Gil Iribarne señaló que la lucha contra la corrupción "implica una pata preventiva. Debemos potenciar capacitación que es lo que se ha venido haciendo. Otro aspecto son las declaraciones juradas de funcionarios públicos. Hay 45 mil declaraciones activas y tenemos un sistema pesado, complejo, que no aporta nada. Las tenemos guardadas en un cajón y salen únicamente si un juez lo pide".

"Queremos mejorar el sistema. Queremos capacitar en temas de investigaciones. Porque –la corrupción- es un delito difícil de investigar. También necesitamos crecer en la lucha contra el enriquecimiento ilícito, y eso ahora es una carencia que tenemos", expresó.

El presidente de la Jutep añadió que "no estamos poniendo excusas. Con lo que hay, hay que hacer mucho. Quizá podamos lograr una modificación presupuestal o normativa que nos ayude, pero justificando de que hay trabajo".

"Corruptos vamos a tener siempre. Pero queremos que tengan una apreciación de riesgo importante", aseveró el jerarca.

El funcionario dijo que "en la región, el ámbito público es un campo de corrupción tremenda. En Uruguay no tenemos problemas serios, pero tampoco podemos cerrar los ojos. En todo el mundo hay riesgo, pongamos atención. Para eso, se realizan los análisis de riesgo".

Consultado sobre el financiamiento de los partidos políticos, dijo: "es un gran tema. La norma se pone en el papel pero no hay recursos para controlar. Si bien no hablamos de millones de dólares, es una zona de mucho riesgo donde hay que tomar medidas. Que financien a un partido político, es una forma de corrupción", porque después entran a jugar favores, intereses, entre otras cosas, remarcó.

Consultado sobre el ranking de Transparencia Internacional (TI) que colocó a Uruguay entre los países menos corruptos del mundo y a la cabeza en América Latina, el jerarca de la Jutep reconoció: "Está mejor que otros países, pero tenemos problemas. Serán menos, o tenemos más fortalezas, pero si no hacemos nada porque 'está todo bien', en 3, 4 o 5 años estamos igual que todo el mundo".

Gil Iribarne fundamentó que "tenemos valores en la ciudadanía. La corrupción no está tan instalada a nivel institucional".

En estos rankings de TI, dijo el funcionario, "demoran en reflejarse algunas cosas. Chile tuvo problemas hace un tiempo y ahora se reflejó. Lo de Brasil va a aparecer. En el tema del lavado de activos, como en España, que tuvo un gran trabajo, TI dijo que no era tal y lo cuestionó, alegando que 'un país con estos temas, no puede tener tal número. Y eso estuvo bien".

La "Operación Campanita", en 2006, marcó un quiebre en la lucha contra el lavado de activos por tráfico de drogas en nuestro país. "Uruguay tuvo una evaluación del Fondo Monetario en 2003 muy dura. Y con razón, porque Uruguay tenía una situación de delito de lavado tipificado desde 1998 y cero preso y actitud permisiva. El cambio fue la presión del GAFI en 2004. En 2005, el nuevo gobierno dijo 'esto no puede pasar más, hay que cambiar'".

"Esto hizo que con gran trabajo de las autoridades del Ministerio del Interior y la Justicia, se lograra el procesamiento de decenas de personas, la incautación de cientos de kilos de drogas, autos, y millones de dólares logrados a través del narcotráfico", recordó Gil Iribarne.