Entrevistas

Suicidio de Rodríguez Buratti no afectaría la causa "Soba-Mechoso"

La noche anterior al día en que podía ser procesado por las desapariciones de los uruguayos Washington Barrios, Gerardo Gatti, León Duarte, Adalberto Soba y Alberto Mechoso, el coronel Juan Antonio Rodríguez Buratti se suicidó. El abogado de Serpaj, Guillermo Paysée, afirmó que la causa no se vería afectada "más allá del impacto razonable que causa en cualquier circunstancia el suicidio de una persona".

(Emitido a las 7.40)

EMILIANO COTELO:
Parece claro que en esta jornada hay un hecho dominante, el que acapara los titulares principales de los diarios de este lunes 11 de setiembre. Por ejemplo, El País dice: "Militar citado se mató. Caso de desaparecidos: el coronel retirado Juan Rodríguez Buratti resistió detención dispuesta por la justicia y se descerrajó un balazo. Hoy debía comparecer junto con otros ocho oficiales".

El Observador: "Militar se suicidó el día previo al fallo judicial".

La República: "Abrumado por el grito de los desaparecidos, se quitó la vida el coronel Rodríguez Buratti".

El matutino la diaria pone en su portada en vez de una foto un gran cuadro en gris sobre el cual imprime una frase de Mario Benedetti entre comillas: "Un torturador no se redime suicidándose pero algo es algo".

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EC - Este hecho tan fuerte ocurre unas horas antes de las actuaciones clave que hoy llevará adelante el juez en lo penal Luis Charles. El magistrado decidirá si acepta el pedido de la fiscal Mirtha Guianze para procesar, por asociación para delinquir y privación de libertad, a algunos de los nombres que han sido más señalados en las denuncias por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura, Gavazzo, Silveira, Ramas, Maurente, Arab, Vázquez, Medina y Sande Lima.

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EC - ¿Cómo se produjo la muerte del coronel Rodríguez Buratti?

La República consigna que "el coronel retirado Juan Antonio Rodríguez Buratti falleció anoche a las 21.02 en el Hospital Militar a raíz del disparo de un proyectil calibre 9 milímetros que él mismo se había efectuado en la cabeza. Los hechos comenzaron a darse las 19 horas en el estacionamiento de su domicilio particular, ubicado en avenida Italia 2833. Pocos minutos antes efectivos de INTERPOL habían concurrido hasta el edificio, donde Rodríguez Buratti residía junto con su mujer y un hijo, a los efectos de proceder a su arresto. También habría participado en este operativo un coronel del Ejército, aunque este extremo no pudo confirmarse anoche", agrega el artículo.

"Rodríguez Buratti, propietario desde hace más de 20 años del apartamento 605, habría solicitado a quienes iban a detenerlo, que le concedieran unos minutos para ir a buscar un bolso al estacionamiento. Allí, en forma solitaria, se descerrajó el tiro. Buratti tenía en la guantera de su automóvil en forma permanente una pistola 9 milímetros que fue la que en definitiva empleó. Aún con vida, aunque en un estado de extrema gravedad, Rodríguez Buratti fue trasladado al Hospital Militar. Pese a los intentos desesperados de los facultativos, dejó de existir dos minutos pasadas las 21 horas", informe La República.

"Hoy antes de las 8 iba a ser conducido a la sede penal de 19º turno, del doctor Luis Charles, junto con los otros ocho implicados en violaciones a los derechos humanos. La fiscal Mirtha Guianze había pedido procesamientos con prisión por los delitos de privación de libertad y asociación para delinquir, dentro del expediente que investiga la desaparición de Adalberto Sosa y Alberto Mechoso. Fuentes judiciales aseguraron anoche que las actuaciones en el juzgado no se suspenderían por este hecho.

Juan Antonio Rodríguez Buratti, alias 301, nació el 11 de abril de 1932 e ingresó a las Fuerzas Armadas el 28 de abril de 1947 con 15 años recién cumplidos en el arma de infantería. En 1965 ascendió al grado de mayor y dos años más tarde ingresó en la Escuela de Armas. En 1976 actúa bajo el cargo de teniente coronel en el Servicio de Inteligencia de Defensa. Dos años más tarde asciende a coronel. En 1982 se desempeña como ayudante general del Estado Mayor del Ejército.

En esta causa en la que se investiga la desaparición de Adalberto Soba y Alberto Mechoso, cuando fue interrogado por el juez Luis Charles, el coronel Rodríguez Buratti declaró que nunca había estado en Argentina durante el período en que ocurrieron los hechos que se investigan, más concretamente negó su participación en el centro clandestino de detención Automotores Orletti.

Según fuentes judiciales, el ex coronel Rodríguez Buratti aseveró que únicamente había realizado tareas administrativas durante su actividad en el Servicio de Información de Defensa (SID) en nuestro país.

Según las investigaciones, Rodríguez Buratti estuvo al mando del operativo que trasladó a principios de 1977 a María Claudia García de Gelman desde la denominada Base Valparaíso a los campos del batallón 14, donde la joven argentina fue asesinada y enterrada. El grupo de tareas encabezado por Rodríguez Buratti, entonces jefe del Departamento II del Comando, estaba integrado además por el ex capitán José Arab, que era su enlace en el SID, y el coracero Ricardo Medina. Sobre el cuarto hombre que habría participado en aquel operativo, el más emblemático de todos los que se vienen investigando, el operativo de muerte de María Claudia García de Gelman, hay dos versiones, la que señala que se trató de Pajarito Silveira y la que apunta al policía José Sande Lima. Rodríguez Buratti, según todas las versiones, se habría bajado del automóvil al llegar al batallón 14 y no habría participado directamente en el asesinato de la joven".

Estamos en diálogo con el doctor Guillermo Paysée, abogado del Servicio Paz y Justicia (Serpaj) en Uruguay.

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Doctor Paysée, ¿cómo recibió la noticia del suicidio del coronel Rodríguez Buratti?

GUILLERMO PAYSÉE:
Me acabo de enterar por la información que ustedes están brindando. No leí todavía la prensa de hoy.

Lo que quiero destacar de la jornada de hoy es la expectativa que hay por poner fin al velo de impunidad que cubre a nuestro país, ya que por primera vez concurren militares acompañados de sus abogados ante una solicitud fiscal de procesamiento por los delitos a los que ustedes hacían referencia.

EC - Por primera vez podríamos estar ante el procesamiento con prisión de ex militares y ex policías por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.

GP - Sí, hasta ahora sólo tenemos el hecho del ex canciller Blanco que fue procesado con prisión por el caso de Elena Quinteros, pero involucró sólo un civil. En los hechos de hoy los involucrados son varios militares, entre los cuales estaba el militar que se quitó la vida. Desconozco si los motivos estuvieron vinculados sólo con la citación de hoy a la sede judicial o si hubo otros hechos. Sobre ese tema no puedo decir nada, pero a criterio de la fiscal era una de las personas involucradas, estaba investigado, ya había declarado en estas actuaciones y por lo tanto el juez tenía que resolver sobre la situación jurídica de él con respecto a las violaciones de los derechos humanos y de las otras personas que a esta hora ya estarían en el juzgado.

EC - En esta causa OCOA, que incluye las desapariciones de Washington Barrios, Gerardo Gatti, León Duarte, Adalberto Soba y Alberto Mechoso, se va a incorporar hoy el llamado caso del segundo vuelo de Orletti, según informa hoy el diario La República. ¿Usted tiene estos mismos datos?

GP - Sí, la denuncia del segundo vuelo la hicimos desde Serpaj junto con otras organizaciones y otros abogados a título personal. En un principio se había presentado en el juzgado de la doctora Merialdo, pero ésta entendió que se estaban estudiando los mismos hechos en el juzgado del doctor Charles, situación que llevó a que se unificaran los expedientes. Seguramente el segundo vuelo pasa a ser un elemento de investigación en la causa por la que hoy se puede llegar a tomar o no resoluciones.

EC - ¿Qué acusaciones pesaban en este expediente sobre el coronel Rodríguez Buratti en particular? ¿Cuáles eran las denuncias formuladas sobre su actuación en la época de la dictadura?

GP - Las denuncias del expediente sobre el que se va a resolver hoy fueron presentadas por el doctor Pablo Chargoñia, no sé exactamente en qué pudiera estar involucrado Rodríguez Buratti. Ustedes hablaban de su negativa en cuanto a haber viajado a Argentina; los militares en general cuando han ido a declarar al juzgado han negado o han tomado distancia de lo que vendría a ser el Plan Cóndor, aquel plan asesino que operaba en toda la región, sin fronteras, y que permitía a militares y civiles trasladarse a otros países y trasladar gente, como ocurrió en el segundo vuelo, sin que ello generara registros ni ningún tipo de actuación porque era la forma en que se obraba en esa época. Seguramente la fiscal tenía pruebas de esos hechos vinculados con los ciudadanos uruguayos que estaban en la denuncia, el caso de Soba, Mechoso, Gatti, y eso fue lo que llevó a investigarlo y a solicitar su procesamiento, al igual que el de nueve militares y policías más.

EC - ¿Qué impacto puede tener en la evolución de esta causa el hecho de que se haya suicidado el coronel Rodríguez Buratti? Durante años se especuló con la posibilidad de que al momento de ser detenidos los militares acusados por violaciones a los derechos humanos resistieran. Se habló de distintas formas de resistencia, en particular llegó a hablarse de la posibilidad de suicidio. Ahora estaríamos ante una de esas formas de resistencia.

GP - A los efectos judiciales la única significación que tiene es que respecto de la persona que pone fin a su vida cesa todo tipo de investigación. Lo mismo sucede en el caso de los fugados, por ejemplo Cordero, que está en Brasil, está requerido por algunas cosas. No se sigue el procedimiento en ausencia de la persona, hay distintos elementos que hacen cesar la investigación sobre la persona. Pero esto no es ningún obstáculo para resolver sobre la situación de los demás involucrados, el doctor Charles tiene una solicitud de pedido fiscal y tendrá que tomarles declaraciones en presencia de sus abogados.

EC - Mi pregunta iba a lo que puede tener como consecuencia en la interna de los militares más duros integrantes de los grupos que han sido acusados de violaciones a los derechos humanos y eventualmente dentro de las Fuerzas Armadas.

GP - Escuché las circunstancias que ustedes describían, ¿pero qué puede llevar a una persona a tomar una decisión así? Concretamente la instancia de hoy implicaba para esta persona, igual que para las demás, dar la cara ante la justicia y asumir las responsabilidades que pudiera tener. Nos consta que en esta causa los militares no lo han hecho a lo largo de este tiempo, han tratado de tomar distancia de los hechos en los cuales hay pruebas más que suficientes de que han estado involucrados, incluso por documentación y reconocimiento que han estado haciendo las propias fuerzas en los últimos tiempos. Son medidas singulares, el grueso de las otras personas involucradas está hoy en el juzgado y, salvo una persona que se fue del país, las demás van a asumir sus responsabilidades. No creo que esto afecte, más allá del impacto razonable que causa en cualquier circunstancia el suicidio de una persona.

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Edición: Mauricio Erramuspe