Derrumbe: para el Sunca no había ni la mínima seguridad
El Sunca denuncia que el reciclaje del edificio de la Ciudad Vieja que se derrumbó ayer no tenía las medidas de seguridad necesarias para trabajadores y transeúntes. "El arquitecto no tomó las previsiones de apuntalamiento como se tiene que hacer en cualquier trabajo de este tipo", afirmó Julio Rodas, secretario de Prensa del sindicato de la construcción.
(Emitido a las 7.45)
EMILIANO COTELO:
A las 14.20 de ayer el edificio del ex Hotel Juncal se vino abajo. El techo y el frente del segundo piso se derrumbaron y arrastraron al primero. La nube de humo se vio desde varias cuadras, según relataron testigos que cita hoy el diario El Observador.
Varios obreros se tiraron desde el primer piso para evitar que las paredes les cayeran encima. "Nos tuvimos que evacuar solos", relató uno de ellos.
La causa del accidente fue un sobrepeso de la grúa en el techo, según dicen técnicos de la Intendencia Municipal de Montevideo. Para el sindicato no fue un accidente sino "un asesinato".
Estamos en diálogo con Julio Rodas, secretario de Prensa del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Afines (SUNCA).
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Señor Rodas, ustedes han decretado un paro hoy entre las 9 y las 13 horas a raíz de este accidente de ayer.
JULIO RODAS:
Nosotros tenemos resuelto por asamblea que cada vez que haya un accidente fatal en el que fallezcan compañeros paremos inmediatamente al otro día como protesta. En este caso, incluso antes de que aparecieran los cuerpos de estos dos compañeros, más allá de mantener una esperanza de que estuvieran con vida, igual decretamos el paro por la magnitud del accidente. El paro fue decretado ayer a las 18 horas en virtud del accidente, de lo que vimos, de lo que presenciamos varios de los dirigentes que estuvimos allí. Ya estaba decretado de antemano.
EC - ¿Por qué? ¿Qué es lo que han visto como irregularidades en esta obra?
JR - Cualquiera puede haber apreciado que esta casona era de principios del Siglo XX o fines del XIX, una casona de 100 años. El arquitecto que estaba haciendo el reciclaje en una obra de este tipo, con paredes rajadas como se vio, que no se rajaron a raíz del derrumbe sino que ya estaban rajadas de antes, no tomó las previsiones de apuntalamiento como se tiene que hacer en cualquier trabajo de este tipo.
EC - ¿Tienen confirmado eso? ¿No se tomaron previsiones de apuntalamiento?
JR - Se veía a simple vista, no había un solo apuntalamiento ni fuera ni dentro. Lo más grave, además de lo que pasó: si ayer la calle Juncal no hubiese estado cortada por la movilización del PIT-CNT, ¿cuántas personas habrían muerto? En la calle no había nadie porque estaba cortada por la movilización del PIT-CNT. No había una sola baranda, una sola malla, una red, no había nada que protegiera al transeúnte. O sea que se agravan declaraciones muy apresuradas de gente que estaba ahí, del intendente y demás, que decía: "esta obra tenía los permisos en regla". Sí, los permisos podían estar desde hace dos años, tres años, para realizar el reciclaje. ¿La Intendencia no vio que había peligro de derrumbe? Porque después es fácil, cuando ocurre una desgracia de este tipo todo el mundo se quiere sacar la responsabilidad de encima y hace declaraciones de todo tipo diciendo que se cumplían las normas. Esta norma no cumplía lo más mínimo y más esencial en materia de seguridad.
EC - ¿Para usted dónde está la responsabilidad? ¿Qué dice el sindicato?
JR - El arquitecto propietario de la obra, dueño de la obra como él dijo, es el principal responsable. El principal responsable es él, que hizo trabajar a esta gente en esas condiciones. Las investigaciones dirán si fue un sobrepeso de la grúa, cosa que a nosotros no nos convence para nada, no era una grúa de tal magnitud. Yo no la vi, pero eran paredes viejas, que no tenían las vigas correspondientes, eran paredes montadas sobre paredes, poner vigas en los laterales enganchadas a esas paredes... No sé qué sobrepeso tendría, si las dos lozas ya estaban prontas, no sé cuál fue el motivo, pero me parece que fue el sobrepeso de la propia construcción que se estaba realizando sin tomar las previsiones por parte del arquitecto.
EC - Ustedes también han acusado al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).
JR - Más allá de acusar -no sé si la palabra es acusar-, reclamamos, estamos trabajando con el ministerio desde hace tiempo pero aparentemente hay cosas o puntos de la madeja que no logramos destrabar. Los inspectores de Trabajo actúan ante denuncia, muchas veces actúan ante denuncias hechas por nosotros, por cualquier vecino o por cualquier trabajador. Ante la denuncia van e inspeccionan, a veces clausuran y a veces no, ven cómo está la obra. Nosotros reclamamos que haya una política de prevención de accidentes, que se tomen zonas de Montevideo. Lo hemos propuesto a la tripartita y estamos pidiendo una tripartita más general, con todos los directamente involucrados en el sector para funcionar de una vez por todas tanto en materia de seguridad e higiene como en formalidad. Que haya una inspección antes de empezar la obra, y si está en condiciones que trabaje normalmente y si no, que sea clausurada en parte, los andamios, o que se exija poner lo que falta. Eso no se hace.
Hoy lamentamos dos muertos más en la industria de la construcción en una obra que estaba a dos cuadras del ministerio y que nadie vio, que nadie inspeccionó. Después los informes dirán con qué cumplía, qué contenía y qué no en materia de seguridad, pero todo el Sunca se juega la cabeza que esta obra no tenía los más mínimos reparos en materia de seguridad para los trabajos que se estaban haciendo.
EC - Ustedes están preocupados por lo que ocurre en la construcción en general con las normas de seguridad. Atribuyen responsabilidad a algunas empresas, al MTSS porque no estaría llevando adelante los controles sorpresivos que serían eficientes. ¿Pero qué pasa con los propios trabajadores? Porque en Uruguay tenemos en general una cultura poco afecta a la prevención. Por supuesto, afortunadamente hay muchas excepciones, pero todos hemos visto obreros de la construcción despreciando algunas herramientas de seguridad como pueden cinturones, cascos o botas especiales. ¿Cómo están trabajando el tema dentro del propio sindicato?
JR - Venimos insistiendo, no sólo los trabajadores, reclamándole al ministerio cursos de capacitación en todas las obras. Hace años que no hay rubros para hacer esos cursos de capacitación en materia de seguridad para los delegados de obra. Y se agrega el tema que usted dice, puede haber cierta cultura de cuidarnos poco en materia de seguridad en el tránsito, en el trabajo. Usted puede tener razón.
EC - Es evidente, en alguna gente hay incluso la sensación de que si se utilizan el casco o el cinturón se es menos valiente, menos hombre. Ese tipo de pavadas ocurre en Uruguay.
JR - En este caso el casco no las habría salvado la vida.
EC - Entiendo.
JR - En las obras donde tenemos condiciones para organizar trabajadores, porque existe también una palabra que no sé si ocurrió en esta obra pero en muchas ocurre, que es represión: "si te afiliás al sindicato, si te organizás, te echo". Estamos en plena crisis, en la industria no hemos salido de aquella crisis estructural, aquella crisis grande de 2002, hemos salido apenas. Entonces hoy un trabajador cuando consigue un trabajo lo cuida más que a su propia vida, cuida más el trabajo que su propia vida. Esa es la definición exacta.
EC - En esta obra en particular, ¿qué denuncias habían hecho los trabajadores sobre esos problemas tan evidentes de falta de medidas de seguridad?
JR - Algunos trabajadores declararon ayer que les habían dicho al capataz y al arquitecto que veían cierto peligro. Se lo habían dicho incluso a vecinos conversando en un tono de vecinos.
EC - ¿Pero habían existido denuncias en el ministerio o en el propio sindicato?
JR - Se ve que en el ministerio no hubo denuncias de esta obra específica porque si no habría actuado. Y si actuó cuál fue el resultado, habrá que preguntarle al ministerio si hay actas de esta obra o no, si se realizó o no.
En cuanto a lo que usted decía, muchas veces los trabajadores quieren cuidarse pero los despiden por pedir normas de seguridad o por llamar al inspector. Ese es el tema, muchas veces cuidan más el trabajo que la vida. Lamentablemente está pasando. Ahora que estamos organizados, que nos podemos organizar o que los compañeros logran quebrar esa resistencia de la empresa a cumplir con las normas, tenemos mejor suerte, se cumplen las normas y los delegados de seguridad son los que las llevan adelante.
Además hay un decreto que dice que toda obra con más de cinco trabajadores tiene que tener obligatoriamente un técnico prevencionista y un delegado de seguridad elegido por los trabajadores. Y en aquella obra donde no es elegido por los trabajadores, el capataz es el responsable en materia de seguridad e higiene y pasa a ser el delegado. En este caso dicen -no lo comprobamos todavía- que había técnico prevencionista, y si no había delegado de seguridad el capataz era el responsable de la seguridad. Fallaron varios controles, si había técnico prevencionista hay doble responsabilidad, el arquitecto no tomó las previsiones del caso y el técnico prevencionista menos.
EC - ¿Cómo viene este año la cifra de accidentes en la construcción?
JR - Es uno de los años con mayor mortalidad, aumentada por la desgracia de la ruta 1, con la pérdida de cinco compañeros en un accidente carretero. Ya llevamos trece compañeros muertos en estos ocho meses y algo.
EC - ¿Hay multas cuando ocurre este tipo de accidentes?
JR - Nosotros venimos reclamando mayor control y que se penalice cuando ocurren estas cosas. Hasta ahora no ha habido penalizaciones, lo único que sabemos es que hay empresas que después de dos años de haber tenido un accidente fatal han pagado 13.000 pesos en el MTSS. Esto lleva a que sea una risa, es irrisorio. Muy sencillo: una empresa para ganar una licitación, sea privada o pública, tiene que invertir en el rubro seguridad. Acá es más fácil: para ganarle al otro no invierto en seguridad y si me pasa algo pago 13.000 pesos.
Esa es la conclusión que sacamos, porque invertir en seguridad capaz que sale unos miles de dólares. Si la multa para la empresa es de 13.000 pesos y se paga dos años después... Hay muchas cosas para cambiar, estamos pidiendo una mesa de diálogo llamada tripartita pero en la que tienen que actuar BPS, Banco de Seguros, Sociedad de Arquitectos, cámaras empresariales, SUNCA, MTSS. Tenemos que sentarnos y empezar a solucionar este tema, porque hasta que no le demos la importancia que tiene vamos a seguir perdiendo vidas de trabajadores. Es un tema esencial para nosotros en este momento.
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Edición: Mauricio Erramuspe