Las revoluciones tecnológicas y de globalización que se dan en la actualidad "desafían al tipo de empleo que se ha desarrollado hasta ahora, y a raíz de eso van a desaparecer muchas oportunidades de trabajo y se van a crear nuevas actividades";, manifestó el entrevistado.

Iglesias expresó que Uruguay se resiste a los cambios, y tiene una tendencia histórica a privilegiar la seguridad frente al riesgo y "los cambios siempre ponen en riesgo", y consideró que esta actitud "no es buena para acompañar estos cambios".

"Nuestra sociedad no tiene el privilegio de la innovación pero sí tiene la capacidad para poder hacerlo, entonces debemos incentivarlo para que se sume a estas tendencias del mundo entero", consideró Iglesias.

Consultado sobre si las políticas educativas de Uruguay están preparando a los futuros trabajadores para los desafíos que se vienen, opinó que "en Uruguay hay un sistema educativo que debe ser adaptado a estas nuevas realidades, hay que actualizarlo. En Estados Unidos se estima que para 2030 el 50% de los actuales empleos van a desaparecer y se van a crear otros empleos, cómo preparamos a la gente para que puedan aprovecharlos es el tema de la educación".

Sobre la economía internacional el contador expresó que se está dando una involución. "En lo que tiene que ver con el crecimiento, ha habido una reacción positiva en Estados Unidos y en Europa, pero que está sometido a muchas amenazas. No estamos vacunados contra una nueva crisis financiera. Se están produciendo cambios en la política económica del mundo que nos tienen sorprendidos. Volvió a protegerse el aislacionismo o el proteccionismo y todo eso preocupa, porque hemos dedicado mucho tiempo a construir un mudo abierto, con movilidad de capitales y de personas, y a partir de eso tener un mundo mejor. Ahí hay una involución".

En cuanto a la economía nacional, Iglesias piensa que "Uruguay tiene que asociarse con los países vecinos, ya que la integración fue importante en el pasado, y hoy lo es más que nunca, cuando el mundo se está parcializando, y se están creando influencias".

El contador resaltó que el informe arroja que "la población uruguaya tiene un proceso de envejecimiento, con una tasa de natalidad baja. Eso genera muchos desafíos, por una parte vamos a tener un peso muy importante de personas mayores de 65 años y una reducción bastante importante de los menores de 15 años, a mediados de siglo".

A raíz de eso, se generan problemas en cuanto a la productividad, ya que "los grupos activos tienen que sostener a un número mayor de personas dependientes y esto hace que tengamos que tener un empleo más productivo que genere más riquezas para poder mantener los niveles de vida y aumentar el bienestar social", aseguró Iglesias.