No quiere comparaciones de su equipo con el de 1950
Una eventual comparación del actual equipo uruguayo que compite en el Mundial de Sudáfrica-2010 con el que en 1950 protagonizó el 'Maracanazo' al ceñirse el cetro en el torneo organizado por Brasil, sería una "irreverencia", según Oscar Tabárez.
A pesar de que el timonel de la Celeste tiene la mejor de las impresiones de su equipo, al que elogió largamente en una rueda de prensa este viernes, estimó que "sería una irreverencia comparar" ambas selecciones.
El 'Maracanazo' es como se conoce a la mayor epopeya del fútbol charrúa, cuando en el último partido de la Copa Mundial de Fútbol de 1950, organizada en Brasil, Uruguay ganó al anfitrión 2-1 en el famoso estadio de Rio de Janeiro.
"Es muy dificil comparar generaciones teniendo en cuenta que el mundo de ahora es diferente al del 50 y hablar del 50 para los uruguayos y para mí es hablar de algo que tenemos allí arriba, sería una irreverencia comparar" ambos procesos, dijo Tabárez ante una pregunta de un periodista brasileño.
Tabárez insistió que no hay comparación posible y que por ello "me quedo con la idolatría que tenemos por todos esos campeones".
"Yo tenía 3 años de edad cuando salimos campeones (del mundo) del 50, toda mi niñez la pasé oyendo hablar de estos grandes campeones y uno de ellos está con nosotros ahora, Alcides Ghiggia", que anotó el gol de triunfo, a base de lo que se denominó luego la "garra charrúa".
Ghiggia, que vino a Sudáfrica invitado por la FIFA, le dijo hace poco a la AFP que "sufre" todo el asunto del término acuñado en alusión a esa epopeya.
"Se habla de la 'garra charrúa', pero yo no sé lo que es la 'garra charrúa', será el fervor, el no querer perder, el meter para adelante, puede ser que sea eso, o el talento". "Le pusieron la 'garra charrúa y ahí quedó", dijo.
Tabárez confesó que "no se qué pasaría si lográsemos lo que ellos lograron", por el momento, cuando aún se juegan octavos de final, "todavía nos parece inalcanzable".
"Entonces creo que no se puede comparar. Nosotros estamos tratando de adaptarnos a competir con ciertas posibilidades con el fútbol de estos tiempos", aclaró.
Sin embargo, "por suerte el fútbol es un deporte colectivo que le da más oportunidad al débil frente al fuerte".
De cara a un partido crucial frente a Corea del Sur, "vamos a tratar de seguir adelante, pero tratando de respondernos a nosotros mismos".
Por lo pronto "a la historia hay que dejarla quieta", señaló.
Foto: Marcelo Singer