La inmigración no sólo beneficia a los extranjeros que buscan una mejor vida en Estados Unidos, sino que "estos envían millones de dólares de su propio bolsillo a sus países de origen, una forma de ayuda extranjera verdaderamente eficaz", dijo la carta con fecha del 19 de junio pasado, informó Univision.com.

La mayoría de los signatarios estadounidenses son economistas y académicos de prestigiosas universidades, entre ellas Harvard, Loyola, Princeton, Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Chicago. Entre los signatarios extranjeros figuran economistas y expertos de Guatemala, México, Uruguay, Alemania, Austria, Bélgica, Brasil, Canadá, Inglaterra, Italia y Suecia, entre otros países.

En la carta, los firmantes lamentan que el debate migratorio en Estados Unidos, en particular los fundamentos económicos del asunto, se vean entorpecidos por "comentarios engañosos". Y destacan que, para comenzar, los inmigrantes no roban los puestos de trabajo a los norteamericanos dado que la economía de Estados Unidos es capaz de crear suficientes empleos para cubrir la demanda laboral "siempre que los mercados laborales permanezcan libres, flexibles y abiertos a todos los trabajadores de forma equitativa", señalaron.

Los temores por la pérdida de trabajos por culpa de los inmigrantes clandestinos "no tienen fundamento" y "la mayoría de los trabajadores no verán sus salarios afectados", señaló Benjamin Powell, miembro del Instituto Independiente.

Pese a que algunos estadounidenses podrían verse perjudicados por la inmigración, la gran mayoría de la población se beneficia de las contribuciones de los inmigrantes a la economía, incluyendo una baja de los precios al consumidor.

"El impacto de toda la inmigración en los trabajadores de escasa capacitación es muy probable que sea positivo, ya que muchos inmigrantes aportan a la economía estadounidense sus destrezas, capital e iniciativa", indica la carta.

En lugar de atacar a los inmigrantes "debemos promover políticas como mejorar al sistema de educación, que permitan a los estadounidenses ser más productivos", recomendaron los expertos.