La Celeste en Sudáfrica 2010

Garra Charrúa 2.0

Garra Charrúa 2.0

Uruguay perdió 3-2 ante Holanda y se despidió del sueño finalista. La Celeste luchó con dignidad hasta el último momento, pero los europeos fueron superiores.


Con el correr de los primeros minutos quedó claro que Holanda no se parecía en nada a los otros cinco rivales que Uruguay había enfrentado en Sudáfrica. A un estado atlético óptimo, suman técnica en velocidad, constante rotación del juego usando el ancho del campo y progresión permanente por las bandas.

Pero Uruguay pareció adivinar estas virtudes y no esperó a un sofocón para ajustarse a las virtudes del rival. Apenas un cabezazo forzado de Van Persie había creado riesgo sobre los 10 minutos. Pero lo que nunca figura en un libreto, ni en una programación previa, fue el espectacular zurdazo con que Van Bronckhorst dirigió la "Jabulani" al ángulo superior izquierdo de Muslera, a los 17 minutos.

Ahí Uruguay se vio obligado a cambiar el guión y buscar el empate. Contó con la complacencia de un equipo que no dispone de un esquema particular cuando le toca defender, así es que por izquierda con Cavani y "Palito" Pereira, o por derecha con Maxi Pereira encontró varias opciones de progresión.

Lo que sí supo hacer Holanda es imponer el juego físico de su última línea que, lejos de ser prolija, casi siempre llegó a cortar el último pase, o usualmente ganó en el mano a mano. La virtud de Uruguay en aquellos minutos fue arriesgar sin desarmarse atrás, para no facilitar el contragolpe de los rápidos holandeses. Sobre todo Robben por derecha, que se mostró muy en partido desde el inicio.

Otra vez Diego

Sobre los 40 minutos, recibió Forlán sobre 3/4 de campo sin marca, cambió la pelota de pie derecho a izquierdo para despejar el espacio tiro y sacó un zapatzo combado, que con ayuda de un vuelo venenoso se volvió incontenible para el arquero tulipán.

Así se fueron al descanso, y para el complemento, Uruguay apareció nuevamente bien parado y concentrado. Si es que Holanda controló la pelota, lo hizo sin trepar a fondo por las bandas, que es por donde crea peligro real. Al influjo de un mediocampo batallador, la Celeste supo llevar riesgo al área holandesa, en particular cuando Cavani fue a buscar un mal pase atrás de la zaga naranja y su esfuerzo casi vale un gol de Palito Pereira.

Recién sobre los 22 minutos Holanda llegó con peligro en ese segundo tiempo, cuando Robben apareció sin marca por derecha, al recibir la pelota merced a un despeje que Muslera dejó servido.

Su mala definción sirvió como llamado de atención, porque sólo dos minutos después, desde una posición similar a donde se había generado la jugada anterior, Sneijder disparó cruzado y el rebote en Pereira favoreció su intento, porque la trayectoria de la pelota fue incontenible para Muslera (aunque Van Persie, en offside, intercedió en la jugada). 

No terminó de celebrar Holanda el segundo gol, que pronto se encontró con el tercero, gracias a una jugada rápida que avanzó de derecha a izquierda, con Kuyt que controló y mandó centro medido a la cabeza de Robben, que esterilizó con preciso testazo cualquier intento de Muslera.

La hazaña que casi fue

Con sólo 11 minutos por jugar, el sueño finalista de Uruguay pareció desvanecerse. Pero la tosudez del equipo se tradujo en más ganas y rebeldía para, al menos, acortar un tanteador injusto a la vista de lo sucedido. El riesgo asumido por el equipo pudo verse concretado en propia puerta, porque Holanda consiguió hilvanar peligrosos contragolpes que pudieron elevar aún más la cuenta a su favor.

Con Abreu y Fernández en cancha, Uruguay ya estaba completamente lanzado sobre campo naranja, cuando en el minuto 91, un inteligente cobro de falta que hizo Gargano (que se presumía como "centro a la olla") perimitió a Maxi Pereira llegar al borde del área con campo y pelota, y resolvió de gran manera con zurdazo esquinado, inatajable para Stekelenburg. 3-2 y faltaba poco.

Los tres minutos de prórroga vieron a Uruguay apostando todo a un cabezazo o un rebote salvador, con Holanda recluida por completo dentro del área. Pudo ser en una pelota que quedó a Fernández, pero la inmensidad de piernas naranjas no dejaba pensar en ninguna decisión acertada.

A Port Elizabeth

Uruguay vendió carísima una derrota que Holanda supo festejar con gran desahogo, merced a la angustia que padeció durante esos últimos minutos de incertidumbre.

Para el último juego, por el tercer puesto, los dirigidos por Tabárez esperan rival del perdedor que surja del duelo España-Alemania, con el objetivo de mejorar la cuarta posoción de 1970 y anotar así una nueva marca, en un mundial que ya es histórico para la Celeste.


DETALLES DEL PARTIDO

Mundial de fútbol Sudáfrica-2010 - Semifinal
Estadio: Green Point (Ciudad del Cabo)
Espectadores: 62.479
Árbitro: R. Irmatov (UZB)

Holanda 3 - 2 Uruguay (1-1 al finalizar PT)
Goles: '18 Van Bronckhorst (H); '41 Forlán (U); '69 Sneijder (H), '72 Robben (H); '91 Maxi Pereira (U).

Alineaciones:

Uruguay: Fernando Muslera - Maxi Pereira, Mauricio Victorino, Diego Godín, José Martín Cáceres - Diego Pérez, Walter Gargano, Egidio Arévalo Ríos, Álvaro Pereira (Sebastián Abreu 78) - Diego Forlán (cap) (Sebastián Fernández 84), Edinson Cavani. DT: Oscar Washington Tabarez.

Holanda: Maarten Stekelenburg - Khalid Boulahrouz, John Heitinga, Joris Mathijsen, Giovanni van Bronckhorst (cap) - Mark van Bommel, Demy de Zeeuw (Rafael van der Vaart 46) - Arjen Robben (Eljero Elia 90), Wesley Sneijder, Dirk Kuyt - Robin van Persie. DT: Bert van Marwijk.


Foto: EFE