Jammie Thomas-Rasset, de Minesota, Estados Unidos (EEUU), deberá pagar 80.000 dólares por cada una de las canciones descargadas, asegura el diario local Star Tribune. El jurado de Mineápolis resolvió  que la mujer de 32 años cometió una "violación voluntaria" de los copyrights de las canciones.

La acusada  fue condenada a pagar casi dos millones de dólares a varias compañías discográficas por la obtención ilegal de 24 canciones, entre otros títulos,  de No Doubt, Linkin Park, Gloria Estefan y Sheryl Crow, según el sitio español elmundo.es.

Ell abogado de la imputada, quien apelará el fallo, dijo que la compra legal de cada canción sólo habría costado 99 centavos por unidad.

De las 30.000 denuncias presentadas por la Asociación de la Industria de Grabación de Estados Unidos contra personas acusadas de descargar archivos, la de Thomas-Rasset es la única que se ha llevado a juicio.