Sociedad

Cannabis puede ayudar a diversificar matriz productiva de Uruguay, dicen especialistas

Cannabis puede ayudar a diversificar matriz productiva de Uruguay, dicen especialistas

La producción de cannabis, que se abrió en Uruguay a partir de la regulación del mercado de marihuana recreacional, es una oportunidad para diversificar la matriz productiva del país, según fuentes especializadas consultadas por Sputnik.

"La planta de cannabis es una gran oportunidad para diversificar la matriz histórica económica de Uruguay debido a que permite pensar tanto en el cultivo como en la manufactura de productos medicinales, textiles y alimentarios; incluso estamos pensando en la posibilidad de exportar en el futuro", dijo a esta agencia el titular de la Secretaría Nacional de Drogas, Diego Olivera.

Este país estableció por ley en 2013 un mercado regulado de marihuana.

En 2017 se vendieron 1,7 millones de dólares de marihuana legal; se esperan inversiones privadas por más de 80 millones de dólares en el sector y se abrió la posibilidad de crear para el año próximo 2.500 puestos de trabajo.

El lunes se anunció oficialmente la creación de la Cámara de Empresas de Cannabis Medicinal, que nuclea a 14 compañías del rubro, extranjeras y uruguayas, reportó La Diaria.

Para el integrante del grupo de investigadores Monitor Cannabis, Gustavo Robaina, el mercado de cannabis es ideal para Uruguay, ya que no solo le permitiría producir materias primas, sino que es una "oportunidad" para romper con una "larga tradición de dependencia" con los mercados internacionales.

"Uruguay siempre termina vendiendo materia prima que luego es industrializada por los países del Norte; el problema con ese modelo de producción es que reproducimos la teoría de la dependencia, a la que América Latina ha estado condenada siempre", dijo Robaina a Sputnik.

Olivera, quien también es director del Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca), sostuvo que la producción de este vegetal implican también un impulso en la generación de puestos de trabajo, de ingreso de inversión extranjera, de oportunidades para empresarios uruguayos y un mayor desarrollo de conocimiento y de investigación científica.

PERSPECTIVAS DEL MERCADO

Según Olivera, el número de empresas irá progresivamente aumentando en los próximos meses y en caso de que se aprueben los 20 proyectos adicionales que se están estudiando, en 2019 se generarían 2.500 empleos directos.

"El hecho de que Uruguay tenga una normativa amplia y que además sea un país con estabilidad económica, prestigio internacional y certeza jurídica, favorece que determinadas empresas del mundo desarrollado vean con mucho interés al país como un posible destino de inversión", comentó.

En caso de que se aprueben esos 20 proyectos, los montos de inversión para el desarrollo de esta nueva agroindustria rondarían entre 80 y 100 millones de dólares.

Robaina puso de ejemplo a Canapur, una empresa que pretende desarrollar cannabis medicinal, por el impulso que ha tomado Uruguay, ya que implica una inversión de 57 millones de dólares, lo que podría hacer que el país se convierta no solo en proveedor de productos básicos sino en la "vanguardia" de productos médicos.

"Hay suficiente evidencia como para animarnos a invertir y eso lo saben las empresas; el dinero que podríamos ganar no tiene límites, un ejemplo de ello es Canadá, que en 2017 tuvo 3.000 millones de dólares de ganancia en cannabis medicinal", agregó.

Unas 400.000 personas están interesadas en utilizar el cannabis medicinal en Uruguay, según Robaina, que basó su afirmación en encuestas y sondeos de Monitor Cannabis.

"Estamos hablando de mucha gente y podríamos pensar que otros países podrían tener cifras similares o un poco más bajas; yo me pregunto, ¿cuánto es el 15 por ciento de 200 millones de brasileños?", interrogó Robaina.

De momento hay más de 100 clubes de cannabis en Uruguay, más de 28.000 personas habilitadas para la compra en farmacias y alrededor de 7.000 cultivadores para autoconsumo, según datos presentados por el Ircca.

NUEVOS PROYECTOS

Hasta ahora hay 17 empresas con autorización para el desarrollo de actividades de investigación, cultivo o industrialización de cannabis en Uruguay, informó el Ircca.

Además, el instituto expidió en los últimos meses licencias a la empresa Fotmer Corporation para el cultivo de cannabis psicoactivo con fines medicinales, al laboratorio Medicplast para la formulación de aceites medicinales y una crema cosmética, a la empresa Diego Di Cianna para la producción de dos marcas comerciales de yerba mate y, finalmente, a la empresa Dormul SA para desarrollar una investigación de base agronómica.

Por otra parte, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca ha autorizado a 11 empresas a cultivar cáñamo industrial (cannabis con una concentración de Tetrahydrocannabinol menor al 1%) que en conjunto alcanzan una superficie aproximada de 1.000 hectáreas de cultivo a cielo abierto y 15.000 metros cuadrados en invernadero.

Asimismo, hay cinco grupos académicos de distintas universidades que cuentan con autorización para el desarrollo de sus proyectos de Investigación.

Uruguay adoptó en 2013 la ley de regulación del cannabis que dejó en manos del Estado la producción, distribución y venta controlada de marihuana recreativa.

Esta semana Canadá se convirtió en la primera gran economía en adoptar un régimen similar.

En el mundo, existen algunos países en los que el uso de cannabis o cáñamo está permitido, aunque con diversas restricciones: México, Portugal, Israel, Brasil, Puerto Rico, Jamaica, Estados Unidos, Croacia, Dinamarca, República Checa y Reino Unido. (Sputnik)