Aprovechando el trigésimo aniversario del Super Mario Bros, los desarrolladores de Nintendo mostraron el proceso creativo tras el diseño de los primeros niveles del famoso videojuego.

Éste consistía en dibujar todos los elementos de cada etapa (terreno, bloques, villanos) sobre una hoja cuadriculada. Los diseñadores incluían después modificaciones en papel para calcar, ya que las limitaciones en el desarrollo de código de la época no permitían cambios una vez programado el nivel.

"En aquellos tiempos, teníamos que diseñar todos los niveles a mano sobre el papel", explicó el diseñador Takashi Tezuka en un video proyectado durante una conferencia en el E3 2015.

Shigeru Miyamoto, el "padre" de Super Mario, reconoció que sus diseños se basaban en el recorrido que a él le gustaría jugar y se convertían finalmente en el primer nivel del segundo mundo, ya que el primer nivel exigía un grado de dificultad muy bajo al servir de tutorial para los nuevos jugadores.

Este primitivo método de diseño también habría servido como inspiración para la creación de Super Mario Maker, una herramienta para crear niveles personalizados con la estética y las mecánicas de los primeros juegos.