Participaron del encuentro la directora ejecutiva de la Consultora Cifra, Mariana Pomiés; el economista, politólogo y director del Instituto Nacional de la Juventud (Inju) Santiago Soto, y la edila batllista por Montevideo, presidenta de la Comisión de Cultura y vicepresidenta de la Comisión de Medio Ambiente y Salud de la Junta Departamental de Montevideo, Fátima Barruta. 

El informe del Banco Mundial presenta los cambios sufridos en estos países, donde las tareas cognitivas ganan peso sobre las tareas manuales, desde hace veinte años, sobre todo en los trabajadores más jóvenes.

Pomiés cuestionó si Uruguay seguirá la tendencia del mundo o si se intenta cambiar. "En Uruguay suele pasar querer cambiar una realidad que a veces es incambiable, y más para un país pequeño como el nuestro, o asumir que esta realidad implica desafíos más grandes que los que imaginábamos. Es un tema central y no estamos preparando a los estudiantes para eso", opinó la tertuliana.

A su vez, la directora ejecutiva de Cifra expresó que las pruebas Pisa muestran "no solo que nos va mal en matemática, sino que nos va mal en la capacidad de resolver problemas prácticos, porque nuestro sistema educativo es muy 'contenidista', de trasladar y repetir contendidos, y no ha tenido un cambio fuerte para tratar de educar a los estudiantes en el desarrollo de competencias y habilidades que le permitan resolver lo que les toque solucionar, que tengan la creatividad y la capacidad para solucionar problemas prácticos, técnicos. Seguimos con un sistema educativo del siglo pasado preparando a gente para una realidad que no es la actual", expresó Pomiés.

Soto contó que esto se discute a nivel mundial. "El cambio tecnológico está sesgado hacia la calificación. El desafío a nivel mundial que crea este patrón de crecimiento es, no solamente el bajo pago del trabajo no calificado, sino su destrucción propiamente dicha. Hay una discusión de fondo que es cómo nos adaptamos al cambio técnico que destruye sistemáticamente empleo y que en definitiva, concentra los beneficios de vivir en sociedad cada vez en menos manos", dijo el economista.

Barruta por su parte, dijo que si queremos un país de avanzada "tiene que haber un cambio en la matriz de trabajo y educacional. La educación debe dar herramientas para que el niño desde los primeros años use su creatividad para crear problemas y resolverlos sin frustración".

Los tertulianos coincidieron en que la educación también debe crear opciones académicas para los nuevos mercados laborales.

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