Las asignaciones familiares han vuelto a ser tema de discusión. En las últimas semanas, el Ministerio de Desarrollo Social propuso, sin suerte, que se deje sin efecto la medida de suspender las transferencias monetarias de las familias cuyos hijos dejaron de concurrir a clase.

Respecto al tema, Arim opinó que a las asignaciones familiares "se les exige mucho";. "Se le exige que por un lado sea el sustento para asegurar que los hogares tengan un mínimo de recursos que le permita construir, en la infancia, un ciclo de vida razonable desde el punto de vista al conjunto de bienes al que accede, no solamente alimentos sino también otros bienes que hacen a la calidad de vida y a la proyección de los niños";.

"Se le exige también que sea un instrumento que permita e incentive la concurrencia al sistema educativo y que sea un instrumento que asegure que los padres cumplamos la obligación de concurrir al sistema de salud";.

Arim dijo que los desarrollos en políticas sociales van en el buen camino hacia completar una matriz de protección amplia pero que el problema es que se pretende que las asignaciones familiares cumplan con todos estos fines.

"Tengamos un instrumento que asegure un nivel mínimo de ingreso a los hogares en la infancia; tengamos un instrumento que incentive la concurrencia al sistema educativo: tenemos solamente el Fondo de Solidaridad, un buen instrumento pero solo vinculado a Terciaria. Y tengamos otro tipo de instrumento para asegurar acceso";.

"Es importante que (los hogares con niños) preserven un mínimo de ingresos independientemente de cual sea la suerte laboral o las opciones laborales de sus padres"; consideró.

Según Arim, la sociedad uruguaya tiene una sensación de "frustración por los fracasos que tenemos a nivel educativo"; que lleva a pensar que todos los instrumentos de política deben salir al encuentro de este problema. "Es un problema que no va a ser atendido exclusivamente desde las transferencias y que además no tendría que recaer en las asignaciones familiares";.

"(Uruguay) es un país que ha construido una matriz de protección social que desde el punto de vista generacional tiene ciertos desequilibrios. Hacemos una trasferencia muy importante de recursos hacia los hogares con adultos mayores pero si uno analiza desde el otro lado de la vulnerabilidad en el sentido de individuos que no están en condiciones de generar sus propios ingresos, que son los niños y la infancia, tenemos un nivel de protección mucho más escaso";.

"Está bien que el Estado transfiera recursos a los hogares con niños porque implica asegurarse que en la infancia esos hogares tengan un mínimo de recursos. ¿Lo usaran bien o no los padres? Eso es una discusión valida, pero es una discusión que nos trasciende a todos en algún aspecto";.

"Creo que le estamos pidiendo demasiado a transferencias pequeñas, parecería que estamos transfiriendo recursos gigantescos y son montos pequeños";, afirmó.

"No podemos pensar que, el único instrumento que tenemos de apoyo en términos de transferencias de recursos a la infancia, lo discontinuemos o dejemos expuesto un hogar por X razón, entre ellas posiblemente porque algunos padres no tomen buenas decisiones. No podemos sacarle la alfombra a ese hogar que tiene dificultades para subsistir. Y ese es el único contacto que tiene con el Estado";, concluyó.

Renta básica universal.

Otro de los temas en la discusión es la aplicación de la renta básica universal, un sistema de seguridad social que eliminaría otros subsidios, como las asignaciones familiares.

Arim explicó que este subsidio se trata de "una transferencia a todos los ciudadanos independientemente de la conducta que tomen en términos de asociación al mercado laboral, de su nivel de escolarización o del conjunto de vínculos que tiene con el Estado";.

"Tiene que ver con construir una línea mínima de recursos que no sea cero para todos los individuos de la sociedad";, concluyó.