Emitido el martes 22 de julio a las 08.40 hs.

La emisión de ayer de En Perspectiva tuvo como tema central el caso de irregularidades y corrupción en ASSE (Administración de los Servicios de Salud del Estado), que el viernes pasado derivó en los procesamientos de 10 personas, entre ellos Alfredo Silva, representante de los trabajadores en el directorio de ese organismo, y Heber Tejeira, responsable de la comisión de tercerizaciones de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP).

Una de las entrevistas, más o menos a esta hora, fue con Gustavo Signorele, integrante de la Mesa Representativa del PIT-CNT y dirigente de la Asociación de Funcionarios Judiciales del Uruguay (AFJU). La nota buscaba saber cómo analizaba el PIT-CNT esta serie de hechos oscuros en los que están involucrados, por un lado, el director de ASSE nombrado por la central sindical, por otro un dirigente importante de la FFSP y, aparte, los directivos de una cooperativa que fuera impulsada desde el gremio de funcionarios de ASSE.

En determinado momento del diálogo yo anoté que este del viernes no es el primer dolor de cabeza de este tipo que el PIT-CNT enfrenta este año, ya que hace pocos meses varios empresarios de la construcción denunciaron que personas que hablaron con ellos en nombre del Plan de Vivienda Sindical (PVS) les habían solicitado comisiones, o "coimas", a cambio de contratos para la edificación de conjuntos habitacionales.  Signorele replicó que esa era una situación diferente porque aquellos hechos habían ocurrido entre "empresarios privados". Y agregó: "Ni funcionarios, ni militantes, ni el compañero de la central fueron los que pidieron coimas para contratos en el sistema de los planes de vivienda sindical".  La puntualización de Signorele no me convenció porque yo creía –y dije al aire- que uno de los involucrados en el pedido de esas comisiones había sido Eduardo Burgos, dirigente de la UNTMRA y uno de los responsables del PVS en el PIT-CNT. Signorele puntualizó que, si bien Burgos había cometido un error al firmar una autorización para que  varias sociedades anónimas realizaran contactos invocando a la central de trabajadores, el propio Burgos no había tenido nada que ver en las negociaciones con las constructoras que incluyeron pedidos de comisiones. Yo seguía confundido y planteé mis dudas con respecto a esa versión de los hechos, sobre todo porque tenía presente que el jueves pasado Burgos había presentado renuncia a su cargo en la comisión que lleva adelante el PVS.

Sea como sea, yo debo reconocer que me equivoqué. Mi costumbre es revisar todos los antecedentes de los temas que vamos a tratar en el programa. Pero esa entrevista con Signorele fue resuelta a último momento para sustituir a otra, con Beatríz Fagián, de la FFSP, que estaba combinada pero no cumplió con los horarios pactados. Lo cierto fue que en determinado momento del reportaje con Signorele tuve que apelar simplemente a la memoria. Y la memoria me traicionó

Lamento entonces haber sugerido que Eduardo Burgos había solicitado comisiones a cambio de contratos de obras del PVS. Hasta ahora no hay ninguna denuncia que sostenga eso. La acusación de haber pedido esas comisiones se refiere a gestores pertenecientes a empresas privadas que se presentaban como autorizadas por el PVS.

En este programa, En Perspectiva, una de nuestras obsesiones es la calidad de la información que manejamos, por respeto a los oyentes y por respeto también a las personas a quienes mencionamos. Por supuesto que esa preocupación implica un cuidado especial cuando están en juego el nombre y el honor de una persona.

Por eso me parece fundamental pedir disculpas por el error de ayer, a la audiencia, a Eduardo Burgos y al entrevistado, Gustavo Signorele.

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