Inciarte relató que en la noche del sábado se hizo una fiesta entre chilenos y uruguayos, como la hacen desde 1975 para recordar el partido de rugby que nunca se jugó debido al accidente aéreo en la cordillera de los Andes que trasladaba a los deportistas uruguayos.

"El domingo, en la estancia La Rábida, se ofrecieron a hacer un asado para todos. Llegué a la una allá…terribles asado, ensaladas, verduras saltadas, un ambiente de jolgorio, bebidas muy ricas", agregó Inciarte. "Estábamos felices. Felices, felices", remató el sobreviviente de Los Andes.

Inciarte dijo que luego de la actividad gastronómica, decidieron ir a la playa en varios autos y bajar a la arena.

"En el momento en el que estoy bajando, veo pasar, raspando, a muy pocos metros de la arena, una avioneta amarilla que venía del oeste hacia el este", contó.

Por otro lado, agregó que la aeronave aterrizó, se bajó alguien y subió otra persona, a quien Inciarte no conocía.

"(El avión) salió carreteando al este por la playa, pegando algún brinco, y de repente remonta y enseguida empieza a torcer hacia el sur, hacia el mar, en una curva bastante aguda, es un motor de 60 caballos muy chico. No sé si faltó motor, viento no había, entra a caer, a caer, a caer y cayó", narró "Coche". "Vi todo", agregó.

Según Inciarte, los dos integrantes del avión salieron de la nave y empezaron a nadar rumbo a la costa, pero solo uno llegó.

Iniciarte calificó a lo ocurrido como "una desgracia que da una tristeza tan grande" a lo ocurrido luego "de una fiesta preciosa".