En una conferencia de prensa realizada luego de la reunión de la Comisión de Cuenca del Río Santa Lucía, el presidente de OSE, Milton Machado, dijo que en la medida que no se pronostican lluvias que contemplen la recuperación de acuíferos y restablezcan la situación normal de los caudales, OSE se ve obligado a tomar esta postura.

La semana pasada, el ente emitió un comunicado pidiendo la colaboración de la población para que se evite utilizar el agua potable en caso de no ser esencial. Machado indicó que la semana que viene se emitirá otro comunicado con un llamado para no utilizar el agua potable en caso de usos no esenciales y se comenzará a fiscalizar.

Agregó que a pesar de no tener un gran equipo para realizar inspecciones, se fiscalizará y aplicarán multas con las "disposiciones que haya", además de pedirle a la población su colaboración para que denuncie usos irresponsables a través de la línea telefónica 0800 1871.

Por su parte, la ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Eneida de León, calificó como grave la situación por la sequía y la cantidad de agua disponible en el país.

De León sostuvo que con esta situación se da la posibilidad de que aparezcan cianobacterias y que hay que preocuparse por el agua bruta, a los efectos de hacer el tratamiento y que no se cuele nada para el sistema. "Cuando la cantidad de agua disminuye, la calidad también es preocupante" dijo la ministra.

Sobre la contaminación de la cuenca del río Santa Lucía, la ministra de Industria, Carolina Cosse, señaló que se está trabajando en unos sensores que miden la calidad del agua, instalados en los estanques del Centro Regional Sur que tiene la Facultad de Agronomía.

Luego de que se ajuste el funcionamiento de esos sensores, se instalará un prototipo en una de las subcuencas del río Santa Lucía.

Cosse agregó que se está trabajando con un repositorio común de datos e información sobre medio ambiente y también en el programa de capacitación y competitividad dictado por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) para los industriales instalados en la zona de la cuenca.

La ministra De León agregó que se hicieron las inspecciones correspondientes a las industrias que están en los alrededores de la cuenca. Sobre esto, explicó que un pequeño porcentaje de industrias mostraron irregularidades, por lo que se les pidió que presenten su plan de tratamiento de efluentes, dentro de un plazo establecido.

De las 97.000 hectáreas que existen en los alrededores de la cuenca Santa Lucía, se encontraron irregularidades en 7.000. De León agregó que hay diversos estudios de la Dirección Nacional de Medio Ambiente que plantean que en los últimos 10 años se alcanzó una "especie de meseta" en cuanto a la contaminación.

A su vez, De León reveló que de los 2.785 padrones que monitorean bajo un visualizador, se encontraron 320 que mantienen sus cultivos en los márgenes del río sin respetar la distancia exigida de los cursos de agua, y otros 340 que están en una situación dudosa respecto a la zona de amortiguación, debido a que el visualizador tienen un margen de error de 30 o 40 metros.