El ministro del Interior en ejercicio, Juan Faroppa, dijo que no ve razones para un llamado de alerta sobre una fuga de Gilberto Vázquez.

Faroppa: Gilberto Vázquez tiene una conducta "correcta"

El ministro del Interior en ejercicio, Juan Faroppa, dijo que Gilberto Vázquez tiene un comportamiento correcto y que no ve razones para un llamado de alerta sobre una fuga. Respecto a la internación de José Gavazzo informó que ordenó que no se lo espose. "Hay que ponderar las medidas de seguridad pero sin atentar contra los derechos que la persona tiene, aunque a muchos no se los respetaron", afirmó.

(Emitido a las 7.35)

JOSÉ IRAZÁBAL:
En las últimas horas el director nacional de Cárceles, inspector Julián Rodríguez, ha manifestado tener temor a una nueva fuga del coronel retirado Gilberto Vázquez.

Eso formaría parte del comportamiento de este militar que ya se fugó en el pasado y fue recapturado. Ahora está aislado dentro de la cárcel especial creada dentro de un predio militar.

El Observador titula hoy sobre esta situación: "La cárcel especial está generando roces entre policías y militares". El control interno está en manos del Ministerio del Interior (MI), pese a que está ubicada dentro de un establecimiento que responde a las Fuerzas Armadas.

¿Cuánto hay de verdad en esto? ¿Cuál es la situación que se está viviendo en torno a este establecimiento carcelario? Se lo vamos a preguntar al doctor Juan Faroppa, subsecretario del MI.

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Faroppa, la primera pregunta está relacionada con este título del diario El Observador, ¿qué hay de cierto en esto? ¿El manejo interno de esta cárcel especial está generando ciertos roces entre policías y militares?

JUAN FAROPPA:
Tomé conocimiento ayer de varias apariciones en la prensa del director nacional de Cárceles. El ministro del Interior, el doctor (José) Díaz, está tomando unos días de licencia ordinaria, yo estoy como ministro interino y me llamó la atención no haber recibido directamente ninguna información por parte del responsable de la Dirección Nacional de Cárceles (DNC) sobre estos temas. Conversé con él por teléfono, en esa conversación matizó muchísimo esas declaraciones en el sentido de que se les habría dado a las mismas un alcance diferente del que él les había querido dar. De todas maneras hoy voy a conversar personalmente con él a los efectos de ponderar con el mayor cuidado cualquier tipo de intervención, ya que estamos en un área muy sensible, el área penitenciaria es compleja, complicada, llena de amenazas permanentes.

Se trata de hacer las cosas que tenemos que hacer tratando de ser cuidadosos con manifestaciones o declaraciones porque a veces esas manifestaciones pueden ser malinterpretadas o uno puede expresarse mal y de ese modo generar una preocupación que no corresponde.

Una pequeña aclaración: el predio donde se encuentra el Centro de Detención Nº 8 es actualmente del MI, fue cedido en comodato por el Ministerio de Defensa (MDN), o sea que formalmente no podemos hablar ya de un predio militar. Se ha instalado en la jerga "la cárcel militar", "la cárcel que está en un predio militar", pero el MDN sólo tiene la responsabilidad de la custodia perimetral.

JI - ¿Usted está diciendo que el director de Cárceles se fue de boca en este tema?

JF - No dije eso, no quise llegar a hacer ese tipo de apreciación. El inspector Rodríguez es un excelente oficial de la Policía, con mucha experiencia, con muchos años de experiencia y de trabajo, y está realizando una muy buena gestión dentro de la DNC. Simplemente, al haber tomado yo conocimiento de la situación me puse en comunicación con él y, por lo que posteriormente pude apreciar, había hecho sus últimas declaraciones, por ejemplo unas que aparecieron en el portal Montevideo.com anoche a última hora, en las que aclaraba sus primeras expresiones.

La responsabilidad es muy grande en estos temas, se sabe que en este caso concreto estamos frente a reclusos respecto de los cuales la opinión pública tiene una mayor atención que con respecto a otros presos por razones de conocimiento público, por lo tanto se trata de hablar un poco menos y de hacer lo que debemos hacer con la reserva que el caso merece.

JI - ¿Cuál es la situación de Gilberto Vázquez dentro de la cárcel específicamente?

JF - Se trata de la información que ha dado el director de Cárceles. Como cualquier recluso en cualquier centro de detención, el responsable del establecimiento analiza la situación en la que se encuentra y dispone si debe estar recluido en un lugar o en otro. Evidentemente, de acuerdo con lo que ha trascendido, la situación no es la misma en el caso de todos los reclusos, de acuerdo con su forma de ser, con su perfil, pero también de acuerdo con lo que me ha trasmitido el inspector Rodríguez, la conducta del recluso Vázquez es correcta y por lo tanto no veo la necesidad de expresar un llamado de atención mayor con respecto a él o a cualquiera de los otros presos que están en el establecimiento Nº 8.

JI - El artículo de El Observador habla de que Vázquez se ha encargado de poner nerviosos a quienes lo custodian diciendo permanentemente que se va a escapar, por ejemplo.

JF - Eso lo dicen todos los presos, ¿qué preso no dice que se va a escapar? Si un cirujano se pone nervioso cuando tiene que operar, que se dedique a otra cosa. Los nervios ahí no corren, esto debe ser manejado con profesionalismo.

JI - Usted dice que el comportamiento de Vázquez es correcto dentro del establecimiento.

JF - Es lo que me informa el director de Cárceles.

JI - Hay versiones de que la celda de Vázquez tiene la luz encendida las 24 horas y que hay una cámara particular dentro que sigue sus movimientos. Esto no es habitual.

JF - El establecimiento Nº 8 tiene un sistema de televigilancia permanente para todos los reclusos, no exclusivamente para el recluso Vázquez.

JI - La versión dice que en ese caso en particular hay una cámara dentro de la celda y en los otros casos no.

JF - No, no voy a entrar en detalle sobre las medidas de seguridad que tiene la cárcel, no corresponde, pero es un sistema de vigilancia muy moderno que, en la medida que el MI vaya teniendo los recursos que necesita para el sistema penitenciario, esperamos poder reproducir en otros establecimientos del país. No es por hacerme el misterioso pero, por razones que usted muy bien comprenderá, no corresponde hacer públicas las medidas de seguridad de las cárceles, como tampoco los detalles de algunos operativos policiales. No le voy a decir a una banda que roba bancos la mejor forma de robar bancos detallándole de qué forma realizamos la vigilancia, eso es bastante claro.

Repito, nos vamos a reunir en la tarde de hoy con el inspector Rodríguez, estamos trabajando con él para darle todo el apoyo que solicite del ministerio en cuanto a equipamiento para su personal, le proporcionamos armamento no letal, que es fundamental para la custodia carcelaria –escopetas con perdigones de goma, que deben ser utilizadas con el mayor cuidado y la mayor mesura–, revisando sus necesidades personal y de otro equipamiento. Esa es la responsabilidad que le corresponde el ministerio, estoy trabajando de acuerdo con las instrucciones que me dejó el doctor Díaz.

JI - En el artículo de El Observador también se hace referencia a José Nino Gavazzo, otro de los militares procesados por la desaparición de Adalberto Soba en 1976, que fue trasladado al Hospital Militar. Se dan detalles de las condiciones que el MI o la DNC dispuso para la guardia, se dice que hay dos policías fuera de la habitación y dos policías dentro de la habitación, que incluso utilizan el baño de Gavazzo, lo que habría generado malestar en los familiares del paciente, que le habrían planteado al director de Cárceles estas condiciones de internación; se dice también que Gavazzo estaría esposado a la cama.

JF - Este es otro tema sobre el cual pensaba que no se iba a dar detalles, pero ya que se hizo público, aclaro la situación. Cuando el recluso Gavazzo fue trasladado al Hospital Militar por un problema de salud, recibí una llamada por parte del MDN respecto de que el traslado se habría hecho con esposas y grilletes. De acuerdo con lo que establece la Ley de Procedimientos Policiales que tiene media sanción en el Senado que, entre otros temas, establece la forma en que debe realizarse la custodia de una persona que es llevada a un centro de salud, evidentemente deben tomarse las medidas de seguridad correspondientes. En la medida que es lo que corresponde de acuerdo con los principios no sólo de ética médica sino también para el trabajo que un profesional debe realizar con un paciente, y que el médico establece razonablemente que no puede llevarse a su presencia una persona esposada y engrillada, ordené que se le retiraran las esposas y los grilletes.

El principio de humanidad y de buen trato debe ser una constante en esta gestión, y tratándose de los hechos de los que estamos hablando es también una forma de educar y de demostrar cómo debe tratarse a una persona que está privada de libertad.

En ese sentido consulté al director de Cárceles, quien me dijo que el juez actuante había ordenado severas medidas de seguridad, consulté si había ordenado directamente que se utilizaran esposas y grilletes, y como el director de Cárceles me dijo que ese no era el contenido de la orden, dispuse que se le quitaran las esposas.

La información que tengo es que en este momento no tiene ningún tipo de medida de seguridad física, que no está esposado ni engrillado; sería una barbaridad, una salvajada tener a una persona privada de libertad en esas condiciones. No obstante ello, y también de acuerdo con lo que establece el procedimiento, le solicité al inspector Rodríguez que tomara las medidas para que existiera una custodia con contacto visual permanente de la guardia con la persona detenida.

Si hay alguna molestia por parte de los familiares, tienen que tener en cuenta que se trata de una persona privada de libertad que está siendo sometida a la Justicia y que la responsabilidad de su seguridad en este momento es del MI. No se trata de una persona que va normalmente a un centro de salud y se puede mover como quiere. Tenemos que ponderar las medidas de seguridad en forma estricta pero sin caer en ninguna forma que atente contra los derechos que la persona tiene, que todos tenemos y tuvimos en el pasado, aunque a muchos no se los respetaron.

JI - ¿Esto quiere decir que hay vigilancia las 24 horas dentro de la propia habitación de Gavazzo?

JF - No le puedo asegurar que las 24 horas esté ahí, ya que, por ejemplo, si hay que hacer alguna determinada operación de rayos X, una tomografía, obviamente el funcionario policial no va a estar ahí, pero va a tomar todas las medidas para evitar cualquier tipo de situación que pueda llevar a disminuir la seguridad respecto de la persona detenida. Las medidas de seguridad están ordenadas y se deben cumplir de acuerdo con los procedimientos correspondientes.

JI - Se dice en el artículo que el director de Cárceles le pidió a Miguel Dalmao, que es el director de Sanidad de las Fuerzas Armadas, que se hiciera responsable de la seguridad de Gavazzo. "Luego de una serie de rechazos y negociaciones, el coronel José Aranco, director del Hospital Militar, subalterno de Dalmao, aceptó firmar un acta responsabilizándose por la seguridad del detenido", después de sacarle las esposas, como usted había ordenado, dice la nota.

JF - No sé lo que habló el director de Cárceles en todos estos días, pero la normativa establece –estoy hablando de una normativa proyectada pero que se basa en los procedimientos adecuados– que cuando el preso no esté en contacto visual permanente con su custodia, por ejemplo por la realización de un acto médico que implique su traslado a determinado tipo de situación, el personal policial de custodia debe coordinar con el personal médico, con el responsable del centro asistencial la responsabilidad por la seguridad. Si el personal policial y el director del centro de salud, en este caso Hospital Militar pero puede ser cualquier otro centro de salud, no se ponen de acuerdo, el personal policial tiene orden de dar cuenta de inmediato al juez de la causa para que resuelva la medida. Ese es el procedimiento, que se hace normalmente sin que estemos permanentemente informando los pasos que damos.

En este caso el nivel de relato ha sido más florido, más extenso, pero quiero dejarle el mensaje a la audiencia de que están tomadas todas las medidas, que estamos ante una situación de rutina, normal en los procedimientos que debe realizar la DNC en este tipo de situaciones. De la misma manera que el MI a través de todas sus unidades todos los días, permanentemente, minuto tras minutos, realiza operativos, hace cosas, y no las informa permanentemente, lo que tampoco corresponde.

JI - ¿Qué informe tiene el MI sobre la salud de Gavazzo?

JF - Es otro tema sumamente delicado, no podemos informar permanente sobre el estado de salud de un recluso. Quienes están a cargo de este tema son los profesionales que lo están atendiendo, no es pertinente que el MI diga que un recluso tiene tal o cual dolencia, eso les corresponde a los médicos tratantes, que serán quienes darán las informaciones.

JI - Le preguntaba para saber si Gavazzo va a tener una larga estadía en el Hospital Militar o va a volver a la cárcel, ¿tiene algún dato en ese sentido?

JF - Yo soy abogado, no le puedo decir a qué tipo de tratamiento está siendo sometido este recluso, qué tipo de dolencia tiene. Además por un tema de dignidad personal no corresponde que todos estemos hablando de las enfermedades que tiene un recluso.

JI - De repente los médicos ya habían informado al MI que se va a hacer un tratamiento largo...

JF - No, no lo sabemos, pero perfectamente la propia dirección del hospital o los médicos tratantes pueden dar esa información en la medida que les parezca que se puede hacer pública. En ese sentido tenemos que manejar algunas limitaciones en un tema que está muy vinculado con la persona de cada uno, los problemas de salud. Entiendo perfectamente que hay una mayor sensibilidad en la opinión pública frente a estas situaciones pero nuestra responsabilidad es manejarnos con mesura, con calma, con tranquilidad.

JI - Cambiando de tema, nos sorprendió a todos la noticia de que la Policía de Maldonado ha librado una orden de captura de dos peligrosos delincuentes que fueron abordados por un control rutinario de prevención en la Barra cuando se desplazaban en un auto junto con un alto oficial de la Dirección Nacional de Prevención del Delito. ¿Qué lectura hacen de esto? ¿Qué está haciendo el ministerio con respecto a esta situación tan delicada?

JF - Ni bien la Jefatura de Maldonado nos informó sobre la situación se iniciaron los trámites administrativos correspondientes. El procedimiento administrativo se inicia de inmediato y de acuerdo con los resultados del mismo se evalúa la eventual responsabilidad en la que puede haber incurrido el funcionario. De acuerdo con lo que se constate a través de la investigación administrativa, se puede disponer el sumario correspondiente y a partir del debido proceso administrativo se determinarán responsabilidades y en su caso se aplicarán las sanciones que correspondan. Por ahora es lo que le puedo decir en la medida que se están siguiendo los procedimientos normales en estos casos.

JI - ¿En este caso se separa del cargo a este oficial que fue encontrado con los delincuentes?

JF - Eso surgirá de la iniciación de la investigación administrativa, si se determina que es con separación del cargo, se hará así. Las sanciones abarcan una escala muy amplia, pueden ir desde una simple observación verbal hasta el cese, de acuerdo con lo que se determine.

JI - Por lo que se sabe es bastante irregular la situación, más allá de que él habría argumentado que estos delincuentes estarían aportando datos, que estaba haciendo una especie de recorrida para obtener datos. En primera instancia esto parece no estar muy claro.

JF - Quiero ser muy respetuoso de los procedimientos administrativos, una vez que podamos determinar claramente la responsabilidad podremos ver cuál es el nivel de irregularidad. No es un hecho que deje de llamar la atención pero, como en todos los casos en que hay una situación de este tipo, corren los procedimientos administrativos que son una garantía para el funcionario involucrado. De todos modos, como siempre hemos dicho, en caso de constatar una irregularidad, de la misma manera que felicitamos, reconocemos y promovemos a los buenos funcionarios del ministerio, aquellos que se apartan de las normas de comportamiento ético policial son objeto de las más duras sanciones por parte de esta administración, como corresponde.

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Edición: Mauricio Erramuspe