiva, después de pensar un poco el partido, es menos de lo que yo en el primer momento sentí. Pasa siempre lo mismo, cuando Uruguay juega con los equipos chilenos, colombianos, ecuatorianos, hasta peruanos y venezolanos, los del Pacífico que tienen ese manejo y ese dominio de la pelota que los uruguayos no tienen, parece que nos están pasando por arriba. Pero después los resultados no son esos, porque en definitiva a veces se gana y a veces se pierde, y con Colombia nos ha tocado últimamente más perder que ganar.
La primera impresión que me quedó fue muy mala, pero la segunda fue que en realidad fue un partido que tuvo en algún momento la posibilidad de que Uruguay pudiera ponerse a tiro para cambiar la historia, pero los dos goles y la forma en que los hicieron me parece que fueron determinantes para cómo fue el partido.
EC – Una de las preguntas es cuánto se notó la ausencia de Luis Suárez.
RP – Uruguay tiene un buen equipo, muy trabajado, muy disciplinado, que tiene nociones de cómo pararse en la cancha, cómo trabajar, cómo correr, corre y marca mucho, pero es un equipo que tiene muy poca lucidez. Por ejemplo, cuando James Rodríguez hace el primer gol Colombia no había pateado al arco, o lo había hecho de lejos. Nos estaban ahogando porque tenían la pelota y jugaban, pero no llegaba, y él hace un gol que es extraordinario, para la pelota con el pecho y antes de que caiga al piso la agarra de volea y la coloca contra el palo arriba de Fernando Muslera.
EC – Precioso gol, uno de los mejores del Mundial.
RP – Un gol bárbaro. Tabárez en la conferencia de prensa dijo: es de esos goles en los que el 100% del gol es del jugador, no hay mérito de otro, de nadie, no hay error del arquero.
Nosotros no tenemos un jugador de esas características que tenga desempeño en la mitad de la cancha, de buen armado, de prolijidad; somos más rústicos, por decirlo de alguna manera. Incluso Suárez, que es el mejor jugador de Uruguay, tampoco es un punta de esos prolijos, es un rústico que hace cosas que de repente sorprenden.
Sin esas estrellas, sin James Rodríguez, sin Lionel Messi, sin Neymar, sin Karim Benzema, un equipo tiene problemas. En este Mundial, sacando a Alemania que es bastante más parejo, todos los equipos que han andado muy bien tienen una figura que se destaca claramente. Esas figuras son insustituibles, cuando no están, no están y se acabó.
No hay forma de evaluar cuánto se siente, pero no es lo mismo Uruguay con o sin Suárez. No importa si en el partido cuando juega hace dos goles o no los hace, la fuerza que tiene, el imán de obligar a prestarle atención, a marcar, Uruguay no tiene otro jugador de esas características.
No puedo decir que si hubiera jugado Suárez lo hubiéramos ganado, pero estoy seguro de que el partido era totalmente distinto e incluso en ese final del partido perdiendo 2 a 0, esos últimos 20 minutos, con Suárez en cancha, la situación podría haber sido diferente. De hecho Uruguay terminó jugando con tres puntas, Cristhian Stuani, Abel Hernández y Cavani, y ese lugar donde estaba Abel Hernández era el lugar donde tendría que haber jugado Suárez.
Creo que la ausencia de Suárez fue determinante.
EC – Te lo pregunto para anotar que tuvimos un bache importante en ese equipo el sábado: la ausencia de Luis Suárez, que para empezar es responsabilidad de él, porque lo que hizo en el partido contra Italia, haya mordido o no -porque eso lo discutiremos eternamente- fue evidentemente un comportamiento antideportivo que el juez podía ver o no, las cámaras podían registrar o no, pero es algo que obviamente no debió haber hecho, sabiendo lo que pesa en el equipo uruguayo y habiendo estado ausente por la lesión. También estuvo la forma como el Comité de Disciplina de la FIFA lo sancionó, esa sanción absolutamente desmesurada. Y aquí voy a lo que quería preguntarte: todo el lío Suárez, más allá de que estuviera o no, ¿te da la impresión de que afectó al equipo?
RP – A mí me parece que sí, sobre todo me parece que lo afectó mucho en el primer tiempo. Alguien me va a decir "¿Cómo es eso de que lo afectó en un tiempo y en el otro no?" Muchas personas hacemos alguna actividad física -caminamos, corremos, jugamos al fútbol o al basquetbol-, cuando vamos a empezar a hacer la ejercitación hay una serie de cosas que están rondando en nuestra cabeza, algunos dolores o molestias, que con el inicio de la entrada en calor, de correr o jugar, se van alejando. Cuando uno está en el medio de esa actividad todos aquellos problemas que habían aparecido allá atrás no están más.
Yo creo que Uruguay entró al partido muy cargado con este tema, entre que había que vengar a Suárez y había que demostrar que nosotros teníamos rebeldía, etcétera, y fueron momentos terribles porque no podíamos parar una pelota porque rebotaba en los pies. Me acuerdo de un pase bárbaro que le da Diego Forlán a Cavani que es típica jugada de gol de Cavani que recibe medio corriendo de derecha hacia izquierda al banderín del córner, en la cabeza del área, él la tiene como una jugada en la que recibe y toca hacia adentro y medio como de costado saca el remate cruzado, ha hecho un montón de goles así, y cuando la quiso parar casi se le va al banderín del córner.
Después ya metiéndose en el partido creo que Uruguay empezó a cambiar, a olvidarse de sus problemas y a concentrarse en sus obligaciones, por definirlo de alguna manera.
Ese tipo de cosas sacan la cabeza de donde uno está metido, porque si en vez de estar pensando en cómo jugar con Colombia o estar tranquilo mirando el mar, capaz que estaban muy metidos en un problema al que no debían haber accedido. Yo creo que influyó mucho. Uno no lo quería aceptar, pero en el momento en que la FIFA comunicó la sanción contra Suárez fue casi como decir que se terminó el Mundial para ustedes. Sobre todo teniendo en cuenta cómo se dieron los cruces. Miraba ayer el cruce de Costa Rica con Grecia y decía ¿por qué perdimos ese partido con Costa Rica?, estaríamos jugando ahí con Grecia y estábamos entre los ocho mejores, me juego la vida, y hasta sin Suárez me atrevo a decir. Pero esa es otra historia.
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EC – El Maestro Óscar Washington Tabárez dejó abierta la puerta a continuar al frente de la selección uruguaya. Lo dijo el sábado en la conferencia de prensa, me gustaría que en seguida con "el profe" Piñeyrúa hiciéramos por lo menos un primer encare de los desafíos que vienen de ahora para adelante.
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EC – ¿Y por quién se inclinan ahora los uruguayos? Marta, de Colón, dice: "Mirando al Mundial y lo que queda, por los ticos, ¡que no ni no! La otrora suiza del Caribe, y si no, Colombia". María, de Punta, dice: "Yo hincho por Argentina. Nos apoyaron con la sanción de la FIFA. Ni loca por Costa Rica y Colombia que nos dejaron afuera".
Después están los que buscan interpretar por qué Romina o María Eugenia se inclinan por Colombia, dice este oyente que es por James, por el goleador, "sex symbol del Mundial. Shakira y Rihanna lo confirman".
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(Audio Diego Lugano.)
"Podríamos haber quedado eliminados en la primera fase, pero de la intensidad con la que lo vivimos todos creo que no nos olvidamos más. Por eso desde mañana [hay que] empezar a luchar por el próximo Mundial"
(Fin.)
EC – Así hablaba el capitán, Diego Lugano, ayer, en este fin de semana, luego de la derrota ante Colombia, luego de la eliminación en el Mundial de Brasil 2014.
Abría la puerta a lo que viene, a lo que la selección uruguaya tiene por delante después de un traspié o del resultado al que se logró llegar en Brasil.
¿Por dónde empezar a analizar esto?
RP – En realidad el fútbol tiene como ciclos mundiales que son como los electorales, por ejemplificarlo con algo. Incluso se supone que los ejecutivos de la Asociación Uruguaya de Fútbol van de Mundial a Mundial, casi nunca se cumple porque los terminan sacando antes o se terminan yendo antes por distintos motivos; de hecho el Ejecutivo que ingresó después del Mundial de Sudáfrica no terminó su ejercicio. Está bien pensar que es un momento de evaluación y de repensar todo porque empieza un nuevo ciclo.
También es cierto que el fútbol desde hace mucho tiempo a nivel de selecciones se ha transformado en una máquina que no para. No es que ahora paramos y vamos a empezar después, no, las fechas FIFA siguen, ya hay una en agosto, en junio o julio del año que viene es la Copa América de Selecciones en Chile, el otro año ya hay Eliminatorias y un campeonato de América creo que para festejar los 100 años de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), donde van a participar selecciones de Norteamérica, etcétera.
Porque yo he escuchado a muchos decir "bueno, ahora tenemos que hacer la renovación", es cierto que necesariamente va a existir. Hay jugadores que ya no van a seguir en la selección, porque terminó su ciclo, hay otros que probablemente puedan seguir un tiempo pero no necesariamente van a llegar al final del siguiente ciclo que es el próximo mundial en Rusia, hay otros que se tendrán que ir incorporando.
Yo lo que creo también es que Uruguay va a sufrir mucho ese cambio porque es un país que tiene muy pocos jugadores, no es que ahora vienen otros atrás que son tan buenos como estos, no hay tantos atrás.
EC – Esa es una afirmación seria, ¿podés desarrollarla?
RP – Si, ¡cómo no! Es muy simple, miremos el fútbol del mundo donde juegan los jugadores uruguayos y pensemos cuántos de ellos no están en la selección. Vamos a encontrar que son muy pocos, es decir, siempre se pregunta "Ah, ¿por qué no traía al "Diente" Nicolás López?", bueno, "el Diente" López, que fue Botín de Plata en el Mundial juvenil de Turquía sub-20, no juega, pero es uno de los que está afuera que podría ser. Me acuerdo de Mauricio Pereira, el chico que jugaba en Nacional, que estuvo en Lanús y que está en Rusia, que fue sub-20 hace unos años junto con Sebastián Coates. Miguel Britos es un nombre que se menciona siempre, un zaguero que juega en Italia. Pero no hay tantos jugadores, entonces hay un proceso que está también vinculado a los jugadores que están saliendo y que van a salir, que van a empezar a tener cierto rendimiento y que van a llegar a la edad óptima para su rendimiento futbolístico, que es entre los 27 y los 30 años. Esa es la edad que tiene esta generación que se va a empezar a ir, porque acá hay muchos jugadores que tienen 28, 29 años y que no van a llegar al próximo mundial, algunos de ellos ya empiezan a no tener equipos o a no jugar con la misma continuidad que antes.
Pero hay algunos jugadores de esta selección que van a jugar el próximo mundial y que van a ser las figuras: Muslera, Diego Godín, Martín Cáceres, Suárez, Cavani, son algunos de los que más se destacan, el propio "Cebolla" Rodríguez. Son todos jugadores que de repente llegan a ese campeonato del mundo con 30, 31, 32 años, están en una edad perfecta, es la edad que tenía Forlán cuando fue el mejor jugador del Mundial en Sudáfrica.
Me parece que hay que tener mucho cuidado, porque a nosotros nos encanta, es como que ahora tenemos que llenar espacios periodísticos para llenar el vacío del Mundial y entonces empezamos… y después no es tan así. Hay muchísimos jugadores abajo, uno miraba la final de Danubio y Wanderers y ahí hay una cantidad de talentos, hay una selección que se está preparando que va a jugar el sub-20, hay una selección juvenil que en sub-17 y sub-20 fue dos veces vicecampeona del mundo, pero tampoco es tan fácil.
EC – ¿Cómo decías? Mencionabas esos jugadores de estos últimos partidos acá en el Campeonato Uruguayo, ¿y entonces?
RP – Que cuando uno mira, yo me acuerdo de Danubio Wanderers, que había jugadores muy talentosos.
EC – ¿Y entonces qué pasa, todavía no están prontos?
RP – Yo creo que si no tienen experiencia a nivel de la alta competencia no van a tener un rendimiento adecuado para integrar la selección. Me parece que hoy es casi un paso imposible de hacer. Sacando las selecciones europeas, obviamente, en todos los demás países la integración de sus selecciones era casi 100% de jugadores que están en el fútbol europeo o en grandes ligas.
EC – Ese es un punto bien crítico y muy interesante para discutir. Tú estás diciendo que para integrar la selección prácticamente hay un requisito que es estar jugando en el fútbol europeo.
RP – Pero no lo digo como requisito, es que sino no tienen nivel de competencia. Es muy difícil que un jugador que no compite en determinado nivel de exigencia todos los fines de semana pueda jugar en un campeonato del mundo y tener un rendimiento adecuado. Nuestra liga es muy mala en ese sentido.
Vuelvo a lo mismo: la final del campeonato uruguayo fue una final donde hubo un sub-23 reforzado, eran chiquilines, Fabricio Formigliano, Emiliano]Velázquez son los compañeros de José María Giménez, que jugó en la selección, recién están empezando a jugar al fútbol. Si uno los compara con los cinco, siete años, que tiene Cáceres jugando en la Juventus al lado de Giorgio Chiellini, o antes en el Barcelona, esa experiencia de tantos partidos, de Italia, copa UEFA es algo que no se compra, a eso me refiero.
Esos jugadores se van a ir al exterior y muchos de ellos van a ser figuras, pero no es mañana que va a pasar eso. A eso me refiero. Quien venga a la selección va a tener que ir haciendo un proceso de integración paulatina de esos juveniles a esa selección para ir integrando un proceso, que por suerte ya lo han hecho con este proceso de largo plazo que se hizo durante seis años con todas las selecciones juveniles.
EC – ¿Y en cuanto al director técnico?
RP – Me parece que con la experiencia que ha adquirido Tabárez estaría muy bueno que le ofrecieran continuidad. Lo que pasa es que Tabárez va a seguir si le ofrecen una propuesta que abarque todo el trabajo que está haciendo él, no creo que sea un tema de dinero.
EC – Sí, él lo planteó en esos términos en la conferencia de prensa del sábado.
RP – Sí, si una de las quejas que tenían contra el Ejecutivo anterior los clubes que lo llevaron era la inversión que se hacía en la selección, si la propuesta es reducir la inversión Tabárez no va a agarrar. Ese es un gran desafío, porque quien venga… El problema es que después de Tabárez se acabó aquello de que viene un entrenador de la selección, lo de Tabárez fue algo que fue mucho más allá de eso, más allá de si a uno le gusta una cantidad de cosas que hace. Es un proceso integrador, eso que yo decía. ¿Por qué juega un juvenil como Giménez en la selección? Cuando Giménez entró en la selección mayor en aquel momento en que se lesionaron Godín y Lugano y no teníamos zagueros, y jugó Andrés Scotti con él frente a Colombia en Montevideo junto con él fueron convocados a la selección Gastón Silva, de Defensor Sporting, y Velázquez, de Danubio, tres juveniles que habían estado en la selección sub-20 y que Tabárez ya conocía por ese trabajo. Les resultó muy fácil integrarse, uno quedó en el banco de suplentes, el otro fue titular y el tercero quedó afuera del plantel, pero ya fueron convocados.
Ese trabajo de largo aliento de juveniles en adelante, si no existe, para lo pequeño que es Uruguay, cuando lleguen a la selección nos va a pasar lo que nos pasaba, que cuando íbamos a los mundiales era un desastre, todos peleados, desorden en las concentraciones, toda esa historia que vivimos y que no quisiéramos volver a vivir, mucho menos en un país que ha empezado a cambiar su cabeza con respecto a la selección y hay un afecto y un amor por la selección que en Uruguay hace diez años atrás no existía.
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