Un gol de Siphiwe Tshabalala en el minuto 55 puso a gritar de alegría los casi 90.000 fanáticos que abarrotaron el estadio Soccer City, pero en el 79 el jugador del Barcelona de España, Rafael Márquez, acalló las ruidosas vuvuzelas con el empate, que le da un punto al equipo de Parreira.

"Creo que el empate fue justo, y seguimos en la competición", dijo Parreira. "No puedo pedirle más a mis chicos. Me siento orgulloso de ellos. Estoy satisfecho porque mantienen la moral muy alta".

Para el correcaminos brasileño, que con éste participa en su sexto Mundial, "pase lo que pase contra Uruguay, ahora este grupo se va a definir en el partido contra Francia".

Sudáfrica juega contra la 'Celeste' el 16 de este mes en Pretoria, y cierra con Francia cinco días más tarde en Bloemfontein.

Según Parreira, los Bafana Bafana hicieron el juego acorde al esquema que él les trazó de antemano.

"No me han defraudado para nada. México tuvo la posesión del balón pero no pudo penetrar porque le paramos", manifestó. "Hay que darle crédito a mis jugadores, que al principio les costó un poco ajustarse, pero estoy seguro que en el próximo encuentro estarán más sueltos".

Parreira tuvo palabras de elogio para el desempeó de su creativo Steven Pienaar, jugador del Everton de la Liga Premier Inglesa, una de las figuras destacadas del partido.

"Pienaar es el jugador con más experiencia en este equipo y eso nos ayudó mucho. Estuvo sufriendo dolores musculares, viene de jugar 45 partidos esta temporada, pero igual se entregó y ayudó al equipo", manifestó Parreira.

Para el preparador de los Bafana Bafana lo principal es que sus muchachos "ya rompieron el hielo de un partido inaugural".

"He estado en otros partidos inaugurales de un Mundial y es presionante. Había 90.000 espectadores que no podíamos defraudar", añadió. "El resultado no es el que hubiéramos querido, pero el empate nos deja vivos".

Fuente: AFP
Foto: SAFA