Pomiés abrió el debate, y dijo que "en su estructura y en su peso", el Uruguay es un país laico, pero según las encuestas, el 50% aproximadamente de los uruguayos es católico, aunque solamente un quinto practica la religión. "Cerca de un treinta y largo por ciento de la población uruguaya se declara agnóstico, ateo, o no cree en nada. Si uno mira, casi la mitad de la población es católica, pero lo cierto es que no tenemos formación religiosa, a diferencia de otros países que aunque tienen un estado laico, tiene formación religiosa en las escuelas. El Uruguay no. Por eso es muy difícil hasta definirse", consideró la tertuliana.

"A mí nunca me dijeron lo que tenía que ser o lo que no tenía que ser, y agradezco muchísimo eso. Tenemos que resaltar el ejemplo uruguayo como ejemplo de tolerancia, de afecto, y que en la escala de valores que todos pregonamos, no hay grandes diferencias. No podemos decir que los valores están dados por la religión católica, la judía-cristiana, la musulmana, o los laicos. Esa es la genialidad del Uruguay, y la conquista de lo que es la convivencia en armonía de los que son religiosos y los que no lo son", opinó Franzini.

Pomiés no estuvo de acuerdo con su contertuliano en que exista una convivencia pacífica en torno a la religión, y manifestó que "en Uruguay, con su política de tratar de separar la Iglesia del Estado, se fueron demonizando alguna cuestiones que tiene que ver con la religiosidad".

Por otro lado, Boffano enfatizó en que hay que separar lo que es la religión de lo que es la religiosidad y la espiritualidad. "La religión como estructura, una creencia, una jerarquía donde la persona que adhiere a esa religión piensa que va a tener la mejor relación con Dios, con la diosa o los dioses. La religiosidad o espiritualidad, aunque técnicamente no es lo mismo, es algo más amplio. La espiritualidad tiene que ver con la relación que tenemos las personas con lo no material, con el encuentro con uno mismo, que puede ser ejercido a través de una religión o no. Los uruguayos somos mucho más religiosos de lo que creemos", expresó el tertuliano.