"Puede ser con alguien ocasional o con una persona con la que se está conviviendo en cierto ámbito o bajo determinadas circunstancias";, explicó la sexóloga, y agregó que si se resuelve bien es una situación que no ocasiona ni genera problemas, e incluso puede ayudar a reanimar y realzar la autoestima.

Si ese deseo impacta negativamente y con baja autoestima y las "defensas bajas emocionalmente";, esto puede causar o provocar mucha frustración, la cual puede ser leve, moderada o muy intensa. Villalba señaló que si "se tropieza con la piedra y esa fantasía se lleva adelante"; en un marco o entorno que no daba para algo más, eso lleva a la exposición y a poner en riesgo y peligro sus vínculos o relaciones verdaderas.

La profesional dijo que el impacto negativo puede provocar además problemas en el entorno en que se desarrolla el mismo. Consultada sobre si hombres y mujeres canalizan y procesan de igual forma este tema, explicó que "Para los hombres, como son menos subjetivos, van más al grano, mientras que la mujer la da más subjetividad, porque es más vulnerable. Logra darle más color a esa situación de fantasía";.

Villalba dijo también que si bien este tipo el deseo o tensión sexual puede pasar a cualquier edad, esta manifestación se presenta mucho más cuando en la etapa de la adolescencia, y recalcó que  generalmente se produce dentro del plano de fantasía.