Cuando a un hijo le borran al padre le están borrando el 50% de su vida, pero sobre todo, le están impidiendo ser una persona feliz.

 

Los interminables tiempos en los juzgados de familia determinan que los niños crezcan a la sombra de procesos judiciales que no le son imputables, sino que son el fruto de disputas entre sus padres.

 

Denuncias falsas que los alejan de una de las partes, movimientos que buscan opacar una lucha silenciosa y una justicia que demora más de lo que debería, terminan alejando a los más pequeños de uno de los dos padres y su entorno familiar.

 

En el día del niño, la organización STOP ABUSO advierte sobre el impacto que tiene en los más vulnerables las decisiones de los mayores.

 

Los tiempos en la justicia siguen siendo excesivamente largos y el sistema político, que miraba para otro lado, ahora comienza a preocuparse por una realidad que rompe los ojos.

 

El integrante de Stop Abuso, Pablo Corbo, explicó en entrevista con Espectador al día como trabaja la organización.