El Desfile de Llamadas ya es un clásico, no sólo dentro de la época del carnaval uruguayo, sino que también dentro de la agenda cultural anual. Es un evento que congrega a miles de personas y muchos extranjeros llagan a Montevideo exclusivamente para presenciar el pasar de las comparsas. "Entre 15 mil y 20 personas van a las llamadas cada noche";, dijo Porteiro.

La masividad del evento es una de las razones por las cuales se ha decidido festejar este aniversario, pero también se busca hacer un reconocimiento a todas las personas que trabajan en las llamadas y a la comunidad afrodescendiente en particular. También se busca revitalizar la esencia del Desfile de Llamadas.

Fue en el año 1956 cuando se desarrolló el primer Desfile de Llamadas. Porteiro contó un poco la historia de este evento. Dijo que en esos años, las familias afrodescendientes se habían comenzado a dispersar por la ciudad y se ubicaban principalmente en los conventillos. Las fiestas tradicionales, cumpleaños, casamientos y hasta funerales eran motivo para desarrollar las primeras llamadas que contaban con las visitas de cuerdas de tambores de otros conventillos. "El sonido de los tambores convocada a la gente, a los ancestros y a los sentimientos";, dijo Porteiro.

Fue la Asociación Cultural y Social Uruguay Negro (ACSUN) la agrupación de se preocupó por darle una mejor organización a esa expresión cultural que iba creciendo cada vez más. Ahí surge el Desfile Oficial de Llamadas que se desarrolla hasta hoy y salía desde el conventillo de Cuareim por la calle Durazno hasta el conventillo de Ansina y volvía por la calle Isla de Flores. Allí participaban todas las cuerdas de tambores de los diferentes conventillos. "En candombe tiene más de 200 años en Uruguay. Lo que nació ahí fue lo institucional";, aclaró Porteiro.

Definió al candombe como parte de las raíces de la cultura uruguaya, pero con gran participación de la cultura afrodescendiente. "El ritmo del candombe es montevideano porque nace acá producto de las distintas procedencias de la mano de obra esclavizada que llegó al país";, agregó.

Alrededor de un mes es lo que le lleva organizar los dos días del Desfile de Llamadas que mueve a mucha gente. Cada comparsa puede tener un máximo de 150 integrantes, "a eso hay que sumarle todos los que trabajan en la organización, la policía, los bomberos, asistencia sanitaria, empleados municipales, etc.";.

Por su parte, Porteiro también contó cómo llegó a ser jurado de tan prestigiosos evento. "En el año 2000, yo era periodista de carnaval en esta radio. Yo había generado algunos comentarios sobre el Desfile de Llamadas y me invitaron a ser jurado";, dijo agregando que era otra época porque competían 10 ó 12 comparsas y no 40 como es ahora.

A la hora de evaluar a las comparsas, hay tres rubros que los jurados tienen que analizar: sonido, movimiento y estética. El primero hace referencia al desempeño de la cuerda de tambores; en el movimiento se evalúa el desempeño de los personajes típicos, el del cuerpo principal de baile y el movimiento general de la agrupación; y en la estética se evalúa vestuario, maquillaje, banderas, estandartes, pinturas, etc.

Los festejos de los 60 años del Desfile de Llamadas comenzarán el 1°,2 y 3 de febrero, en la Intendencia de Montevideo,  con charlas sobre la historia del candombe, la herencia familiar del candombe y los personajes típicos. El jueves 4 y viernes 5 se llevará a cabo el desfile desde las 20:30 horas. Y el domingo 7 será el cierre de los festejos en el recinto de la Muralla (cerca de la Playa del Gas) donde actuarán La Calenda, La Condombera, La Trenza y Julieta Rada. Todas las actividades tienen entrada gratuita.