Rubén Villafán, del sindicato de Lifan, dijo a La Diaria que desde fines de mayo la empresa había dejado de enviar la materia prima para producir y que comunicó a los 125 trabajadores que la situación está "complicada" por la "coyuntura de la región".

En ese sentido, la principal dificultad sería el aumento del precio del real, moneda brasileña, ya que los vehículos producidos en Uruguay tienen a este país vecino como "único" destino de exportación.

Villafán contó que la planta estaba produciendo cerca de 13 automóviles por día (del modelo X80) y que, según Lifan, cada una de estas unidades suponía pérdidas de cerca de 10.000 dólares para la empresa.

"Habíamos mejorado el tema de la producción, porque en años anteriores demorábamos 100 horas hombre por auto, y lo bajamos a 60. Además, antes éramos 350 trabajadores, hoy somos 125 y mejoramos la calidad", sostuvo Villafán.

Además, señaló que desde el sindicato también habían logrado mejorar los "problemas de relacionamiento" que tenían con la compañía y que van a "monitorear mes a mes" la situación junto a la empresa.

Asimismo, los 125 funcionarios, que serán enviados al seguro de paro a partir de junio, harán cursos dentro de la planta para que no pierdan su calificación en cuanto mano de obra.

En tanto, para que la fabrica vuelva a funcionar, según explicó Villafán, es necesario que ocurra una baja del precio del real, que se abran las exportaciones a Argentina o que empiecen a producir coches eléctricos.

Lifan invirtió 55 millones de dólares para instalarse en Uruguay en el 2012 con el objetivo de elaborar desde el país austral productos para atender la demanda local y regional. EFE