Susana y Cynthia cuentan su experiencia como sacerdotisas
Por primera vez en Uruguay, tres mujeres fueron ordenadas sacerdotisas por la Iglesia Anglicana a fines de noviembre. Suena Tremendo habló con dos de ellas, Susana María López y Cynthia Ann Myeres.
La Iglesia Anglicana surge a partir de la escisión de la Iglesia de Inglaterra de la Iglesia Católica en el siglo XVI. Los anglicanos no aceptan la autoridad del Papa, sin embargo la mayoría de sus prácticas y ritos son iguales a los de los católicos romanos.
Tiempo después, se conformó la Comunión Anglicana, que congrega a 44 iglesias organizadas en provincias. La provincia en la que se encuentre inserta Uruguay es la Provincia Anglicana del Cono Sur de América, integrada además por Argentina, Chile, Bolivia y Paraguay.
La provincia conformada por estos país anteriormente no permitía la ordenación de mujeres prebísteras y de hecho no todos los intengrantes de nuestra provincia lo aceptan actualmente pero, según cuenta Cynthia Ann Myers, una de las mujeres uruguayas que ha sido ordenada como sacerdotisa por la Iglesia Anglicana en Uruguay, este cambio se ha producido luego de años de reflexión que han llevado a que finalmente se aceptara y se le diera esta posibilidad a las mujeres.
La primera mujer nombrada sacerdotisa fue de Bolivia. Ahora, está aconteciendo en Uruguay. Se espera que en Argentina suceda el próximo 5 de diciembre.
Llegar a la ordenación
Cynthia Ann Myers es uruguaya, tiene 65 años de edad, se encuentra casada, y tiene dos hijos y cuatro nietos. Se crió y estudió en Uruguay, y tiempo después se fue a vivir a Argentina. La llegada de misioneros australianos a Argentina le ofreció la posibilidad de estudiar a distancia y de formarse en lo que a ella le interesaba.
Contó que siempre se movió dentro de diversas áreas de la parroquia sin imaginar ni pretender jamás llegar a la ordenación. "Este no fue mi ímpetu inicial", expresó.
Según explica, la realización de cursos en la Consejería Pastoral, le permitió ver y moverse de forma diferente, le enseñó a "escuchar a las personas y a no imponer sus ideas". Luego, retornó a Uruguay con su marido y fue invitada a unirse a la Iglesia Anglicana de Uruguay.
El camino recorrido por la otra sacerdotisa ordenada por la Iglesia Anglicana, Susana María López, es diferente al de Myers. Ella se formó en Uruguay. En el año 2004 viajó a Brasil. Residió allá tres años.
Con la ayuda del obispo Miguel Tomayo, oriundo de Cuba y electo como el segundo Obispo de la Diócesis Anglicana del Uruguay en el año 1997, López terminó en Cuba sus estudios de teología de enfoque feminista.
Comentó que lo que más le atrajo desde un primer momento fue "la producción humana y la posibilidad de trabajar con los más pobres".
"En Cuba ya tenemos la segunda obispa mujer. Una boliviana que trabajó y estudió en Cuba hace 20 años y fue elegida como obispa de toda la Diócesis de Cuba", explicó López.
Interpretaciones de la Biblia
Ambas entrevistadas coincidieron en que en Uruguay "va a pasar tiempo" antes de lograr que una mujer llegue al obispado, ya que es una "llamado muy especial", y la edad también impone sus límites. "Ni Susana ni yo estamos apuradas por eso. Estoy contenta con el obispo que tenemos", confesó Myers.
Con respecto a las diversas interpretaciones que se hacen de la Biblia, en relación al ordenamiento de las mujeres, y la concepción general de esta para esta religión, López no tienen, "gracias a Dios, el mismo punto de vista sobre un mismo tema como el aborto, el matrimonio igualitario y otros temas de actualidad. A Jesús lo seguían mujeres y hombres y no hay nada que impida que atrás de un altar no pueda estar una mujer", y agregó "pero las estructuras están formadas por hombres y mujeres que persiguen distintos intereses. A veces en la historia ha predominado más el patriarcalismo y en otras casos más el 'liberalismo'".
López agregó que ella nunca buscó ser prebístera. "Estaba enfocada en la lucha de las mujeres como una lucha más de reivindicación".
Masculino o femenino
En cuanto a la discusión teológica sobre si Jesús debe ser interpretado como una figura masculina o femenina, explicaron que convertir el vino en sangre y el pan en cuerpo es un sacrificio que hace toda la comunidad, pero que "el sacerdote no es la figura central del asunto, sino lo que acontece en ese momento junto con todas las personas. El sacerdote, el prebístero o la prebístera son únicamente mediadores".
Hicieron énfasis en que todo el que sea anglicano debería saber la historia de Cristo. Cree que es necesario que esas cuestiones se enseñen. "Hay anglicanos, pero ¿cuántos conocen a Cristo?", se preguntó.
Explicó que nadie les impondrá nada, pero que es importante fomentar la enseñanza al respecto porque "hay una carencia a ese nivel".
Con respecto a su visión sobre si Dios es mujer u hombre, López explicó su punto de vista: "Algunos dicen que sí. Pero no es mujer ni hombre en el sentido antropológico. Dios es madre y es padre, con la función de ambos".
A su modo de ver, las imágenes femeninas vinculadas a Dios existen, pero las que predominan son las que aluden a la imagen de Dios de forma masculina.
A su percepción, la comunidad Anglicana en Uruguay es pequeña, menor incluso a mil personas. A su vez, ambas expresaron su deseo de que la ordenación no dificulte el relacionamiento la comunión anglicana.
Escuche la entrevista aquí: