A prisión hombre por explotación sexual de menores en Salto
Un hombre que vivía en la parroquia del Pueblo Lavalleja y se hacía llamar "hermano Victor", fue procesado por abusos a menores. Estaba vinculado a la actividad de la comunidad católica llamada "Pobres Ciervos".
Lo que empezó siendo una denuncia por otro tema, derivó en una investigación que fue clave para el descubrimiento de estas situaciones.
El ahora procesado había denunciado ante la Justicia el robo de un rifle de su propiedad, por lo que intervino la policía.
Fue allí que los funcionarios se enteraron por vecinos de la zona que a la casa del denunciante concurrían menores de edad en forma asidua y, luego de ubicar a varios de ellos, admitieron que recibían dinero a cambio de favores sexuales que le realizaban al "hermano Victor".
Algunos recibían dinero para practicarle sexo oral y otros denunciaron haber sido violados.
La Justicia reunió pruebas y lo procesó por "presunta comisión de reiterados delitos de retribución a personas menores de edad para que realicen actos sexuales, 3 de ellos en concurrencia fuera de la reiteración, con 3 delitos de violación en calidad de autor" según publica el diario Cambio de Salto.
Según relató una vecina, el procesado era conocido por todos y era una persona a la cual le habían depositado mucha confianza, esta persona vivía en la capilla, colaboraba con la comunidad del pueblo, era un religioso que participaba de las actividades e incluso trabajaba con el baby fútbol del pueblo.
Una vez que los niños hablaron ante la policía se comenzó a saber toda la verdad.
El obispo de la Diócesis de Salto, moseñor Pablo Galimberti, no ocultó su preocupación por este caso y habló de lo sucedido: "Estamos al tanto de la situación. Sé que los chicos implicados en este caso estuvieron acá declarando junto a sus padres. Entiendo que se encuentran golpeados por los hechos y este hombre ya fue procesado" dijo a Cambio.
Agregó también que el "hermano Victor" estaba vinculado a la comunidad de los Pobres Ciervos, por lo que será suspendido y apartado.
En diálogo con El Espectador, Galimberti dijo que los hechos sorprendieron.
Pablo Galimberti
Sostuvo que la situación es condenable desde todo punto de vista y la comunidad está dolorida.
Pablo Galimberti
Galimberti dijo comprender "lo que están sintiendo los vecinos".
Lamentó que si bien el procesado no estaba dentro de la jerarquía de la Iglesia, ésta queda manchada.
Pablo Galimberti
"Creo que de alguna manera hay que creer en Dios, aunque a veces pasen estas cosas con personas que están muy cerca de la Iglesia y muestren su lado peor, oscuro y miserable".
Manifestó su más firme intención de visitar a las familias perjudicadas y darle de alguna manera apoyo en esta situación.
"Acá, no hay que esconder la cara, sino ayudar".