La comida chatarra en los carritos de Montevideo
Actualmente funcionan en Montevideo 300 carritos de comida rápida donde las personas pueden encontrar una solución económica a la hora de comer. Quizá no sea el almuerzo ideal, ni con los nutrientes necesarios, pero se ha convertido en el alimento preferido de las víctimas del multiempleo. Quienes compran en estos carritos, estratégicamente ubicados en la vía pública, muchas veces prefieren el precio y la rapidez de producción, antes que la higiene del lugar o el contenido nutricional del producto. Informe de Federico Dalmaud
El número total de carritos habilitados por la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) asciende a 300. Cifra que aumentó al doble en los últimos meses, dado que los registros del Departamento de Gestión Comercial de la comuna marcaban en setiembre que funcionaban 150 funcionaban en la capital.
Muchos de estos carritos están ubicados en lugares céntricos o cerca de grande fabricas o comercios, logrando de esta forma captar una clientela que suele ser siempre la misma: trabajadores.
Y no sólo de la gente que trabaja en la zona viven estos comercios. Es bastante común ver como los mismos son localizados en diferentes puntos estratégicos, dependiendo de la actividad cultural de turno: recitales, playas, bailes, partidos de fútbol, entre otras actividades.
Lo que buscan los consumidores es el precio más bajo y el mejor sabor en el menor tiempo. Esa parece ser la consigna.
Si uno se pone a comparar precios -actividad bastante común del uruguayo promedio-, suena lógico que muchas personas prefieran degustar un choripan por 25 o 30 pesos y una bebida cuyo precio oscila en los 15 pesos. Conformando un almuerzo abundante en calorías y grasas por 45 pesos aproximadamente.
Es que a mayor cantidad de grasa y gustos raros, la hamburguesa se torna más apetecible y es inevitable verse tentado por el aroma que emanan los carritos de nuestra capital.
Entre tanto gusto, variedad, y precios bajos ¿Qué pasa con la higiene de estos carros? Los carritos son sometidos a estrictos controles de calidad según la IMM, que es quien se encarga de la inspección a través de su Laboratorio de Bromatología.
Según el reglamento, no pueden vender otra cosa que no sea chorizos, hamburguesas, panchos, refrescos que no superen los 500 centímetros cúbicos, chocolates embazados y alfajores. No está permitida la preparación de las comidas con lechuga, tomate, huevos fritos y papas fritas.
"(Inspeccionamos) las condiciones en las que está el carro, de higiene. Que tengan agua potable, tanto para la limpieza de los utensillos como de las manos de la persona que está despachando. La mesada, la refrigeración para los alimentos... Algunos de esos carros están conectados directamente a la red pluvial. Todas las personas que trabajan en los carros recibieron un curso y tienen un carné de salud que los habilita, así como no manejan al mismo tiempo el dinero y la mercadería...", indicó la directora interina de la División Salud de la IMM, Inés Bauzero.
"(Las inspecciones) las hacen inspectores. Y hay dos tipos, los de la parte bromatológica y los de inspección general que establecen si el carro está en el lugar y las condiciones indicadas, por ejemplo. Por supuesto que no están planificadas, porque en tal caso el carro o la persona estarían preparadas para la inspección. Son inspecciones sorpresivas", dijo Bauzero.
En el Centro, Cordón y Ciudad Vieja está la mayor cantidad de carritos de Montevideo. Allí, por disposición de la IMM, deben de estar posicionados a 10 metros de las esquinas o de cualquier cartel de señalización de tránsito, además de cumplir con la norma que indica que, los mismos deben de estar a una distancia de 70 metros de cualquier bar o local de comidas.
Estos carritos, suelen tener su pico más activo sobre las 11:00 de la mañana y se extienden hasta las 16:00 horas, a un ritmo increíble.
Uno se puede encontrar con sus funcionarios, que cubren turnos de ocho horas diarias, o más, cumpliendo una doble función, al mejor estilo de "Beto Carreteiro". Esto quiere decir que son encargados de cocinar los alimentos y cobrarlos. Pero eso no está permitido, la razón es obvia, se trata de la higiene de los alimentos.
"No se puede hacer eso, así que si es así que están trabajando los van a multar. No están habilitados para trabajar en esas condiciones", dijo Bauzero
Cabe aclarar o pedirle a la gente que cuando se enfrente a una situación como ésta, puedan denunciarla al Departamento de Bromatología de la IMM llamando al 1950.
Aumentaron considerablemente la cantidad de gente que almuerza o cena en este tipo de lugares. Pero es oportuno preguntarse: ¿cuánto aportan nutricionalmente estos alimentos?, ¿se les puede llamar almuerzo o cena? En realidad el nombre lo dice todo, se trata de "comida chatarra" o "rápida". Es mínimo el aporte nutricional que puede llegar a tener un chorizo con pickles o una hamburguesa hiper grande con 23 gustos distintos.
"Uno se encuentra con comidas que son comidas rápidas... Que son todos alimentos de alto contenido graso, en sodio y de repente uno consume un montón de calorías en una sola comida. De repente lo que equivale a la mitad de las calorías que necesita en un día. Además, siempre lo acompaña con un refresco u otro tipo de bebidas. No quiere decir que uno no pueda comer este tipo de alimentos, pero muy de vez en cuando", indicó la licenciada en Nutrición, María Lucía Pérez Castells, que hace poco escribió un libro llamado "Así me gusta a mí" orientado a la cocina para niños y como crecer comiendo sanamente.
Hay gente que utiliza estos lugares como fuente diaria de alimentación cuando se encuentra en su horario de trabajo. Sobre las consecuencias que puede llegar a tener el hecho de almorzar diariamente en estos lugares Pérez Castells indicó: "De cada dos uruguayos uno tiene sobrepeso u obesidad. Y uno de cada cuatro niños uruguayos tiene sobrepeso u obesidad. Las comidas de alta densidad calórica son factores de riesgo de padecer obesidad. Entonces, la obesidad es lo primero, después todo lo que trae aparejado: hipertensión arterial, diabetes... todos los días comer comidas rápidas no es adecuado".
Para darse cuenta de que un local de comida rápida está perfectamente habilitado Bauzero, explico: "tiene que haber un autoadhesivo que dice la habilitación de la IMM".
Respecto a si la IMM da el visto bueno para consumir en estos carritos Bauzero dijo: "perfectamente ha disfrutar de esto tan tradicional y tan rico. Que es para nosotros el poder comer un choripan, como dicen, ¿verdad?".
En cuanto a cómo trabajan los carritos en Montevideo, los carros están ubicados de forma estratégica para poder captar un público variado que va entre trabajadores, estudiantes y clientes ocasionales.
Elvira, una de las funcionarias del carro que se desempeña como cajera hace tres años, se refirió a cuál es el momento del día en que se vende más: "No es todos los días lo mismo. Depende de los pagos que haya en los bancos, aguinaldos, se mueve bastante con las oficinas. Pero también tenemos clientes fijos".
Respecto a qué producto tiene más salida Elvira contó: "Las hamburguesas y chorizos. Y el pancho también, según el pago que haya".
Para poder tener un carrito hay que dirigirse al Departamento de Gestión Comercial de la IMM con la propuesta de ubicación y los planos correspondientes del carro. Luego este es estudiado por el Centro Comunal correspondiente, posteriormente se envía a la Inspección General de la comuna, luego a la división Transito y Transporte y Promoción Económica.
El propietario deberá pagar el tributo mensual, anual y un depósito en garantía. La contribución mensual varía según la zona y el tamaño del vehículo entre los 365 y 2.192 pesos. El año ronda en los 1.169 pesos, unas cuatro Unidades Reajustables (UR) y los 5847 pesos, unas 20 UR.
Esta es una de las formas de sumarse a la gran familia de los carros de comida rápida existentes en Montevideo. Aunque no crean que es un proceso rápido.
Sólo en la capital existen 300 de estos comercios ambulantes, cifra que aumentó considerablemente en los últimos dos meses. Para Montevideo no es un número menor, ya que en cada una de las esquinas del centro funciona al menos un carrito de comida rápida.
Según la IMM, a través de su departamento de Salud, si usted ve el adhesivo de la comuna certificando el local, recuerde: "puede hincarle el diente con confianza". Y si le quedan dudas de la procedencia de lo que va a consumir, no dude en consultar inmediatamente al Departamento de Bromatología de la Intendencia, a través del 19501601.