El ministerio habilitó la experiencia piloto en octubre del año pasado con el fin de controlar el proceso de desarrollo y propagación de la niebla frente a la escuela 18, ubicada sobre la ruta 3, a la altura del kilómetro 83,500. El objetivo es evitar los problemas de visibilidad en un tramo de 200 metros de la ruta 3, el que puede volverse "muy peligroso" para los niños que cruzan la carretera, según se argumentó en su momento.

Sin embargo, en los últimos días surgieron algunos cuestionamientos a la experiencia por parte de residentes del lugar que denuncian contaminación sonora.