Pomiés opinó que "la mayoría de los uruguayos no es favorable a este cambio normativo" ya que el dato más fuerte de la opinión pública es el plebiscito de hace siete años, en el que la sociedad se manifestó en contra de que los uruguayos que viven en el extranjero voten en la elecciones nacionales.

"Que una vez se haya votado, no quiere decir que sea siempre así, el tema es que creo que las cosas van cambiando a medida que eventos o situaciones van cambiando la opinión pública, y no veo tan claro que en los últimos años eso haya pasado", añadió.

Por su parte Franzini se manifestó en contra de esta propuesta, sobre la que opinó que, como el voto en Uruguay es un derecho y una obligación, el votante tiene también "la obligación" de informarse para tomar la mejor decisión, lo que muchas veces no sucede con personas que no están en la cotidiana del país.

"En Uruguay una persona no puede votar en un circuito fuera del lugar donde lo define su credencial. Estamos pensando que vote una persona que está a cincuenta mil kilómetros y no en una que está a diez", enfatizó el tertuliano.