Fueron 255 las familias beneficiarias, realojadas en los siguientes conjuntos:

Zum Felde I: "Sueños Cumplidos" (Zum Felde y Cluzeau Mortet): 30 viviendas

Capitán Duarte: "27 Sueños y Sueños Compartidos" (Capitán Luis Duarte y Ciudad de Azul): 47 viviendas

Zum Felde II: "Barrios Unidos" (Pitágoras y Flamarión): 39 viviendas

Cochabamba: "Vida Nueva" (Cochabamba y Sebastopol): 56 viviendas.

De acuerdo a un reglamento de convivencia existente en la Intendencia de Montevideo, cada familia podía llevar un máximo de cuatro mascotas a sus nuevos hogares. Esta disposición provocó que varios animales quedaran en el predio.

La Organización No Gubernamental Animales Sin Hogar denunció esta situación y aclaró que en marzo de este año recibieron un correo electrónico donde se anunciaba la última etapa del realojo, aunque luego no hubo otros contactos para planificar una posible reubicación de los animales. 

El 5 de setiembre comenzaron las demoliciones de las estructuras que quedaron en el espacio donde estaba el asentamiento, con cientos de perros y gatos aún en el lugar.

Como consecuencia, varios animales aparecieron muertos debajo de los escombros, aunque 143 pudieron ser rescatados por voluntarios que se acercaron al lugar durante más de una semana.  

Uno de los responsables de Animales Sin Hogar, Juan Echevarría, dijo a El Espectador que varias autoridades fueron al exasentamiento luego del comienzo de estas tareas para preguntar en qué podían ayudar, pero ya no había mucho para hacer.

"Ahora la bomba ya explotó, es tarde", mencionó.

La directora de desarrollo Urbano de la Intendencia de Montevideo (IM), Silvana Pissano, negó que haya sucedido lo denunciado por Animales Sin Hogar.

Si bien reconoció que demoraron en actuar en este caso, afirmó que al día siguiente al realojo detuvieron las máquinas que estaban trabajando para que todos los animales fueran retirados de allí.

Sin embargo, la ONG compartió varias imágenes y videos en su cuenta de Facebook que demuestran la ocurrencia de estos hechos.

Pissano anunció que se concretará un convenio con el refugio Vida Animal para que se hagan responsables de los animales rescatados en Isla de Gaspar, pero la ONG desmintió la información y aclaró que el acuerdo que establecieron no tiene que ver con este caso.

Echevarría explicó que, según la IM, no se detuvieron las demoliciones mientras los voluntarios todavía estaban recatando animales porque se temía que las casas vacías pudieran ser ocupadas rápidamente por otras personas.

El director de la Comisión de Tenencia Responsable y Bienestar Animal (Cotryba), Julio Pintos, anunció en El Espectador que se trabajará con las familias de asentamientos que serán realojadas en un futuro acerca de la tenencia responsable de animales, para que esta situación no se repita.

"Mientras transcurre todo el proceso constructivo se castrarán los perros y se advertirá a las personas que deberán llevarse menos animales a los nuevos hogares", mencionó Pintos.

Escuche el informe en La Mañana de El Espectador:

Fuente: El Espectador- Intendencia de Montevideo-