(emitido a las 8.54 Hs.)

EMILIANO COTELO:
A esta hora, el charter de la selección uruguaya de fútbol, con sus pasajeros ya a bordo, todavía está esperando para levantar vuelo en el aeropuerto de Johannesburgo. Si todo anda bien, si no lo obligaron a apagar el celular, del otro lado de la línea está nada menos que Diego Forlán. En primer lugar, ¡felicitaciones, Diego! ¿Cómo pasaron la noche, cómo la pasaste tú en especial, después de recibir la noticia de que eras el Balón de Oro resuelto por la FIFA nada menos?


DIEGO FORLÁN:
Vinieron todos a la habitación a felicitarme y ahí arrancó el descontrol. Porque la verdad es que no íbamos a festejar nada, había terminado el mundial y cada uno iba a descansar para viajar, pero eso dio para un festejo más, un brindis más. Estuvimos hasta casi las 6 de la mañana –aprovechamos para no dormir y poder dormir en el vuelo– cantando, contando cosas y disfrutando de un momento todos juntos.

EC - ¿Llegaste a dormir algo entonces?

DF – Una hora, casi nada. Aparte imaginate lo que fueron los festejos en la habitación, no había casi cama, no tenía lugar ni para dormir...

JUAN ANDRÉS ELHORDOY:
...¿El descontrol incluyó tirada a la piscina?

DF – Sí, estaba helada la piscina, pero bueno, es normal, por lo menos me sacaron los celulares y todas las cosas que se pueden perder con el agua y lo único que sufrí fue el frío. Pero valió la pena y fue un momento lindo por la manera en que vinieron todos a la habitación a festejar. Se les veía en la cara la felicidad que tenían, me puso muy feliz y me emocionó porque es un trabajo de todos juntos.

EC – Sí, vi las declaraciones que hiciste a la página de la FIFA a propósito del premio y allí destacan el hecho de que tú inmediatamente pasas a hablar del equipo: "Lo disfruto y estoy feliz de la vida pero tengo en claro que es fruto del campeonato espectacular que hizo el equipo, es un premio más para el buen momento del fútbol uruguayo. También quiero destacar a los que jugaron poco o no jugaron, porque son los que conforman la base del grupo. Esto también es de ellos". Es muy resaltable esta insistencia tuya en hablar del equipo, del grupo.

DF – Es la verdad, con el tiempo que llevo jugando nunca he tenido un grupo humano tan bueno como este, es espectacular. Y todos forman parte. Porque obviamente hay algunos que hemos tenido la posibilidad de jugar la mayor cantidad de partidos, más minutos, pero los que no la han tenido y los que han jugado poco y en momentos en que se ha necesitado su actuación lo han hecho muy bien. Y no es fácil teniendo partidos tan importantes y no estando al ritmo de juego; han actuado de muy buena manera y al nivel que se esperaba. También la gente que casi ni ha jugado y que siempre tuvo una sonrisa, que dio apoyo, todo eso se disfrutaba. La verdad que fue espectacular todo.

EC – ¿Y ahora para ti qué viene?

DF – Vacaciones, llegar a Uruguay y disfrutar todo esto con la gente. Porque ya fueron 68 partidos que jugué esta temporada, fue una temporada bastante exigente en general pero terminarla de esta manera fue espectacular. Poder llegar, disfrutar un poco con los amigos, la familia, un poco de vacaciones y después retomar porque esto sigue y hay que seguir adelante.

EC – ¿Cuántos días vas a poder tomarte?

DF – Hasta el 9 de agosto tengo vacaciones, así que estoy contento porque tengo unas buenas vacaciones después de tanto tiempo.

EC – ¿Y esa lesión con la que anduviste cargando en los últimos partidos cómo quedó?

DF – No, era más cansancio, no fue una lesión en particular sino cansancio de tantos partidos, de patear. Era eso, la fatiga, y la verdad que pude llegar bien al último partido. Ahora a descansar.

EC – ¿Cómo te tiene esto de la demora en la salida del avión?

DF – Estamos todos con ganas de irnos, ya tendríamos que estar en vuelo. Queremos llegar, aparte sabemos de las expectativas de la gente, la ilusión de estar esperándonos, en el frío, y ya vemos que vamos a llegar tarde. Esperamos poder salir y disfrutar todos, no sé cómo se dará todo, se retrasó pero ya es lo último. Hemos pasado tantas cosas que ya no vale la pena ponerse de malhumor ni fastidiarse sino disfrutar de este momento, está la familia también con nosotros, y esperar a que de una vez por todas salga el avión.


***

Foto: Marcelo Singer