El quita manchas para alfombras y tapizados suele contener derivados del cloro que, a largo plazo, pueden favorecer la aparición del cáncer y provocar anemia y deficiencias a nivel del sistema nervioso.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que vivimos rodeados de 60.000 sustancias químicas. Con esta cifra a la vista, la ONG ecologista Greenpeace habla, directamente, de la crisis de los químicos.

Frente a este creciente peligro, la Unión Europea está en pleno debate y quiere crear un registro que se dedique a evaluar estas sustancias antes de otorgarles el permiso para salir al mercado y, de esta forma, empezar a frenar su uso.

Según datos revelados por la OMS, existen 60.000 sustancias químicas en el planeta. Pero en nuestro organismo hay, nada menos, que 300 sustancias químicas contaminantes. La Agencia para la Protección de la Salud del Reino Unido detectó que cada mes aparecen más de 600 sustancias químicas nuevas que se añaden a las 60.000 ya existentes en todo el mundo, informó El Mundo de España.

Pero, por el momento, la comunidad científica sólo logró demostrar los efectos del 7% de estos miles de químicos sobre el cuerpo humano. Claro, que a las multinacionales que trabajan con químicos no les interesa que se profundice en el tema. Pero con ese porcentaje de efectos demostrados da para alarmarse bastante y para tomar medidas a la hora de elegir qué productos comprar.

Respecto a los productos de limpieza en Uruguay los datos del Departamento de Toxicología del Hospital de Clínicas hablan por sí solos. Reciben ocho consultas diarias derivadas de la exposición a productos químicos que usamos todos los días para limpiar y desinfectar la casa. En total reciben 10.000 consultas anuales y un 30%, es decir, 3.000, se deben a problemas con productos de uso domésticos.

Toxicología advierte que en Uruguay faltan controles sobre estos productos, además señala que las empresas no suelen incluir la lista de químicos que usan en sus composiciones, y que tampoco están cooperando para que el equipo de Toxicología conozca con precisión el tipo de sustancias que oculta cada etiqueta.

En Toxicología explican que las fórmulas de estos productos suelen tener bajas concentraciones de químicos peligrosos. Esa fue una de las primeras medidas preventivas que tomó Uruguay. Respecto al tema, las empresas disminuyeran las dosis para evitar riesgos en la salud. Pero, de todas formas, hay algunas sustancias químicas muy peligrosas que se pueden encontrar en cualquier casa a la hora de mirar los productos de limpieza.

Algunas de esas sustancias figuran en una especie de "lista negra" de Toxicología. Las que más les preocupan son las sustancias corrosivas, que las encontramos en los productos para destapar cañerías y en los limpiadores de hornos.

La profesora adjunta Amalia Laborde habla de los productos más peligrosos: "Desde la visión de Toxicología podríamos decir que los productos que se usan a nivel domestico que más nos preocupan por dejar secuelas, sobre todo en niños, son los corrosivos. Sobre todos los que contienen soda cáustica, que se utilizan para limpiar cañerías o para realizar limpiezas en gran profundidad. Estos productos obviamente destruyen toda sustancia orgánica y por ende son efectivos para la limpieza, pero son extremadamente peligrosos", explicó.

En las clases de más bajos recursos uno de los hidrocarburos que más preocupa a Toxicología es el queroseno. Si hablamos de las clases más altas, muchos de los avisos de publicidad de mujeres felices promocionan productos de limpieza, que les facilitan la vida y hasta le dejan el pelo más brilloso, pero que también son peligrosos.

Los productos peligrosos que probablemente abunden en algunas casas son: limpiadores de alfombras, limpiadores de tapizados, lustra muebles, cremas para lustrar zapatos.

Laborde comenta sobre la peligrosisdad de algunas sustancias para determinadas personas, como el amoníaco para los que tienen problemas respiratorios. Pero los comerciantes no avisan en sus etiquetas de esta peligrosidad. "Quizá las afecciones que vemos vinculados a estos productos volátiles están siempre en la esfera respiratoria. Sin duda, quienes tienen antecedentes respiratorios han sufrido cuadros de descompensación vinculados a estos productos, sostuvo.

En cuanto a los productos de limpieza, hay críticas serias de Toxicología hacia las empresas fabricantes. En Europa, Greenpeace está en plena campaña para que la Unión Europea obligue a las empresas a detallar la lista de químicos en los productos. El problema es que Uruguay no es ajeno a este fenómeno. De hecho, los que más preocupados están son los médicos que trabajan en la Cátedra de Toxicología.

Las etiquetas de casi todos los productos dicen que en caso de intoxicación se comuniquen inmediatamente con el Centro de Toxicología más próximo. Pero, en muchos casos, Toxicología desconoce la fórmula de esos productos porque las empresas se niegan a decirlos. A raíz de este problema, la cátedra del Hospital de Clínicas está en plena campaña para lograr que las empresas les digan las composiciones exactas de sus productos. Pero la mayoría de estas empresas dedicadas a la higiene del hogar, se niegan a cooperar.

El problema es que en nuestro país no existe una normativa que le exija a las industrias a detallar los componentes químicos de estos productos. La forma de actuar de Toxicología es trabajar con mucha intuición y con la experiencia que le dan los años, explicó Laborde.

El Centro de Toxicología, dependiente de la Universidad de la República, pide que la responsabilidad recaiga sobre ellos únicamente en los casos en los que las empresas hayan dicho qué componentes usan. De lo contrario, ellos no pueden asegurar que van a poder tratar correctamente una intoxicación. Además, exigen que los productos tóxicos incluyan claramente, una advertencia para el consumidor, en un espacio grande y llamativo y no con esa tipografía cuerpo cinco imposible de leer.

Desde la Sociedad de Ecología Médica y Social, el doctor Dámaso Tor sostiene que los consumidores tienen que tomar consciencia de que las exposición a las sustancias químicas, a largo plazo, acarrean problemas de salud.

"Esa situación por parte del consumidor, hoy por hoy, pasa desapercibida. Es un hecho que a diferencia de otro tipo de contaminaciones, esta es menos notoria. A nivel doméstico, la exposición no es tan importante en tiempo y concentración. Lo que es significativo, es que la exposición prolongada de sustancias que en algunos casos pueden tener efectos sobre la salud, y ahí nos entramos con aromatizantes y otro tipo de productos que pueden generar algún trastorno a nivel de la salud", explicó Tor.

En cuanto a los cosméticos debemos tener en cuenta que hay muchas alarmas respecto a los cosméticos en los sitios web de organizaciones ecologistas. Pero fuentes de la propia Cátedra de Dermatología de la Facultad de Medicina confirman que los cosméticos tienen un potencial tóxico importante.

Respecto a los peligros en los cosméticos radica en usarlos de forma prolongada, es decir, lo malo no es maquillarse una vez cada tanto sino todos los días durante mucho tiempo, explicó Tor, de la Sociedad de Ecología Médica y Social.

Hay algunos químicos que se usan en los cosméticos que están catalogados como nocivos para la salud. Un ingrediente para poner en la "lista negra" es el triclosán, se trata de un antibacteriano que usan muchas fórmulas de pastas de dientes y también de desodorantes.

La Agencia estadounidense de Protección del Medio Ambiente lo incluye dentro de su lista de pesticidas, según informó el diario El Mundo. Además, según algunos estudios publicados en la revista 'Nature' esta sustancia tendría la capacidad de desarrollar cepas de bacterias resistentes a los antibióticos.

Otro de los cosméticos que están catalogados como nocivos para la salud es el aluminio, que se encuentran en sombras para ojos, lápices de labios y también en otro desodorante. Según estudios científicos, este metal es capaz de unirse al ADN y modificar su estructura así como alterar la actividad de los genes. Su absorción no sólo se produce por vía oral, sino también a través de la piel de ahí que las cremas y otros cosméticos sean una importante fuente de contaminación.

Una de las teorías que se barajan sobre la degeneración neuronal propia de la enfermedad de Alzheimer es que sea debida a la acumulación de aluminio. Aunque, según publica el diario El Mundo, todavía no existe una relación clara entre el metal y esta patología, se ha comprobado que las personas que padecen este tipo de demencia tienen elevados niveles de aluminio en el cerebro.

De todas formas, desde la cátedra de Dermatología de Facultad de Medicina aseguran que las dosis que se usan en cosméticos son muy pequeñas. Pero Toxicología pide a las empresas que especifiquen las cantidades de químicos que usan.

Hay otros dos químicos para eliminar de la lista, o por lo menos para usarlos menos. Los parabenos y el zirconio.

Hay estudios que demuestran que los más peligrosos de todos son los perfumes. Según fuentes de la Cátedra de Dermatología, aunque falta investigación, la poca evidencia científica que hay demuestra que los peores, dentro de los perfumes, son los denominados Musks o almizcles. Estudios científicos demostraron que pueden producir alteraciones endócrinas y también insuficiencia ovárica. Se sabe que estos perfumes son los más peligrosos, y pueden ser cancerígenos en animales. Aunque aún no está estudiado en humanos.

Otro químico peligroso es el ftalato, ingrediente que contienen los perfumes y que está presente en casi todos los cosméticos y las cremas que incluyen aromatizantes. La cátedra de Dermatología sostiene que hay evidencia científica sobre el potencial daño que puede causar en el cuerpo humano. Por ejemplo, malformaciones en el feto, alteraciones en la movilidad de los espermatozoides. Son muy tóxicos, aunque evidentemente lo que falta estudiar es a qué nivel se vuelven tan tóxicos.

En su campaña contra el uso de químicos tóxicos, Greenpeace hizo un estudio científico sobre los perfumes. Decidió estudiar 36 marcas comerciales diferentes, buscando justamente rastros de estas dos sustancias peligrosas: los almizcles y los ftalatos. Los resultados muestran que los ftalatos y almizcles sintéticos están presentes en casi todas las marcas de perfumes que se evaluaron. Todas las muestras menos una contenían niveles cuantificables de ftalatos con cantidades que varían mucho entre las diferentes marcas. Está demostrado que estas sustancias producen problemas en la reproducción, según explicó Sara del Río, encargada de la campaña de Tóxicos de Greenpeace España.

Para realizar un análisis de su propio perfume se pueden entrar a la página web: www.greenpeace.org/españa, ir al link a tóxicos y ahí va a aparecer el archivo acrobat con toda la lista de perfumes (http://www.greenpeace.org/raw/content/espana/reports/eau-de-t-xicos-una-investigac.pdf).

La sugerencia desde la Cátedra de Dermatología es que los consumidores exijan que los productos incluyan detalladamente su fórmula. La segunda recomendación es usar cosméticos hipoalergénicos, sin perfumes y sin colorantes. Pero claro, para eso falta que se incluyan todos los ingredientes, que pueden llegar a ser más de 100 en un perfume.

Greenpeace está en plena campaña para exigirle a los gobiernos que controlen los químicos que salen al mercado. Hablan directamente de la crisis de los químicos. Si entran en la página web de Greenpeace van a encontrar un link a un item denominado "La casa tóxica". Ahí van a encontrar toda la información sobre químicos que conviven en cada una de las habitaciones de nuestra casa.

Links de interés sobre el tema:
http://www.chemicalreaction.org/
http://www.greenpeace.org/espana/campaigns/t-xicos
http://archivo.greenpeace.org/toxicos/html/home.html
http://elmundosalud.elmundo.es/elmundosalud/especiales/2003/09/peligros_quimicos/introduccion.html