El dilema de ser viejo
Un viejo refrán expresa: "Según se trate a los mayores, así será el tratamiento que se recibirá de las futuras generaciones". Ayer todos fuimos conmovidos por la muerte de siete ancianos, quemados durante un incendio en la residencial en que vivían.
Muchos prefirieron poner énfasis en que esa residencial carecía de habilitación de Bomberos.
Pero resulta que de esa habilitación carecen el Palacio Legislativo, las intendencias de Montevideo, Maldonado y Canelones, el Hospital de Clínicas, el edificio del Consejo de Educación Secundaria, muchísimas escuelas y UTU de diferentes localidades, la mayoría de las dependencias del Poder Judicial así como la mayoría de edificios con más de 10 años de antigüedad.
Pero el problema más importante no son los permisos sino el trato que le damos a nuestros ancianos.
La columna de Carlos Peláez