Se esfumaron esperanzas latinoamericanas en el Mundial
Con la derrota el martes de Uruguay por Holanda se esfumaron las esperanzas latinoamericanas en una Copa del Mundo en la que la región había logrado la hazaña de colocar seis equipos en octavos de final.
Los jugadores de Oscar Tábarez lucharon hasta el último suspiro para empatar el partido y lograr un milagro similar al de cuartos contra Ghana, cuando Luis Suárez impidió en el último minuto de la prórroga un gol adverso con la mano de Dios y Asamoah Gyan erró el penal, dando la posibilidad a los charrúas de volver del infierno e imponerse en la posterior tanda de penaltis.
Con la derrota de la 'Celeste', que no había llegado a semifinales de una Copa del Mundo desde México-1970, se esfumaron las últimas opciones para Latinoamérica de conquistar un torneo que no podía haber empezado mejor para las selecciones de la región.
De los siete equipos que se clasificaron para el primer Mundial organizado en África, Honduras fue el único que no superó la fase de grupos, al lograr un solo punto en una llave en la que se clasificaron Chile y España.
Los otros seis -Argentina, Brasil, Chile, México Paraguay y Uruguay- lograron el pase a octavos.
Los mexicanos y los uruguayos dejaron en el camino a Francia, subcampeona de Alemania-2006, mientras Paraguay lideró un grupo en el que quedó fuera Italia, campeona del último Mundial.
"Las selecciones latinoamericanas han llegado muy bien. El fútbol latinoamericano ha mostrado cierta superioridad sobre el resto de los otros continentes", declaró el técnico argentino de Paraguay Gerardo Martino, tras sellar el pase de su equipo a octavos con un empate 0-0 con Nueva Zelanda.
"Lo cual hace vislumbrar que, independientemente de las eliminaciones que se vayan sucediendo a partir de octavos, al final del recorrido hay muchas chances de que sea un latinoamericano o tal vez dos los que disputen la final del campeonato", auguró, sin acierto finalmente.
El seleccionador argentino Diego Maradona también aseguraba por entonces que los equipos latinoamericanos habían llegado al Mundial mejor preparados que los europeos, por la mayor competitividad de la fase de clasificación.
"La explicación que se puede dar de por qué están bien los sudamericanos (...) es que la clasificación es mucho más competitiva que en Europa. Ecuador podría estar sin ninguna duda. En cambio en Europa... juegan contra Islas Feroe...", dijo con ironía en rueda de prensa en Pretoria.
En octavos, empezaron a caer los primeros equipos, pero por cruces con los favoritos de la región: México cayó 3-1 contra Argentina y Chile contra Brasil con el mismo resultado.
En los otros partidos, Uruguay se deshizo 2-1 de Corea del Sur y Paraguay de Japón en los penaltis.
De modo que cuatro de los ocho equipos que llegaron a cuartos de final eran sudamericanos y representaban a los cuatro miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), alimentando la posibilidad de que un equipo de la región se hiciera con la Copa.
Pero los cuartos de final fueron desastrosos. Mientras Uruguay lograba el pase a semifinales frente al último equipo africano en liza, los otros tres cayeron en sus respectivos compromisos contra equipos europeos.
Brasil se llevó un disgusto frente a Holanda (1-2), Argentina fue goleada 4-0 por Alemania y Paraguay perdió por la mínima contra España (1-0).
Tras la eliminación en semifinales de Uruguay, ya está garantizado que una selección europea gane por primera vez una Copa del Mundo fuera del Viejo Continente y que Europa supere en títulos a Sudamérica (10 a 9).
Pero dentro de cuatro años, los equipos latinoamericanos tendrán una nueva oportunidad para lucirse: la Copa del Mundo se celebrará en Brasil.
Foto: Efe