En el comunicado de prensa que publicó la Cancillería en su página web informó que desde el 1º de marzo de 2005 el gobierno Tabaré Vázquez "se comprometió a buscar una solución a un importante número de ciudadanos uruguayos residentes en la República Argentina que, por graves problemas económicos debían regularizar su situación de radicación, y así poder trabajar y residir legalmente en el vecino país; siendo indispensable para ello presentar los documentos de identidad que acreditasen su calidad de ciudadanos uruguayos".

Para tal fin la Cancillería solicitó a la Embajada uruguaya en Argentina un relevamiento de los ciudadanos en "situació de extrema pobreza, desempleo y marginalidad", que no pueden ingresar al mercado laboral ni regresar al Uruguay, y por distintos motivos, no tienen la cédula de identidad vigente. Además detalla que poseer este documento "les permitiría ampararse en la régimen de amnistía, destinado a regularizar permisos de residencia y trabajo en ese país".

El comunicado recuerda que en setiembre pasado se lanzó el "Operativo Celeste I" mediante el cual se documentó a 75 uruguayos que ya recibieron sus cédulas de identidad. Y posteriormente se llevó a cabo el "Operativo Celeste II" que regularizó la situación de otros 495, suministrándoles una cédula de identidad a través de un equipo de funcionarios de la Dirección Nacional de Identificación Civil enviados especialmente a Buenos Aires.

La cartera anticipó que entre el 1° y el 2 de diciembre se cumplirá con el "Operativo Celeste III", donde se espera atender a otros 800 uruguayos que se encuentran en esta situación, ya que en Argentina, debido a la cercanía y los vínculos tradicionales de ambos países, residen más de 200.000 uruguayos. 

Tanto el canciller, Reinaldo Gargano, como  el ministro del Interior, José Díaz, resaltaron la importancia social que esta iniciativa representa para ambas secretarías de Estado, especialmente por el alto contenido social que conlleva este "Operativo Celeste III".