El empresario intentó evitar la destrucción de espinaca deshidratada vencida, adulterando la fecha de vencimiento y enviando a destruir un producto similar. 

Según informó la IMM a través de un comunicado, la comuna desarrolló durante el fin de semana un operativo con el que logró frustrar una "millonaria maniobra" por parte del empresario.

De acuerdo a lo informado por la IMM, el Servicio de Regulación Alimentaria de la comuna había dispuesto la destrucción de 3.600 kilos de espinaca deshidratada por estar vencida, operación que tendría lugar en la Usina de Disposición Final de Residuos.

Sin embargo, el funcionario que se encontraba a cargo de la verificación "sospechó de la existencia de una maniobra fraudulenta, por la que se pretendía destruir otra mercadería en lugar de la intervenida".

La IMM denunció el hecho ante la Policía, que procedió - junto con inspectores de la comuna - a inspeccionar tres depósitos utilizados por la empresa.

En el lugar se encontró una botella de anilina, que según la IMM fue "presuntamente usada para teñir el producto" que sustituiría a la espinaca, así como una tolva para empaquetar y "semillín", la mercadería que se destruiría.