Sobre las máquinas expendedoras de preservativos
(Mensaje enviado el jueves 28 de julio)
Estimado Emiliano,
Soy una Uruguaya residente en el exterior (Miami, para ser mas precisa) y no salgo de mi asombro al leer el articulo del diario El Observador titulado "La IMM obligará a colocar maquinas de preservativos en los locales comerciales".
Tengo que confesarme como "totalmente ignorante" con respecto a tales maquinas dispensadoras de preservativos. Imagino que si la IMM decidió imponerlas en locales públicos, debe ser porque debieron haber tenido alguna historia de éxito comprobada. Si bien yo trato de recibir información internacional, tengo que admitir que es para mí toda una novedad.
Sin embargo... yo pienso: ¿es que acaso la IMM piensa que va a eliminar los riesgos de una relación sexual casual impremeditada con maquinas dispensadoras de preservativos? ¿O es que para todos aquellos que decidan tener una cierta relación sexual impremeditada les será más sencillo encontrar los medios para protegerse? ¿Estará esa persona dispuesta a adquirir un preservativo sólo por el hecho de que este "disponible"?
A mí me parece que hay mucho más de trasfondo en todo este tema...
El hecho de que un restaurant ofrezca como parte de su menú ensaladas y comidas sanas, no quiere decir que el cliente no pueda pedir si así lo desea- una milanesa con papas fritas y huevos fritos. ¿O debería el gobierno obligar al dueño del restaurant a instalar una máquina dispensadora de frutas y verduras para que sus clientes dispusieran de un menú más sano?
No soy demasiado entendida en el tema (supongo que habrá sicólogos y sociólogos expertos y especializados en el tema), pero se me ocurre que alguien que irresponsablemente decide tener una relación "casual" (y esperemos que tal decisión no sea algo que se le haya ocurrido así como "de repente" en el entorno ¡de un baño publico!), no va a ser lo suficientemente responsable como para comprar un preservativo ...en una farmacia, en un supermercado, y tampoco en un baño público.
Creo que la educación sexual abarca mucho más que eso e involucra una serie de valores y responsabilidades que no se limitan a "tener un preservativo a mano".
Esas máquinas dispensadoras de preservativos son algo "accesorio" y no creo que vayan a eliminar los riesgos de enfermedades o embarazos. De hecho, en muchos casos el problema es que quienes se involucran en ese tipo de relaciones impremeditadas están totalmente alcoholizados o drogados... ¡ni hablemos encontrarse mentalmente capaces como para optar por el uso de un preservativo!
No es que yo piense como una puritana del siglo pasado (¡o antepasado!). Entiendo que la situación se puede dar... A mí me gusta mucho el vino y (al igual que a los Hippies) me gusta que la gente se pelee menos y se ame más... ¡Pero eso no significa (a diferencia de los Hippies) estar totalmente borracho, drogarse y tener sexo...!
Por otra parte, creo que antes de colocar dispensadores de preservativos en los baños públicos de Montevideo (lo cual no es una mala idea, pero entiendo que es algo "ACCESORIO" y no "IMPRESCINDIBLE"), la IMM debería sentar prioridades y asegurarse de que esos baños públicos contaran con un adecuado nivel de higiene (que definitivamente NO lo tienen) para evitar muchas otras enfermedades (jabón y papel higiénico mediante para empezar), disponer de higiénicos femeninos... (después de todo, las eventualidades femeninas son bastante más "accidentales" que el "sexo casual"), y por qué no... de alcohol medicinal, algodón, gasa, etc. para casos de accidentes. Se deberían pensar en las maquinas dispensadoras de preservativos como "opcional", para que el comerciante los ofreciera luego de que todos los requerimientos básicos de higiene y servicios estuvieran ampliamente satisfechos.
Esta es solo una opinión...
Atentamente,
Graciela
PD: A propósito...aquí en Miami se venden preservativos en muchos negocios, pero no en los baños públicos. ¡Podría ser un buen negocio...!