Los datos duros que presenta el informe del INE indican que la tasa de actividad bajó de 61,8% a 60,15% y la tasa de empleo de 53,6% al 52,6% de enero a febrero. Al mismo tiempo señala que bajó el desempleo, esto se explica dado que de enero 37.000 personas se retiraron del mercado laboral, y abandonaron la denominada Población Económicamente Activa (PEA).

Algunas personas consultadas para este informe, que van desde expertos en economía hasta trabajadores desempleados, coinciden en que ahora hay más trabajo, más posibilidades de conseguir trabajo y que se está pagando mejor que en 2005. Pero hay elementos significativos. En la galería de El País, en Plaza Cagancha, es común ver a una multitud de personas tomando nota de las páginas de El Gallito Luis que se cuelgan en la vidriera. Otro ejemplo es el Banco de Seguros del Estado (BSE) que hizo un llamado para cubrir 18 puestos de suplente de lavandería y se presentaron casi 4.000 jóvenes, muchos de ellos estudiantes universitarios.

El economista Adrián Fernández, investigador del Centro de Investigaciones Económicas (CINVE), señaló que el comportamiento actual del mercado laboral  guarda ciertas similitudes con el de 2002, en el peor momento de la crisis económica. En este sentido, el economista añade que el fenómeno actual en términos de lógica económica se enmarca en el término "desocupados desalentados". "Acá probablemente estemos observando situaciones parecidas pero por otros fundamentos. Fundamentos relacionados con los trabajos zafrales, los trabajos del turismo. Las mejoras en los ingresos de las familias, que si bien no son muy importantes están indicando mejoras de asalariados y jubilaciones, donde las personas, en particular las mujeres, que fue el grupo que tuvo más cambios según el informe del INE, entran y salen del mercado de trabajo solamente cuando hay buenas condiciones de trabajo", explicó.

Conviene aclarar que si bien el desempleo parece mayor que hace un año la comparación no es del todo exacta porque desde enero se está utilizando un nuevo método de consulta en el INE, la medición mensual, en tanto, en 2005 se usaba la trimestral.

Los especialistas creen que si todo sigue normalmente la tasa de desempleo a fines de 2006 se ubicará en términos similares a la del año pasado, un 12,2%.

Respecto a la definición del término desocupados "acá hay que tener en cuenta que las personas que se definen como desocupadas son las que no tienen trabajo y buscaron uno. Lo que se observó en febrero, con relación a enero, es un descenso de las personas que buscaron trabajo. Las personas denominadas `activas´. Es decir, se da una disminución de la población económicamente activa, de los activos en febrero con relación a enero, eso se ve tanto en Montevideo como en el interior del país", explicó Fernández.

Según el INE el descenso se provoca debido a una baja exclusiva de los hombres del mercado laboral.

Alfredo, tiene 40 años y vive en el barrio Jardines, él fue una de las tantas personas que a raíz de la crisis de 2002 debió recurrir al ingenio para mejorar su situación y aprovechó un comercial que vio en la televisión de un conocido comercio de bicicletas para colocar un puesto de armador de bicicletas ambulante. Hasta ahora Alfredo sigue adelante con esa tarea, como un complemento de su trabajo fijo en el ámbito de la salud, una variante de trabajo "en negro" y de autoempleo.

"Por ejemplo, cuando pasaban información de Motociclo la gente iba y compraba. Y entonces me compré las herramientas que necesitaba. Me fui a Motociclo, puse las herramientas en el piso. `Un ambulante´. Y me puse a armar las bicicletas de forma ambulante. Y cuando la gente salía con la bicicleta en la caja me ofrecía a armársela... Por sólo 40 pesos le armaba la bicicleta y se ahorraban la plata del boleto", comentó Alfredo.

En el mundo de la demanda laboral el 2002 también fue un punto de inflexión. La psicóloga Beatriz Martínez, gerente de Recursos Humanos de la consultora KPMG, dijo que las empresas que menos sufrieron la crisis son aquellas que manejaron mejor todo lo referido a los climas laborales y destaca que actualmente existe un cambio al respecto, hay una preocupación más palpable por los climas laborales. "Las empresas están apuntando a un cambio de la cultura organizacional. Hay un escenario diferente con los trabajadores que fue dado por los Consejos de Salario y por la creación de algunas empresas de sindicatos. Esto hace a un relacionamiento diferente", señaló Martínez.

La tasa de empleo descendió y la primera explicación apunta a que enero es el mes fuerte para la zafra laboral del verano. En este mismo sentido, cabe destacar que en el interior no hubo variantes significativas, mientras que en Montevideo sí se produjo un descenso, sobre todo en las mujeres.

Respecto a las condiciones laborales, el INE habla de un subempleo que ronda el 13,8% de la fuerza laboral. El no registro al BPS asciende al 35,4%. Esto es un descenso de dos o tres puntos de empleo informal con respecto al año pasado. El economista Fernández aseguró que actualmente hay un 10% más de ingresos a la caja que un año atrás. "Actualmente se está dando una situación de mejora en la calidad del empleo", destacó.

Hablamos con varias personas que están buscando trabajo –ya sea como complemento o porque están desocupadas– y todas ellas han mencionado la posibilidad de trabajar en negro porque les resulta más rentable.

Daniel, un chapista de la Unión que tiene 35 años y tres hijos, hace tres años que trabaja por su cuenta, y si bien le gustaría abrir una empresa unipersonal, considera que no puede hacerlo porque asegura que pierde "competitividad". Calcula que debería pagar unos 3.000 pesos por mes y si lo hiciera debería encarecer su presupuesto, y plantea que hay muchos otros colegas chapistas trabajando sin factura.

Los horarios de trabajo de Daniel son muy variables, puede ir entre ocho y 14 horas. Sin embargo, tanto Daniel como Alfredo, sostuvieron que se nota más movimiento en la calle y eso puede traducirse como más trabajo.

En cuanto a lo que va a pasar con los salarios el economista Adrián Fernández dijo que no sólo no va a haber grandes cambios en el empleo y desempleo este año, sino que también los salarios tendrán un comportamiento similar. Los salarios tendrían un aumento final, a fines de 2006, similar al que tuvieron en 2005, que fue de poco más del 4% en términos reales tanto en el sector público como en el privado. Claro, hay que tomar en cuenta que en 2005 se llevaron a cabo los Consejos de Salarios, paulatinamente, volveríamos a estar como estábamos antes de la crisis de 2002.
Según datos proporcionados a En Perspectiva por el Observatorio del Mercado de Trabajo de la Dirección Nacional de Empleo (Dinae), el 2005 reflejó un incremento promedio en todos los sectores de actividad de un 1,4% con relación al año anterior. Y los sectores donde se reflejaron más aumento fueron la banca y los servicios a empresas (9,9%); el comercio, gastronomía y hotelería (4,9%); y la industria manufacturera y de combustibles (3,8%). A su vez, donde los descensos de actividad fueron mayores, se ubican los sectores de la administración pública (8,2%); agricultura, ganadería, pesca y minería (7,2%); transporte y comunicaciones (3,9%) y salud (2,3%).

Verónica y Jessica tienen 27 años y viven en el Centro, aunque Jessica viene de Maldonado. Ambas estaban el domingo de tarde, junto a otra media docena de personas, frente a las vidrieras de El País en Plaza Cagancha, donde estaba publicado El Gallito Luis. Casi todas las personas que estaban allí eran mujeres, muchas llevaban sus hijos pequeños con ellas, además de libreta y lapicera en mano para apuntar las ofertas.

En cuanto al mercado laboral, para las personas que buscan trabajo hay una buena noticia. Martínez, quien está a cargo del departamento de Recursos Humanos de la consultora KPMG, afirma que cualquier profesional o conocedor de un oficio tiene hoy más posibilidades de encontrar trabajo, si bien las áreas en donde su empresa nota más movimiento es en los puestos gerenciales.
 
Martínez también señaló que se está pagando mejor y que, por ejemplo, antes de la crisis un cargo gerencial bien remunerado podía llegar a los 5.000 dólares e inmediatamente después no llegaba a 60.000 pesos. Actualmente estamos como en ese nirvana anterior, ya que en algunos casos se está pagando hasta 4.000 dólares.

Además, la psicóloga de KPMG sostuvo que hay una mayor demanda en puestos técnicos: desde ingenieros a personal especializado o idóneos de planta, especialmente en el campo industrial. Paradójicamente, no hay una respuesta del mercado que abastezca la demanda laboral y uno de los factores puede ser que en Uruguay no se sabe buscar trabajo.

"Yo creo que ha habido como un desdibujamiento de la oferta (...) Hay mucha gente que no sabe a qué posiciones escribir y que masivamente escribe a todas. Entonces, se ha duplicado o triplicado la respuesta pero en la realidad de esas posiciones el grado de ajuste es muy bajo. Yo creo que en nuestro país la gente no sabe cómo buscar trabajo", señaló Martínez.

Los ejemplos sobran y son mucho más comunes de lo que la gente cree. El aviso dice claramente que manejo de inglés es excluyente y se presentan personas que no saben el idioma. Otra persona envía un mismo currículum a un puesto de secretaria, gerente general o encargada de ventas.

Martínez dice que se duplica o triplica la cantidad de personas que mandan su currículum a ese puesto, pero son menos de la mitad quienes realmente se ajustan a la demanda. La carencia de conocimiento a la hora de conseguir empleo, comienza a generar un círculo vicioso en el postulante: "conozco la oferta, me presento, me la rechaza, no me llaman, toman a otro, voy nervioso a una entrevista, me deprimo". Tener trabajo ayuda a la autoestima, pero buscarlo es desgastante, además de un gasto de tiempo y dinero.

Respecto a la mejor manera de conseguir trabajo "lo primero que uno tiene que hacer es pensar a qué avisos voy a responder y a cuales no. Y eso necesariamente lleva un tiempo de pensar cuál es mi perfil y experiencia, si es que la tengo. Cuál es mi perfil de formación y de personalidad (...) Lo primero que hay que hacer es leer bien el aviso y tener una visión crítica de uno mismo", aseguró Martínez.

A eso le siguen otros pasos como un currículum vitae adecuado al cargo, con las referencias y antecedentes que puedan servir a lo que la empresa o el posible contratante nos pide.

Abandonar el rol pasivo en la búsqueda de empleos es fundamental. Hay muchas ofertas laborales que no se van a encontrar en los medios convencionales como El Gallito Luis o los comerciales de televisión que cada tanto emiten pedidos de personal. Hoy casi todas las consultoras tienen páginas web donde se suben varias propuestas que no salen publicadas por otros lados y lo mismo pasa con las páginas web de las empresas más importantes.

El rol activo, además, implica hacer un seguimiento: quien consigue una entrevista o envía un currículum a una empresa tiene derecho de saber en qué va su trámite. Esto último es fundamental para cualquier postulante, saber que tiene el derecho de saber qué pasó con su presentación. De esta manera, se puede cerrar de una forma menos dolorosa el "círculo" de la búsqueda de empleo al que se refería Martínez.

Según explicó la especialista no existe una manera óptima de enfrentarse a una entrevista laboral. No hay reglas ni recetas. La sugerencia es no impostar jamás y vender la mejor imagen sincera de uno mismo. "No mentir, no querer mostrar algo que uno no es. Porque tarde o temprano eso se nota. Y si uno logra sortear las entrevistas y entra a determinada organización con un perfil que no es el de él, tarde o temprano lo va a sentir en el trabajo", señaló.