"Si nosotros no retrocedemos en los avances que estamos teniendo, si tuviéramos la capacidad de interpretar qué significa en todo su contexto la unidad más amplia de todas las fuerzas políticas, movimientos sociales y populares de Nuestra América tras nuestros desafíos y nuestros objetivos, sería una gran cosa", aseguró Castillo, a pocas horas de iniciar en La Habana el XXIV Encuentro Anual del Foro de Sao Paulo, a celebrarse del 15 al 17 de julio.

"Cuando uno analiza el contexto político, social y económico que vive hoy nuestra América Latina, en estos 28 años de vida del Foro de Sao Paulo, se impone la necesidad de hacer un balance, un momento para reflexionar y que catapulte a los partidos políticos de izquierda, a los movimientos revolucionarios y a las fuerzas políticas que queremos cambiar las condiciones de vida de nuestros pueblos latinoamericanos y caribeños", comentó el dirigente comunista uruguayo.

Agregó que "en el camino hay avances y retrocesos, no todo es lineal en la vida política de nuestros pueblos, pero el hecho más importante que estemos a pocas horas de dar comienzo al debate y las discusiones es saber que no tenemos la presencia física del Comandante Fidel Castro (1926-2016)".

Para Castillo, "Fidel va a estar presidiendo este Foro , como está presente en cada uno de nosotros, con su entrega, su devoción, su vida, su lucha que nos legó a todos y que en esta oportunidad nosotros tenemos que fortalecer esa ideología, esas concepciones que nos fue construyendo".

"Si además de la unidad –añadió-, pudiéramos expresar eso en solidaridad con los pueblos hermanos que luchan, para que les llegue y traspase los muros y los barrotes de la cárcel en Brasil, y lleguen al compañero Lula (Luiz Inacio Lula da Silva), sería una cosa maravillosa, y que de la misma forma llegara nuestra expresión solidaria a los combatientes colombianos, para que se respete el proceso y los acuerdos de paz que tan costosos fueron".

El dirigente comunista uruguayo se refirió también al internacionalismo como práctica de estos tiempos en que es vital mantener viva la unidad y solidaridad con las causas justas de este hemisferio.

"Si lográramos que el internacionalismo fuera una cosa de entender que no hay fronteras, ni lenguas, ni banderas que nos dividan, estaríamos compenetrados con la suerte del pueblo mexicano que ha dado una lección enorme de dignidad, en medio de las balas y el asesinato y el asedio de (Donald) Trump y el imperialismo, haber vencido el miedo y colocado a Andrés Manuel López Obrador y al partido MORENA como la primera fuerza política".

Castillo apuntó que "todo eso hay que conjugarlo, el papel que tenemos los dirigentes, el desafío que tienen nuestros partidos políticos es entender que de aquí salimos todos unidos y en colectivo trabajando por nuestros pueblos, o nos hundimos y condenaríamos al fracaso lo más grande este proceso".

"Si los comunistas uruguayos y los frenteamplistas (de la coalición del Frente Amplio), somos capaces de colocar un aporte, de hacernos comprender más e interpretar mejor cual debe ser el camino para seguir avanzando y cambiar la realidad de nuestros pueblos, sería una cosa muy importante", dijo. (Sputnik)