Este es un tema que se viene discutiendo y hablando desde hace tiempo, pero que no ha tenido solución, ya que los problemas de tránsito y los accidentes, lejos de disminuir, se han incrementado considerablemente.
El pasado 20 de junio el Poder Ejecutivo presentó al Poder Legislativo dos proyectos de ley íntimamente relacionados con el tránsito.

Estos proyectos, presentados el año pasado ante la opinión pública por el diputado oficialista Horacio Yanes, con una elaboración técnica llevada adelante por diferentes actores: como el Sindicato Médico, la Policía Caminera, la ONG Ruta de los Jóvenes y el periodista especializado Fernando Justo.

Gerardo Barrios, representante del Sindicato Médico del Uruguay, explica el por qué de la participación de la comunidad médica en este proyecto: "Es una reivindicación de hace muchos años que reclama, desde el sector médico, soluciones a un problema que viene transformándose poco a poco en la peor catástrofe sanitaria desde el punto de vista de la Salud Pública". 

En realidad, en un comienzo se trataba del mismo proyecto, pero luego fue dividido en dos. Uno de los proyectos plantea la creación de la Unidad Nacional de Seguridad Vial y el otro plantea las normas de Tránsito y Seguridad Vial dentro de todo el territorio nacional.

El proyecto de creación de la Unidad Nacional de Seguridad Vial busca sustituir la ley 16.585, de 1994, que creó la Comisión Nacional de Prevención y Control de accidentes de Tránsito. Por este medio se pretende crear un nuevo órgano con competencia nacional y jerarquía institucional superior. Se busca centralizar todo lo concerniente al tránsito en un solo organismo que se haga responsable de idear, articular y llevar a la práctica las medidas que sean convenientes.

Según comentó el diputado Yanes este tema del tránsito y, específicamente, el de los accidentes de tránsito, implica la participación de muchísimos actores: las intendencias, el Ministerio del Interior, el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Salud Pública. Eso provoca que nadie se haga responsable de nada y que ningún de estos actores tenga la chance de disponer medidas para mejorar la situación.

"Las recomendaciones internacionales es que se unifique todo y que haya un área responsable. Para poner un ejemplo concreto: si hay un problema de aftosa está el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (...) En este caso esta unidad viene a cubrir ese hueco. Es tener un lugar único por sobre las intendencias, ministerios que los obligue a coordinar y a intercambiar información y tener políticas nacionales por sobre los intereses sectoriales de cada una de las áreas", señaló Yanes.

La comisión que existe actualmente, que fue creada en 1994, está integrada por las intendencias, el Ministerio del Interior, el Ministerio de Transporte y el Ministerio de Salud Pública, sus miembros son honorarios y tiene un carácter asesor, pero no resolutivo.

La Unidad Nacional de Seguridad Vial, es decir la que propone este proyecto, funcionaría en el ámbito de la Presidencia de la República.  Tendría tres miembros, que serán designados por el presidente, que durarán en sus cargos durante cinco años y podrán  ser electos por un nuevo período. Otra cosas importante es que serán rentados, no como los miembros de la comisión creada hace 12 años, que son honorarios.

Las competencias y objetivos de este nuevo órgano será regular y articular todo lo concerniente al tránsito, así como establecer políticas y estrategias al respecto. Además, tendrá que asesorar en materia de tránsito a todas las personas públicas o privadas, elaborar políticas sobre seguridad vial, promover programas de acción necesarios para combatir los accidentes de tránsito, sugerir y ejecutar pautas de educación y capacitación para el correcto uso de la vía pública, elaborar programas educativos con organismos públicos y privados, y varias otras cosas más que están especificadas en el proyecto. Sería una Unidad Reguladora, al estilo de la URSEC o la URSEA, según indicó Yanes.

El otro es un proyecto marco de tránsito, que establece normas generales de tránsito, constituyendo la base para crear las normas necesarias para dar uniformidad e igualdad de trato a todos los actores de la circulación  vial del país. Es un proyecto bastante extenso, son 63 artículos distribuidos en casi 30 páginas. Contiene todas las normas para regular el tránsito y algunas novedades que van a repercutir en los usuarios. Por ejemplo, actualmente cuando se hace el test de alcoholemia el máximo nivel de alcohol en sangre aceptado es de 0.8, y si se aprueba este documento pasará a ser de 0.5. Es decir, que la tolerancia va a ser menor a la actual.

Sobre este tema, Javier Berruti, de la ONG Ruta de los Jóvenes, que ha sido parte de este proyecto de ley desde su comienzo, comentó que la organización se ha ocupado mucho del tema de la bebida relacionada con la conducción. Ya desde hace un tiempo viene aplicando la iniciativa llamada "Una Noche por la Vida", que se practica desde 1999 en Francia.

La idea es ir a los boliches nocturnos y abordar a los jóvenes "para que identifiquen para ese noche un chofer. Esta persona va a tener la posibilidad de entrar gratis al boliche, se le van a regalar también dos refrescos, pero si se compromete a no exceder los limites de alcohol", explicó Berrutti.

Según contó Berrutti los resultados son muy auspiciosos, incluso mejores de los esperado. "La primera dinámica se logró un 68% de adhesión", señaló.

Las otras innovaciones que plantea el proyecto es la obligatoriedad del seguro contra terceros, la obligatoriedad del casco, un asunto muy discutido y comentado en los últimos tiempos. Este proyecto pretende darle a la obligatoriedad un carácter de ley nacional, para que rija en todo el territorio uruguayo. Lo cierto es que el casco está generando muchos problemas, como en Colonia, por ejemplo, en donde la población juntó firmas necesarias para forzar un plebiscito.

Sin embargo, Gerardo Barrios, médico intensivista acostumbrado a lidiar con accidentados de tránsito, dijo que cosas como las que pasan en Colonia se deben a la falta de información que maneja la gente. "el que no usa casco tiene un 300% más probabilidades de fallecer en un accidente de tránsito. En definitiva el elemento protector es indiscutible", explicó.

Recordemos que una de las competencias de la Unidad Nacional de Seguridad Vial es sugerir y ejecutar pautas de educación y capacitación para el correcto uso de la vía pública, un territorio que hoy por hoy parece poco explorado.

Barrios también indicó que la gente tiene un profundo desconocimiento acerca de cómo actuar una vez ocurrido el accidente. Es decir, como actuar entre el accidente y la llegada de la ambulancia. Según comentó hay estadísticas internacionales que marcan que actuando como se debe en ese momento en que se espera la llegada de la ambulancia se puede evitar el 40% de las muertes.

Otra de las modificaciones, que es muy importante y se trata de otro tema añejo, es el ya famoso registro nacional de conductores e infractores.

"La gente que saque la libreta de chofer va a estar en un registro y si pierde o le roban la libreta va a existir una red informática en todo el país le va a saltar que ya tuvo libreta y los antecedentes de ese conductor. Con esto lo que se intenta hacer es que si te retiran el documento no puedas ir a otro lugar del país a sacar de nuevo la libreta", indicó Yanes.

En síntesis, el espíritu de este proyecto es darle carácter nacional a todo lo que tiene que ver con la normativa vial.

Respecto a quienes están en contra de este proyecto, hace pocos días el Congreso de Intendentes dio el visto bueno a la creación de la Unidad Nacional de Seguridad Vial. De 19 intendentes, sólo el de San José, Juan Chiruchi votó en contra. Además, Chiruchi anunció que si prospera este proyecto presentará un recurso de inconstitucionalidad contra la iniciativa, porque esta "lesionará gravemente las autonomías municipales". También dijo que la decisión tomada por sus colegas de otros departamentos "fue una de las más lamentables de los últimos tiempos".

Según Chiruchi "esta ley lesiona las autonomías municipales como nunca, generando la centralización de una responsabilidad que le corresponde a los municipios y a la que éstos no tienen por qué renunciar". Nosotros intentamos hablar con Chiruchi para tener su opinión en forma directa, pero no tuvimos suerte.

Otra de las cosas que se discutió en el Congreso de Intendentes es la integración que tendría la futura Unidad Nacional de Seguridad Vial. Dos de los integrantes surgirían del propio Congreso de Intendentes y, por otro lado, uno de las cosas que se está negociando es que de esos dos, uno perteneciera al Encuentro Progresista y otro al Partido Nacional. Lo cierto es que el proyecto está todavía en la Comisión de Transporte de Diputados. Los integrantes del Partido Nacional, David Doti y Jaime Trobo, pidieron un plazo de un mes y medio para analizar la iniciativa. Los otros dos integrantes, Juan José Domínguez y Julios Cesar Fernández, pertenecen al Encuentro Progresista y pretenden llevar este tema al plenario en setiembre, aún sin contar con la mayoría dentro de la comisión. Es decir, ellos no quieren respetar el plazo que pidió el Partido Nacional, cuyos intendentes, excepto Chiruchi, ya aprobaron la iniciativa.

Se precisa para aprobar el proyecto mayoría simple, así que el partido de gobierno puede sacarlo fácilmente en el plenario. La bancada de gobierno quiere primero resolver la creación de Unidad Nacional de Seguridad Vial y después, en una segunda etapa, el proyecto marco de normas viales.

Para el finalizar, algunos números: en el 2005 murieron 389 personas por accidentes de tránsito en el Uruguay, mientras que en los primeros seis meses de este año ya murieron 205. Esto quiere decir, que si seguimos este ritmo, en el 2006 vamos a superar holgadamente lo del año pasado.

Es evidente que las pérdidas humanas es lo más lamentable, pero también está la pérdida económica del Estado, según indicó Barrios.

Según señaló Yanes, el país gasta en accidentes de tránsito un monto anual similar al del total de las exportaciones de carne.