Incertidumbre en Cuba por la salud de Fidel Castro
Tras 47 años de férreo control de la isla, el presidente cubano Fidel Castro delegó sus funciones por primera vez, a raíz de una crisis intestinal. Lo suple su hermano Raúl. "Los cubanos se acostaron entre la sorpresa, el estupor, el miedo, la incertidumbre. Mucha gente cree que se está ocultando parte de la verdad", informó el periodista Fernando Ravsberg. Para el 70% de los cubanos es la primera vez que el país tiene otro jefe de Estado.
(Emitido a las 8.26)
EMILIANO COTELO:
La noticia ha provocado un gran impacto en el mundo. Después de 47 años durante los cuales ha hecho gala de una salud de hierro, Fidel Castro delegó provisionalmente el poder en su hermano Raúl. Pocos días antes de cumplir los 80 años, Castro fue sometido a una intervención quirúrgica debido a una hemorragia intestinal y estará fuera del poder por varias semanas.
Así lo hizo saber el propio Castro a través de un comunicado que ayer de tarde, a eso de las 21:15 horas de Cuba (22:15 de Uruguay), fue leído por su jefe de despacho, Carlos Balenciaga.
(Audio)
"CARLOS BALENCIAGA:
Con motivo del enorme esfuerzo realizado para visitar la ciudad argentina de Córdoba, participar en la reunión del Mercosur, en la clausura de la Cumbre de los Pueblos en la histórica Universidad de Córdoba, y en la visita a Alta Gracia, la ciudad donde vivió el Che en su infancia, y unido a esto asistir de inmediato a la conmemoración del 53 aniversario del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes el 26 de julio de 1953, en las provincias de Granma y Holguín, días y noches de trabajo continuo, sin apenas dormir, dieron lugar a que mi salud, que ha resistido todas las pruebas, se sometiera a un stress extremo y se quebrantara."
(Fin del audio)
EC - El comunicado de seis puntos termina con un pedido de lealtad al pueblo con la revolución cubana. Dice: "No albergo la menor duda de que nuestro pueblo y nuestra Revolución lucharán hasta la última gota de sangre para defender estas y otras ideas y medidas que sean necesarias para salvaguardar este proceso histórico. El imperialismo jamás podrá aplastar a Cuba, la batalla de ideas seguirá adelante. Viva la patria. Viva la Revolución. Viva el socialismo. Hasta la victoria siempre". Firma: Fidel Castro Ruz.
¿Ante qué estamos? ¿Ante una transferencia provisoria o más bien definitiva del poder en Cuba? ¿Qué implica este anuncio para el futuro de la isla? Ese es nuestro tema en los próximos minutos.
Estamos en contacto con Fernando Ratzberg, periodista uruguayo radicado en La Habana, corresponsal de distintos medios de comunicación, entre ellos la BBC, y colaborador en varios momentos de El Espectador.
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Fernando, ¿la noticia fue una sorpresa también allí?
FERNANDO RATZBERG:
Fue una sorpresa total. El noticiero de televisión comunicó que al finalizar habría un comunicado del presidente cubano e inmediatamente después salió Balenciaga explicando la situación y la delegación de poderes. Fue una verdadera sorpresa y los cubanos se acostaron entre la sorpresa, el estupor, el miedo, la incertidumbre. Mucha de la gente que yo consulté inmediatamente después cree que se está ocultando parte de la verdad, que no lo están diciendo todo, que el presidente podría estar peor o más grave, que puede ser el fin definitivo de su mandato. Hay mucha incertidumbre. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los cubanos sólo conoce un gobierno, el de Fidel Castro, la mayoría es menor de 30 años, nació con Fidel Castro en el poder y eso le genera mucha incertidumbre.
EC - Hace un par de años Castro se había desvanecido durante un discurso. De todos modos la fortaleza física que mostraba impresionaba a cualquiera. Es más, el 26 de julio pasado Fidel Castro bromeó sobre su edad en una alocución que duró cinco horas. Dijo: "que no se preocupen los vecinitos del norte, que no pretendo ejercer mi cargo hasta los 100 años". Ese es el contexto en el que se produjo esta novedad. Tú dices que la gente no estaba preparada...
FR - No estaba preparada para nada. Efectivamente, más con el tipo de actividad que venía llevando: fue a Córdoba, estuvo en la cumbre, estuvo en la contracumbre, volvió aquí, dio el discurso el 26 de julio, por la noche dio otro discurso en otra provincia. Llevaba un ritmo de actividad que para nada hacía prever que estuviera enfermo.
EC - ¿Y cómo se interpreta el hecho de que recién ahora se haya divulgado esta noticia? Porque aparentemente la intervención no ocurrió ayer. ¿Cuándo tuvo lugar la operación?
FR - No se informa en el comunicado.
EC - Algunas versiones dicen que fue la semana pasada.
FR - Es posible. Tiene que haber sido en los últimos días de la semana pasada, porque el 26 de julio él habló en público.
EC - ¿Cómo se percibe el hecho de que no haya sido el propio Castro quien leyese el comunicado? La interrogante principal es a qué grado llega el estado de salud de Fidel Castro.
FR - Eso hace pensar que el estado de salud está muy deteriorado. Porque en las dos ocasiones anteriores, tanto cuando se desmayó como cuando se cayó y se fracturó la rodilla, antes de retirarse de los lugares volvió y habló con la población y explicó lo que había pasado. Hay que tener en cuenta que lo explicó con una rodilla fracturada en ocho pedazos y un brazo quebrado, en esas condiciones sentado en una silla le explicó a la población lo que había pasado con la caída. El hecho de que no haya sido él quien leyera el comunicado hace pensar que su estado de salud es bastante crítico.
EC - Elisa Lieber tiene alguna pregunta también.
ELISA LIEBER:
Llama la atención que haya tan poca información al respecto. Entrábamos más temprano en los medios cubanos oficialistas y simplemente está el comunicado, entonces no se sabe mucho más sobre el contexto. ¿Cuánto va a durar esto? ¿Varias semanas? ¿Se sabe algo más al respecto? ¿Se comenta algo en las calles? ¿Cómo se vive?
FR - Nada, absolutamente nada. Hay sorpresa, temor, temor al cambio, incertidumbre, desconfianza de que se estén ocultando cosas, pero información no hay ni va a haber. Hay un escritor cubano que dice que el capitalismo es tan inseguro que nunca sabe el ciudadano qué es lo que le pasará y en el socialismo el ciudadano nunca sabe qué fue lo que pasó. No hay información ni la va a haber, la única información que va a haber es la oficial. Y no vamos a tener acceso los periodistas porque no tenemos acceso a su casa, a los hospitales donde lo atienden ni a ninguna parte similar, ni ninguno de los médicos que lo atienden va a hablar con la prensa extranjera. Por lo tanto la información que vamos a tener va a ser la oficial y vamos a saber lo que oficialmente se quiera que sepamos.
EC - Llama la atención la justificación que da Castro en su carta para la delegación de funciones que realiza. Dice: "Como nuestro país se encuentra amenazado en circunstancias como esta por el gobierno de los Estados Unidos, he tomado las siguientes decisiones", y ahí vienen seis puntos, de los cuales los tres primeros son delegaciones de funciones que pasan a su hermano, Raúl Castro, y los otros tres son delegaciones de funciones a otros funcionarios y dirigentes. Porque no sólo delega sus funciones de primer secretario del Comité Central del Partido Comunista, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y presidente del Consejo de Estado y de Gobierno, sino también los cargos de impulsor principal del Programa Nacional e Internacional de Salud Pública, impulsor principal del Programa Nacional e Internacional de Educación, impulsor principal del Programa Nacional de la Revolución Energética en Cuba y de colaboración con otros países en este ámbito. Me llamó la atención no sé qué importancia pueden tener que Castro se preocupara por delegar también estos otros cargos.
FR - Para él son muy importantes, son sus proyectos. Por tanto no es raro que nombre personas para que sigan adelante con sus proyectos particulares. Los cargos que importan realmente, los que cuentan en el poder en Cuba, son los tres que delegó en su hermano: presidente de la República, secretario general del Partido Comunista y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas. Esos tres cargos son los que definen quién tiene el poder en Cuba y quién no. Lo otro es accesorio, colateral, es importante para él en la medida que son sus proyectos más queridos. Hay que tener en cuenta que deja esos proyectos colaterales fundamentalmente al sector ortodoxo del partido representado por José Ramón Balaguer, José Ramón Machado Ventura y Esteban Lazo, miembros del buró político.
EC - Al final del comunicado dice: "No albergo la menor duda de que nuestro pueblo y nuestra Revolución lucharán hasta la última gota de sangre para defender estas y otras medidas que sean necesarias para salvaguardar este proceso histórico". Suena como una especie de testamento. ¿Cómo es esto?
FR - Llama al Parlamento, al partido y a la población a defender la Revolución. Hay que tener en cuenta que la Revolución Cubana ha sido muy sostenida por la personalidad de Fidel Castro, por la fuerza magnética del presidente. Muchos cubanos antes que comunistas o revolucionarios se definen como fidelistas, entonces el hecho de que desaparezca, aunque sea en forma temporaria, la figura de Fidel Castro, hace temer que pueda perder adeptos o simpatizantes la Revolución. Es a esa fidelidad que está llamando del partido, del Parlamento y de la población, a mantenerse fiel aunque el presidente, aunque el caudillo o el líder no esté en este momento en el poder.
Esta mañana me di una vuelta por la ciudad para ver cómo se encontraba y estaba de lo más normal: las paradas de autobús llenas por problemas de transporte, la gente yendo al trabajo, ningún movimiento militar, ni siquiera había movimientos policiales en la calle fuera de lo normal.
EC - ¿Es la primera vez que Castro delega el poder desde que asumió?
FR - Exactamente. Y realmente eso hace pensar que su situación de salud es grave. Ni siquiera delegó el poder cuando lo operaron de la rodilla, en ese momento pidió que le pusieran anestesia local para poder seguir gobernando, y mientras lo estaban operando estaban entrando los ministros, etcétera, él siguió gobernando durante la operación. Tiene que ser algo muy serio, muy grave para que delegue todas sus responsabilidades.
EL - Ayer algunos analistas internacionales manejaban la hipótesis de que esto fuese un simulacro para la transferencia del poder definitiva. ¿Se maneja esta hipótesis allí, tiene alguna cabida?
FR - No creo que sea un simulacro, sería muy maquiavélico hacer un simulacro de este tipo. Tendría un montón de teatros, de operaciones mejores para hacer, podría simplemente renunciar temporalmente, salir del país... Habría miles de variantes que no fueran tan dramáticas y peligrosas como es esta. Hay que tener en cuenta que sería muy peligroso que la población se le fuera de las manos.
EC - De acuerdo con lo que está ocurriendo ahora, ¿cómo se supone que va a transcurrir la vida política con esta transferencia provisoria del poder a Raúl Castro, que tiene 75 años?
FR - Raúl Castro es un hombre mucho más duro por lo menos así se lo percibe que Fidel en lo militar e incluso en lo político, pero mucho más abierto, aperturista en el tema económico. Es muy posible que bajo el mando de Raúl Cuba se proyecte hacia un sistema parecido al de China, con más apertura económica pero con un férreo control político como hasta ahora.
EC - En cuanto a los festejos que se dieron ayer en Miami, tengo un mensaje que manda un oyente desde allí. Dice: "Ayer la calle 8 aquí se vistió de fiesta, parecía que Estados Unidos hubiera ganado la Copa Mundial. Yo estaba distraído, no tenía idea de qué se trataba, hasta que llegué a casa y me enteré en Internet. De todos modos no entiendo, porque continúa Raúl Castro al frente y por lo tanto el régimen, lo que los cubanos disidentes y muchos en el mundo consideran una dictadura, continuará aparentemente".
FR - Los festejos en Miami no son raros. Hay que tener en cuenta que en Miami festejaron la muerte del Che Guevara y la muerte de Kennedy. Podría significar la esperanza de que sin Fidel Castro el régimen se caiga, creo que esa es la apuesta, que es la misma que hicieron cuando se cayó la Unión Soviética, que inmediatamente caería el gobierno cubano. Están apostando a lo mismo, cuando hasta ahora no hay ningún síntoma que muestre que el régimen está debilitado.
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Edición: Mauricio Erramuspe