Afortunadamente ya nadie discute si es vida humana o no la criatura en gestación, la evidencia científica y la imagenología demuestra que a los tres meses de embarazo (y antes también ) observamos un feto bien formado, basta preguntarle a esperanzados padres que sintieron cuando vieron a su bebé en la primer ecografía.

No obstante, en numerosas oportunidades los defensores de la mal llamada "Ley de Salud Reproductiva" argumentan que con la despenalización la cifra de abortos disminuye, y por ende la cifra de muertes  maternas, que las mujeres que más abortan son las de mediana edad con hijos a su cargo, y en general incurren en esa práctica por primera vez. 

Analizando la situación post legalización en Francia, Reino Unido, Estados Unidos y más cercanos a nosotros trabajos como la "Evolución del Aborto en España: 1985-2005", del Instituto de Política Familiar (IPF) en donde se afirma  que los abortos aumentaron en España un 6,5% en 2004, la mayoría de las mujeres que interrumpieron su embarazo eran solteras (64,47%), la mitad no tenía hijos y más de la cuarta parte (27,69%) ya se había sometido anteriormente a un aborto.

El presidente Tabaré Vázquez manifestó desde el inicio de su campaña un fuerte compromiso con el respeto por la vida y señaló en varias oportunidades que no está de acuerdo con el aborto por razones que no se inscriben en el terreno religioso, sino en el biológico y humano a partir de su condición de médico y como tal se opone a la despenalización del aborto enfáticamente.

No obstante  promueve amparar a la madre en situación de embarazo no deseado,  fomentar la responsabilidad sexual a través de la educación y facilitar el acceso a servicios de salud y agregaríamos sin temor a equivocarnos revalorando y apoyando la institución familiar.

Ma. Lourdes González  Bernardi 
Ginecóloga