El ministro de relaciones exteriores, Miguel Angel Moratinos, anunció nuevas medidas a aplicarse en las costas, para ponerle un freno a estas llegadas de ilegales. "Habrá vigilancia marítima de la guardia civil y de la Policía, pero no queremos dar ese concepto de militarización, porque no ayudaría, sería contraproducente", afirmó.

Por su parte, Rodríguez Zapatero respondió varias preguntas y críticas sobre la política migratoria en la Cámara de Diputados. Negó que España tenga "serios problemas" para frenar la llegada de inmigrantes sin papeles, además de desmentir que España sea un "coladero" para los sin papeles. De todos modos, reconoció que el 2006 comenzó con "cifras manifiestamente superiores" a las de años anteriores (desde enero, llegaron más de 7.500 personas a las Canarias).

En lo que va de año, según el gobierno, España ha expulsado a 31.000 clandestinos entre africanos, latinoamericanos y europeos del Este. Estos dos últimos grupos llegan en proporciones muy superiores a los africanos.

Estados Unidos. El Congreso norteamericano debate la primera reforma de las leyes migratorias en 20 años y, aparentemente, el Senado estaría votando mañana la reforma. Ante esto, el presidente de México, Vicente Fox, inició una visita privada de cuatro días a Estados Unidos para tratar de explicar su postura sobre la migración de indocumentados, la mayor polémica entre ambos países.

"La migración es un reto que exige una solución de fondo, que no se soluciona con muros ni vallas, sino con puentes de entendimiento y de colaboración", dijo Fox.

Se estima que aproximadamente 11.500.000 de inmigrantes indocumentados viven en Estados Unidos y la mitad sería de origen mexicano.

(Con información de Clarín y El Universal)