Hackearon su negocio en Google Maps y lo perdió todo
Los residentes del norte de Virginia, Estados Unidos, que anhelaban comer carne de león, el plato "sofisticado" de la zona, perdieron esa posibilidad: el restaurante "Serbian Crown" cerró sus puertas después de casi 40 años de actividad. ístas son las razones.
Conocido por ofrecer carnes exóticas, desde caballo hasta canguro, Serbian Crown recibía a comensales en busca de una verdadera aventura gastronómica. "Solíamos tener oso, pero la carne de oso fue prohibida";, explicó Rene Bertagna a Wired.
Sin embargo, como el león no es una especie en extinción sino que vulnerable, las leyes estadounidense permiten criarlos en cautiverio para luego sacrificarlos para consumo humano.
A comienzos de 2012 Bertagna constató una súbita caída del 75 por ciento en los clientes que frecuentaban el establecimiento durante los fines de semana. La tendencia en la disminución de los clientes continuó durante meses y el dueño no parecía encontrar explicaciones a lo que sucedía.
Inevitablemente las ganancias cayeron y Bertagna se vio obligado a despedir a parte del personal. No obstante, no se quedó de brazos cruzados: sabía que algo extraño ocurría.
¿Qué pasó? Un día Bertagna recibió el llamado de uno sus clientes habituales. "¿Por qué está cerrado el sábado, domingo y lunes? ¿Qué está pasando?";, le preguntaron. Ese llamado lo alertó. Comenzó a investigar hasta que descubrió de que había sido víctima de un hackeo en los anuncios de Google.
El directorio "Google Places";, el buscador inmenso de negocios en red, reportó fallas al dueño de Serbian Crown. Todo aquel que consultara "Serbian Crown"; en Google Places recibiría la información errónea: es decir, que estaría cerrado durante el fin de semana, por ejemplo.
Para un restaurante que queda en las afueras de la ciudad es grave, repasa el artículo. "Donde se encuentra Serbian Crown no es común";, comentó a Wired el abogado de Bertagna, Christopher Rau. "No queda en el camino de nadie; si vas allí es porque lo planeaste y a menos que sepas que va a estar abierto, no vas";, agregó.
Bertagna, de 74 años, asegura no tener computadora y apenas escuchó sobre Internet y Google, nunca los utiliza para nada. Lo que nunca supo es que el motivo por el cual su negocio se arruinaba era por ese elemento que desconocía. Entonces, fue momento de decidirse y tomar cartas en el asunto. Contrató un consultor web y así reparó los errores que se extendían a lo largo y ancho de Google Places.
Pese a esa resolución, Bertagna se vio obligado a cerrar el restaurante: los números no cerraban.
En respuesta, culpó a Google y demandó a la empresa en la corte federal en Virginia. La defensa de su abogado se reduce a explicar que otro restaurante, la competencia, jugó sucio y lo saboteó a través de Internet. Google se pronunció al respecto: "Serbian Crown no puede culpar a Google con tales afirmaciones infundadas";.
Efectivamente ocurre que debajo de una "interfaz pulida y cristalina visión de GPS en todo el mundo";, escribe Wired, "Google Maps irrita con las rivalidades locales, ajustes de cuentas y el engaño";. Hay negocios que ven alterados sus anuncios por la competencia: cambian el domicilio, el número de teléfono o el contacto de la página web.
La presa fácil son las pequeñas empresas. Mike Blumenthal, consultor web de Barbara Oliver & Co Jewelry, comentó que "tuve un cliente cuyo número de teléfono fue modificado (…) Fue un pequeño diseño interior de la tienda minorista; seguí de nuevo a un competidor que deja una huella";.
Según expertos, Google Maps es alterable porque se trata de una "massive crowdsourcing";, es decir, un concepción compartida del mundo en la que existen aquellos que están capacitados para modificar informaciones y herramientas como Google Places, entre otros sitios.
Blumenthal es optimista: "Google ha mejorado mucho en la vigilancia de ediciones maliciosas, hasta el punto en que son poco frecuentes en la actualidad";.
En lo que se refiere a Serbian Crown, el restaurante de Bertagna, será difícil que se pueda demostrar una relación de causalidad entre las fallas de Google Maps y el anuncio nefasto que terminó con su negocio.