"Seguimos sin tener noticias (en relación a los reclamos) y sacamos un calendario de no despegue que empieza el 21 de noviembre hasta el 3 de diciembre, día por medio con afectación durante tres horas por turno (cada 12 horas)", dijo Librán.

La Actau ya había impedido los despegues el 6 de este mes, pero el período de afectación de la salida de los aviones fue de dos horas, una menos que la medida que prevé adoptar la semana que viene.

Uno de los principales puntos del reclamo es la creación del Estatuto del Controlador, que es necesario para conocer, entre otras cosas, la cantidad de vacantes, estructura del servicio, tiempos estipulados, remuneraciones en relación a cargos y grados.

Para que se apruebe ese estatuto debe ingresar en la ley de Rendición de Cuentas, cuyo proyecto ya está siendo tratado en el Parlamento desde el 20 de junio y la Actau teme que la inclusión no llegue a tiempo.

El 6 de este mes hubo una reunión en el Ministerio de Trabajo en la que participaron representantes del sindicato, de la Dirección Nacional de Aviación Civil, de la que dependen los controladores, y del Ministerio de Defensa.

En esa instancia, en la que no se logró un acuerdo, el Ministerio de Defensa solicitó 15 días para evaluar la situación y la Actau se comprometió a no realizar medidas de paro durante ese período.

Librán anunció que este viernes habrá una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo para tratar de conseguir un acercamiento entre las partes.

En caso de que se llegue a un acuerdo, no se aplicará la medida de afectación de despegues prevista para la semana que viene.

Sin embargo, el secretario de la Actau no se muestra esperanzado en que haya una solución, debido a que la reunión fue convocada nuevamente por la Dirección Nacional de Trabajo, que es la mediadora, y no por el Ministerio de Defensa, que es el órgano que debe plantear una solución. (Sputnik)