Destrozos en Piriápolis tras turbonada: vientos de 180 km/h
Al caer la tarde de ayer, fuertes vientos se registraron en Piriápolis, lo que provocó la voladura de parte del techo de la terminal, de una escuela y de varias casas. El Ejército estuvo trabajando en el lugar hasta altas horas de la madrugada removiendo chapas y árboles caídos, informó el vocero del Ejército a La Mañana de El Espectador Yamandú Lessa.
El alcalde de la ciudad balnearia, Mario Invernizzi, dijo que las intensas ráfagas de viento duraron entre 6 y 10 minutos, tiempo suficiente para que se desplomara parte del techo de la terminal de ómnibus, parte de la Escuela 52 y varios domicilios, entre ellos, el del propio alcalde.
Además hay decenas de árboles caídos y daños en el Puerto de Piriápolis y en algunos locales comerciales ubicados sobre la rambla. El anemómetro en la terminal portuaria registró ráfagas de hasta 180 km/h. hasta que fue destrozado por el propio viento.
El vocero del Ejército explicó: "Minutos después de que ocurriera el temporal, fue requerida la presencia del Ejército apoyando a Bomberos y la Intendencia de Maldonado, principalmente removiendo obstáculos, chapas, árboles caidos".
Lessa agregó que hasta ahora no se han registrado heridos ni lesionados. Allí desplegaron tres oficiales, el jefe de la unidad y 25 efectivos con vehículos, motosierra y equipo apto para hacer la remoción de obstáculos.
Para culminar, dijo que el trabajo se extendió hasta altas horas de la noche y que "todo lo que fue techos livianos y cartelería sufrió importantes daños", además de lo detallado por el alcalde de la ciudad.
Después de la turbonada de ayer en Piriápolils fueron suspendidas las clases para este martes en la escuela pública de la ciudad, así como en los colegios y liceos privados.
Solamente está abierto el liceo público de Piriápolis.
Respecto a la terminal de ómnibus, cuyos techos volaron ayer, hoy se encuentra operativa, aunque limitada, según pudo saber El Espectador.