La semana pasada, la Justicia de España decidió archivar la causa que investigaba al padre de la niña como autor de abuso sexual y violencia doméstica contra su hija: señaló que no había pruebas justificadas de esas acusaciones. Además, tomó acciones para que cuanto antes se comience con las visitas padre-hija.

La Justicia española investigará además a la madre por  "presunta comisión de un delito de acusación y denuncia falsa" contra el padre, además de presumir que incurrió en "un delito contra la integridad de la menor".

El hombre afirmó esta preocupado por el tratamiento mediático que tuvo el que caso en Uruguay. Apuntó a algunas declaraciones de organizaciones civiles, como Mujeres de Negro.

Estos colectivos se habían manifestado en la Explanada de la Intendencia de Montevideo con el fin de que la niña y su madre no tuvieran que volver a España.

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"Me parece lamentable que se involucren grupos de presión y del Gobierno", dijo Walter Pritsch, defensor de oficio de la menor cuando estuvo en Uruguay.

No es de extrañar la actitud de la Justicia española en este caso, apuntó en Rompkbzas Andrea Tuana. Directora de la ONG El Paso, magíster en Políticas Públicas de Igualdad e integrante de la Red Uruguaya contra la Violencia Doméstica y Sexual, ha seguido de cerca el tema.

Según dijo, la organización Save The Children documentó que en ese país el 75% de las denuncias sobre abuso de menores no prosperan porque no se encuentran pruebas. "A los niños no se les cree", afirmó.

En parte porque la mayoría de los magistrados de ese país se amparan en la idea del "síndrome de alienación parental", algo totalmente desacreteditado a nivel judicial.

Tuana sostuvo que las pericias realizadas en España tuvieron un resultado absolutamente contradictorio con las efectuadas en Uruguay.

Aquí, los estudios lograron acreditar que hubo violencia de género en el caso de la niña, que le tenía "terror" al padre y que, por su seguridad, debería quedarse con su madre en Montevideo.

Estudiado un posible abuso sexual, la menor tuvo una "reexperimentación del trauma".

Tuana cuestionó que la sede judicial decidiera no tomar en cuenta el informe de las psicólogas tratantes, por haber sido presentadfas por la madres, pese a sus conclusiones fueron contundentes.

Sobre la resolución de la Justicia española, sostuvo que se llega sobre una "idea de parcialidad", de que las mujeres tienen demasiados derechos, de que manipulan y de que quieren perjudicar a hombres inocentes.

En ese marco puso en tela de juicio la propia pericia realizada en ese país, dos años después de sucedidos los hechos y que, de todas formas, no dice que no hubo abuso, sino que no pudo comprobarse.

Tuana consideró un "disparate" vincular este caso a la ley de Violencia de Género aprobada recientemente a nivel local,  e informó que los abogados del padre ya comunicaron que se iniciarán acciones legales contra la madre. "Ella seguirá peleando", afirmó.