Invierta en Uruguay

Casas prefabricadas "made in Uruguay"

Casas prefabricadas "made in Uruguay"

Durante muchos años las casas prefabricadas que se instalaban en Uruguay llegaban casi prontas desde el extranjero. Ahora la tendencia se revierte. Una familia venezolana podrá vivir en su país en una casa fabricada en Uruguay. En este marco, Alejandro Lagrenade, director de la empresa Unión Metalúrgica Industrial del Sur (Umissa), concretó un acuerdo para vender más de 12.000 viviendas prefabricadas a ese país. Además, aspira a consolidar estas ventas como exportación no tradicional para Uruguay.

Para concretar la exportación Umissa compitió con compañías de todo el mundo: Italia, España, China, Brasil e Irak. Desde el punto de vista de precios, "fuimos los más competitivos desde el principio, hasta le ganamos a China en su momento", comentó Lagrenade.

La historia comenzó en 2003. La empresa se formó para este proyecto de exportación y otros que están tratando de concretar. Pero ya trabajaban en el país desde hace 14 años.

La exportación de las 12.000 casas prefabricadas (2.000 para cubrir una emergencia en una zona de deslave y otras 10.193 para un barrio venezolano) se enmarca en el acuerdo de cooperación firmado entre Venezuela y Uruguay que permite pagar una parte de las importaciones de petróleo con exportaciones uruguayas.

Entre otros proyectos que Umissa tiene previstos con Venezuela se encuentra la construcción de escuelas, comisarías, policlínicas y campos deportivos.

En el mercado local, Umissa vendió unas 3.000 viviendas. "Hicimos escuelas y casa en todo el país. En Montevideo, en Manantiales de Carrasco, en La Tahona. Es un producto industrializado, se puede hacer de todo, desde una vivienda económica como solución de emergencia hasta una casa más terminada, con más acabados, con revestimientos más caros. Lo que sea", indicó Lagrenade.

Hace 15 años el 50% de las casas que se fabricaban en Uruguay eran con planchada, hoy ese tipo de obra no llega al 10%. "El desarrollo de la construcción surge por el clima, por la necesidad de protegerse del frío o el calor. En Uruguay tenemos la ventaja de que el clima no es ni muy frío ni muy caluroso. Pero si vemos una de estas casas, una de bloques y una de ladrillo con pared simple -una casa sencilla- y le preguntamos a cada familia cuánto consume en calefacción al año, la que está en esta casa (prefabricada) consume un 10% de lo que consumen las otras. Ese dinero para ellas es como un gasto de mantenimiento. Por otro lado, el mantenimiento de pintura, fisuras, humedades en esto es mucho menor", aseguró el director de Umissa.

El sistema que emplea la empresa en la construcción de las casas no es el que tradicionalmente se usa en Uruguay. Por ejemplo, no hay de por medio hormigón ni ladrillos, salvo en el revestimiento.

"Es un sistema industrializado. La fábrica produce cada elemento como si fuera una línea de montaje de autos. Los elementos son repetitivos, las columnas son todas iguales, hay seis modelos de paneles y con esos materiales se pueden hacer una casita de 30 metros cuadrados o un colegio de 2.000 metros, es indistinto, se repiten los elementos. En la obra el procedimiento es muy rápido porque no se corta nada, todos los elementos vienen a medida, los agujeros vienen hechos, sólo hay que poner los tornillos en el lugar exacto", explicó Lagrenade.

Este sistema lleva una estructura de aluminio, lo que permite que las casas no necesiten mantenimiento. "Los sistemas constructivos, por ejemplo los industrializados, básicamente dependen de los materiales. Hay materiales que no necesitan mantenimiento, que pueden estar en el exterior, expuestos a la lluvia, el sol, el viento, la corrosión y no tener ningún tipo de daño", señaló el director de Umissa.

La exportación total de las casas a Venezuela se desplegará a lo largo del año. Para llevar a cabo las ventas al exterior Umissa emplea en forma directa e indirecta entre 750 y 1.000 trabajadores. "La parte indirecta es muy importante porque los que suministran aluminio, por ejemplo, tienen que aumentar su producción en un 50%, cosa que no hacían porque el mercado local no lo demandaba, pero como este es un proyecto muy concreto se han organizado para crecer en este volumen. Hay mucho trabajo indirecto. Hay una fábrica que va a hacer puertas porque lo que hacemos nosotros es juntar una cantidad de partes, de las cuales nosotros sólo  hacemos algunas", dijo Lagrenade.

El director de Umissa indicó que aspira a consolidar las casas prefabricadas como una exportación no tradicional de Uruguay. En el futuro de la empresa hay dos proyectos más, "bastante avanzados", aseguró.


Servicio especial para Espectador.com de: Marialaura Ibarra.
Ilustraciones: Oscar Scotellaro.

Nota: las opiniones o preferencias expresadas son exclusivas del autor y no reflejan la opinión de la empresa.