El 81% de los uruguayos consume tranquilizantes porque le fueron recetados, casi el 16% los toma por su cuenta y casi un 3% los consume porque primero le fueron indicatos por el médico y luego decidió continuarlos por su cuenta. La mayoría (un 51%) de los sicofármacos fueron recetados por profesionales de medicina general, un 37% por un siquiatra y otras especialidades indicaron un 11% de estos medicamentos.

Alrededor de 87 mil personas consumieron antidepresivos en el último año, lo que representa un 5% de la población. El 6,6% de la población declaró que ha consumido hipnóticos -con y sin prescripción médica- alguna vez en su vida, al tiempo que más de un 10% consumió antidepresivos en su vida.

Galzerano consideró que es preocupante el consumo de benzodiacepinas entre los uruguayos y, por esa razón, la prescripción de estos medicamentos debe ser "acatada en el tiempo. Entre dos y tres meses como efecto agudo, después hay que evaluar (...) La gente se acostumbra al clonazepam y aumenta la cantidad".

"Es muy difícil la deshabituación a estas sustancias (…) puede llevar hasta un año";, explicó. De acuerdo a la especialista hay casos excepcionales, en los que la gente realmente necesita tratamientos prolongados. "Esto tiene que ver con la cultura ‘fast’. La gente quiere una solución rápida. La solución rápida es el químico";.

"El tema es que la gente no quiere conectarse con lo que le pasa";, explicó la especialista. Agregó que en Uruguay la mayor parte de consumidores de benzodiazepinas son mujeres de entre 20 y 65 años.

"En las ferias se pueden encontrar todo tipo de medicación";, denunció. Se preguntó cómo llegan a esos espacios los medicamentos. En cuanto a la automedicación de los uruguayos consideró que hoy la información disponible hace que la gente recurra a medicamentos sin consultar. "Tenemos una competencia muy importante que es el doctor Internet";, dijo.

En marzo y abril  de 2016 se decomisaron más pastillas de drogas sintéticas que en todo el año 2015. Galzerano explicó que las pastillas no son de la droga conocida como "éxtasis";. Al ser drogas de efecto más complejo, actúan de forma más lenta en el organismo y la gente aumenta la dosis por pensar que no hacen efecto. "Se puso en el tapete el tema de las drogas de diseño que se creía que en Uruguay no existen", indicó.

Este tipo de sustancias "afectan el sistema nervioso central"; y afecta el sistema renal. Reclamó que el acceso al agua en las fiestas sea más sencillo y barato. "Lo que planteamos en última reunión en la Junta Departamental de la Droga es que lugares donde se hacen estas fiestas haya agua potable accesible", consignó la profesional.

Hay gente que ha consumido drogas y han terminado con insuficiencia renal, según explicó. "Los efectos de drogas diseño son muy complejos, si el mensaje es no consuman nada puede llegar a unos y a otros no", enfatizó.

Julia Galzerano es médica internista especializada en VIH y uso de sustancias. Fue integrante del comité ejecutivo del Sindicato Médico Uruguayo (SMU) en dos ocasiones y coordinó la comisión de estudios acerca de la regulación del cannabis. También es una de las coordinadoras del curso de cannabis medicinal del SMU, integra de la Junta Departamental de Drogas de Montevideo y coordina el grupo de drogas del CASMU.