La Mañana de El Espectador

La investigación del Lava Jato en Uruguay tiene "varios tentáculos"

La investigación del Lava Jato en Uruguay tiene "varios tentáculos"

La investigación del "Lavajato" comenzó en marzo de 2014 y ya son más de 15 los países donde se ha comprobado el pago de coimas, dijo a La Mañana de El Espectador, la periodista carioca Marcia Carmo.

Esta investigación es "interminable e infinita y con varios tentáculos", dijo la colega. "Tiene más de cuarenta etapas y ya hay más de cien personas detenidas, incluyendo empresarios y políticos".

Hay tantas personas involucradas en la corrupción que tienen prisión domiciliaria que "faltan tobilleras electrónicas", ejemplificó.

Sobre Odebrecht, el 22 de diciembre de 2016 el Departamento de Justicia de Estados Unidos señaló que en 12 países la empresa habría pagado millonarios sobornos a cambio de contratos. Recordemos que Marcelo Odebrecht, presidente de la compañía, fue condenado a más de 19 años de prisión en su país por crímenes de corrupción pasiva, asociación criminal y lavado de dinero.

Ayer la trama alcanzó a Uruguay o por lo menos a un uruguayo, ya que Andrés "Betingo" Sanguinetti, pagará una fianza de treinta mil dólares para esperar en libertad su posible extradición a Andorra, donde se lo requiere en el marco de una investigación por su presunta vinculación con la trama de corrupción de la empresa Oderbrecht de Brasil.

Marcia Carmo relató que "donde Odebrecht tenía obras hay investigaciones".

Con respecto al ex presidente Lula, según la investigación del juez Sergio Moro, la empresa Odebrecht le habría pagado en forma de "regalo" un departamento en un balneario de San Pablo.

Sobre el instituto de la "delación premiada", la misma tuvo "mucha importancia con el avance de esta causa, pero genera muchísima polémica", sostuvo la colega norteña.

La colega recordó que el actual gobernador de Minas Gerais y ex ministro del gobierno de Dilma, Fernando Pimentel tiene varias denuncias pero hay otros políticos en situaciones más graves.

Recordemos que el empresario brasilero Benedito Rodrigues de Oliveira Neto reveló a la Justicia de su país que las empresas Odebrecht y OAS pagaron 14,5 millones de reales en "propina" a Fernando Pimentel, cuando era ministro de Industria de Dilma, para que intercediera a favor de empresas brasileñas en varias construcciones en países de América, entre ellas la obra frustrada de la regasificadora en Uruguay.

 

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