El gobierno canario reclamó al gobierno central que se "redoble la acción política" para frenar este fenómeno.

Según dijo a Cadena Ser el presidente canario, Adán Martín, los servicios públicos de las Islas están desbordados.

Hoy, por ejemplo, más de 1.300 africanos están alojados en dependencias policiales esperando para ingresar en centros de retención, en los que ya no entra nadie más.

Desde enero, 22.000 inmigrantes clandestinos llegaron a Canarias, duplicando el récord de años anteriores.

El presidente Adán Martín alertó que el país está frente a la peor crisis humanitaria: "Llevamos meses diciendo que esto iba a pasar. Estamos ante la mayor crisis humanitaria a la que se enfrenta España desde la guerra civil. Cuando lo decíamos, se decía que no era para tanto. Hemos tenido cientos de muertos este año; cifras diarias que desbordan todas las previsiones".

A todo esto, el presidente del gobierno central advirtió que España "no acepta ni aceptará inmigración clandestina ni ilegal".

A juicio de José Luis Rodríguez Zapatero, la inmigración que se hace por fuera de la ley es un "fraude" a los trabajadores", pero también aclaró que España "valora" la mano de obra extranjera que se vincula al mercado de trabajo.

"Nuestro país valora la inmigración, que necesitará la inmigración que esté vinculada al mercado de trabajo y a las necesidades laborales, pero que no acepta ni aceptará inmigración clandestina. Sencillamente porque no es inmigración. Es un fraude a los inmigrantes, a los trabajadores, a lo que han de ser las reglas de la convivencia".

España y Senegal lanzarán una campaña informativa para persuadir a la gente que se quiera ir del país africano a cambiar de opinión. Este proyecto será financiado por España.

Se calcula que ingresan 35 sin papeles por hora.

(Con información de AFP y Cadena Ser)